“El destino no está escrito en las estrellas, sino en nuestras propias acciones” (Omar Khayyam)
Dicen las maravillosas estrofas que nos legó María Elena Walsh que: “en el Reino del Revés … nada el pájaro y vuela el pez …un ladrón es vigilante y otro es juez y que dos y dos son tres.
Transcurrido ya casi un cuarto del Siglo XXI resulta muy acertada esta descripción del Siglo XX, del que nuestra mal nombrada “sociedad” se niega aun a aprender.
Primera mitad del Siglo XX, masacres de izquierda y derecha
L. Mises (1927) denunciaba justificadamente que para la III Internacional Comunista todos los medios estaban permitidos en la lucha para conseguir sus fines últimos (el poder)… y el que no acepte incondicionalmente sus enseñanzas como las únicas correctas y no las siga ciegamente será liquidado… destruyendo a él y a su familia, incluidos los niños…”
Efectivamente durante 1918–1922 León Trotski lideró el “terror rojo" causando miles y miles de detenciones y ejecuciones sin proceso judicial por la Cheká y la agencia de inteligencia militar bolchevique GRU.
Pero el mismo Mises se equivocaba trágicamente al juzgar benévolamente al fascismo naciente:
“No se puede negar que el fascismo y todas las tendencias dictatoriales análogas están animados por las mejores intenciones, y que su intervención ha salvado por el momento a la civilización europea. Los méritos adquiridos por el fascismo permanecerán por siempre en la historia… El fascismo fue un arreglo provisional; pensar que es algo más sería un error fatal.”
Obviamente no fue nada de eso, tal como pareció darse cuenta ese autor en 1944 al pedir: "aplastar el nazismo" y "luchar desesperadamente hasta que el poder nazi quede completamente destruido”.
Recordemos algunos “conceptos fundamentales” hitlerianos: "ante Dios y el mundo, el más fuerte tiene el derecho de hacer prevalecer su voluntad", “con humanidad y democracia nunca han sido liberados los pueblos"; la guerra, es el momento para eliminar enfermos incurables (unos 250.000 que sufrían retrasos mentales, enfermedades y discapacidades físicas asesinados por el programa "T-4" con lamentable complicidad de muchos médicos y enfermeras).
Recordemos algunos 'conceptos fundamentales' hitlerianos: 'ante Dios y el mundo, el más fuerte tiene el derecho de hacer prevalecer su voluntad', 'con humanidad y democracia nunca han sido liberados los pueblos' "
Sin contar combatientes, la derecha nazi fue responsable de asesinar a 7 millones de civiles rusos, 6 millones de judíos, 3 millones de civiles polacos, 312.000 serbios, 250.000 gitanos, 70.000 homosexuales, y miles de opositores alemanes y de los países ocupados.
La “dictadura del proletariado” de Stalin, asesinó también a todo aquel que pensara distinto; cosechando sus propios “logros” en millones de muertos. Aunque “solo” se contabilizaron 777.795 ejecuciones judiciales, se deben considerar también los muertos entre 1.713.000 deportados a Gulags, la masacre de 22.000 intelectuales polacos en Katyn, la muerte de 3,9 millones de ucranianos en Holodomor y 1,1 millón en otras zonas debido a una intencional hambruna.
El nazismo está en todas partes
Estas ideologías de izquierda y derecha, fueron el “soporte programático” de la destrucción y muerte de millones de personas, en la que solo primaron dos cosas: la supremacía de la lucha por el poder absoluto y el desprecio total por la vida humana.
Segunda mitad del Siglo XX… algunos aprendieron otros no
Europa occidental más que ninguna otra área aprendió la lección, entendiendo la necesidad de reconstruir las naciones sobre la base de trabajo mancomunado y acuerdos programáticos entre centro- izquierdas y centro-derechas, confluyendo en “políticas de Estado” compatibles con el desarrollo económico y el bienestar de sus habitantes.
En 1959 el Partido Socialdemócrata Alemán, marcó en su Programa de Godesberg el cambio trascendental que influiría sobre todas las socialdemocracias europeas. Abandonó el marxismo negándose a “proclamar verdades últimas”, y adscribió a la democracia como valor superador.
Según este Programa la libertad, la justicia y la mutua obligación derivada de la común solidaridad, son compatibles con la economía de mercado y la propiedad privada; la proclama fue: “competencia donde sea posible, planificación donde sea necesaria”.
