OPINIóN
Puntos de vista

En un mundo político binario, Javier Milei es republicano

“Milei alardea sobre la democracia en Venezuela, pero no defiende la democracia en Argentina; se atrevió a decir que iba a gobernar con o sin el Congreso de la Nación”, sostiene la autora y advierte sobre las falacias de la falaz mirada dicotómica del mundo.

Javier Milei y Nicolás Maduro tuvieron un entredicho
Javier Milei y Nicolás Maduro tuvieron un entredicho | NA

En Argentina todo es muy intenso, y todo suele decodificarse en modo binario.

Hoy Javier Milei es súper republicano porque le pone los puntos al dictador Nicolás Maduro. Y Maduro le hace un favor monumental a Milei, contando en medios masivos sobre sus amigos peronistas-kirchneristas. Así, la oposición kirchnerista a Milei es observada por los ciudadanos del mundo como amiga de la dictadura de Maduro (lo cual en gran medida es cierto), y entonces Milei está del lado republicano.

Y así transita nuestra básica mirada binaria de las cosas.

Esto no les gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
Hoy más que nunca Suscribite

Pero comprender la política y los políticos de modo binario suele distorsionar la realidad. Y la distorsión de la realidad nos hace vivir en un mundo de mentiras o simulaciones.

El Gobierno desmintió a Mondino, quien proclamo ganador de las elecciones en Venezuela a Edmundo González Urrutia

Milei no es un republicano. Milei se parece tanto a Cristina, que cantidad de kirchneristas lo votaron y hoy trabajan junto a él. Milei entiende los vínculos bajo el esquema amigo-enemigo. Para Cristina los malos eran la Corpo encarnada en especial en el grupo Clarín y los jueces y fiscales que pretendían investigar sus irregularidades en su deber de funcionaría pública. 

Milei con la Justicia la lleva de modo más amigable, pero al Congreso lo desprecia, porque no todos los legisladores opinan como él y entonces son casta o personas non gratas. Milei, al igual que Cristina, se enoja también con los medios y periodistas que no lo adulan o no piensan igual que él. 

Milei defiende la democracia en Venezuela, defiende la división de poderes en Venezuela y esto nos gusta, a mí me gusta y ahí paso a ser por unos minutos del “Milei team” (del team “personas contra Maduro”).

Nicolás Maduro es un líder antidemocrático, un represor y un ser nefasto en la historia política mundial. Y que Milei lo enfrente y lo critique es genial. Pero esto no significa que Milei sea genial"

 

Milei no cuida ni respeta a la República Argentina, pero cuando advierto que lo binario es falaz, caigo en la cuenta que Milei alardea sobre la democracia en Venezuela, pero no defiende la democracia en Argentina, por eso se atrevió a decir en varias oportunidades que iba a gobernar con o sin el Congreso de la Nación, y por eso elije como juez de la Corte Suprema de Justicia a Ariel Lijo, un juez que tapó por años los “chanchullos” de dirigentes políticos y que no blinda la labor judicial respecto a los intereses políticos.

Miguel Ángel Pichetto: "Le piden a Maduro, que es el Conde Drácula, que vaya a donar sangre al hospital"

Nos mareamos muy fácil, porque en Argentina tiene que haber buenos y malos, y cuando alguien es muy malo como un dictador represor como Maduro, el que se le enfrenta al dictador represor es bueno, entonces Milei es bueno.

La Argentina binaria es falaz.

Milei está rodeado de peronistas, massistas, kirchneristas que lo votaron y que trabajan junto a él, peronistas de los 90 que tuvieron excelentes vínculos con los Kirchner. No existe Milei vs Cristina, sino Lijo jamás sería el candidato a ocupar un súper cargo de juez de la Corte de la Nación.

Milei alardea sobre la democracia en Venezuela, pero no defiende la democracia en Argentina, por eso se atrevió a decir en varias oportunidades que iba a gobernar con o sin el Congreso de la Nación, y por eso elije como juez de la Corte Suprema de Justicia a Ariel Lijo"

Ojalá Milei respete al periodismo y a los medios argentinos que no piensan cómo él; ojalá deje de despedir gente de su gabinete argentino que emite una opinión que no coincide con la suya; ojalá no se atreva nunca más a decir que va a gobernar con o sin el Congreso de la Nación Argentina. 

Milei no ordena clausurar medios de comunicación, ni persigue ni detiene forzosamente a personas para torturarlas o matarlas. Pero Milei no es un republicano. Y defiende a la República Bolivariana de Venezuela –tal su verdadero nombre- en una puesta en escena como súper liberal ante el mundo"

Nicolás Maduro es un líder antidemocrático, un represor y un ser nefasto en la historia política mundial. Y que Milei lo enfrente y lo critique es genial. Pero esto no significa que Milei sea genial. 

El déjà vu venezolano y la militancia del “like”

Milei no cuida ni respeta a la República Argentina, y lo viene demostrando hace casi ocho meses, maltratando o ninguneando a periodistas, funcionarios y legisladores que no opinan cómo él. Y despidiendo a funcionarios que no opinan cómo él. 

Y con esto no estoy diciendo que Milei se parece a Maduro porque no se parece a Maduro. Milei no ordena clausurar medios de comunicación, ni persigue ni detiene forzosamente a personas para torturarlas o matarlas. 

Pero Milei no es un republicano. Y defiende a la República Bolivariana de Venezuela –tal su verdadero nombre actual- en una puesta en escena como súper liberal ante el mundo, mientras en Argentina se muestra profundamente reaccionario con cantidad de ciudadanos, funcionarios e instituciones que no coinciden con su ideario anarco capitalista.

Milei se enoja con las dictaduras de izquierda, pero no es un republicano de derecha.