Los lectores no deben olvidar que estas ideas permitieron a un país primero destruido y luego extremadamente competitivo de 63 millones de habitantes (RFA), integrar en 1990 con iguales derechos y beneficios, a otro -mal llamado democrático -de 16 millones (RDA).
No solo Alemania sino muchos de los países de la Comunidad Europea, han logrado con democracia, desarrollar esa síntesis entre competencia y desarrollo económico; esto junto con políticas de bienestar, cobertura universal de salud y seguridad social.
La clave fundamental fue: no robar, sin capitalismo de amigos y una justicia independiente con igualdad ante la Ley capaz de castigar a quienes la infringen.
Lograron amaestrar a los nacionalismos genocidas de los Balcanes, extendiendo criterios inclusivos a países de la otrora ‘cortina de hierro”. Por ello, dictadores de derecha como Putin tratan de dañarlas, ya que democracias exitosas son la antítesis de su ideal de gobierno (una dictadura autocrática).
Muchos de los países de la Comunidad Europea, han logrado con democracia, desarrollar esa síntesis entre competencia y desarrollo económico"
Mientras los europeos recorrían estos senderos, los africanos generaron millones de muertos en múltiples genocidios como los de Zaire, Ruanda y Sudán. En Corea del Norte ninguna libertad es posible; y, en 1989 la llamada China comunista, aplastó las exigencias de democratización asesinando a 2000 estudiantes y obreros en las “masacres de Tiananmen”.
Con dictaduras y populismos de derecha e izquierda en igual contexto, los latinoamericanos estuvimos perdiendo tiempo y, muchos, la vida. Entre 1945 y 1990 deplorables dictaduras militares de derecha tomaron el poder en Bolivia, Uruguay, Argentina, Chile, Paraguay, Ecuador Brasil, Colombia, República Dominicana, Guatemala, Honduras y El Salvador.
Con la excusa y “bandera anticomunista” se asesinó a miles de personas inocentes y se acumularon nuevas fortunas robando a quien solo se pudiera.
En triste contradicción al liberalismo que suponía admirar, Hayek afirmó entonces: "la libertad de elección debe ser más practicada en el mercado en vez de las urnas, la libre elección puede al menos existir bajo un régimen de dictadura, pero no bajo una democracia sin límites que no pueden limitarse".
Entre 1959 y 2015, organizaciones de derechos humanos han documentado 7.062 muertes y desapariciones en Cuba. Se indican 3.116 fusilamientos, 1.166 ejecuciones extrajudiciales, 123 desapariciones, 315 muertes por negligencia médica y 146 suicidios por causas políticas. No está registrada la fuerte persecución y muerte de homosexuales de ese gobierno.
Quienes tuvimos la suerte de visitar esa hermosa isla, pudimos observar la bondad y miseria de la gente junto con el control parapolicial, industrias y talleres abandonados, tierras improductivas y el fenomenal relato excusatorio del bloqueo.
Debemos señalar que la familia Castro acumuló una fortuna incalculable, sus hijos y nietos se han auto-filmado usando autos y embarcaciones de altísima gama. Aún hoy continúan censurando las libertades, y han empeorado las condiciones de alimentación y salud de la población.
El populismo
Como señala Álvarez Junco: “A diferencia de las formas de participación liberal que buscan implementar un sistema basado en la institucionalización de la participación popular y el imperio de la ley (en democracia), las formas populistas se basan en una incorporación estética o litúrgica, más que institucional”.
Sin lugar a dudas esto ha sido el peronismo, un populismo inspirado en el fascismo italiano de derecha, con improductivo capitalismo de amigos y estructuras sociales corporativas tan profundamente arraigadas en nuestro país.
La versión de izquierdas de ese mismo peronismo de los 70’s (Montoneros), fue aún más deplorable y violenta que su progenitor, aunque convivió en esa época con su hermanastro de derechas de igual calaña (AAA).
La interacción cómplice de revolucionarios, peronistas y militares “logró” generar una de las mayores matanzas de las que la Argentina haya tenido memoria.
Un siglo XXI con poco aprendizaje
En este Reino del Revés en el que estamos sumidos, estos hechos son olvidados y por ende conceptos fundamentales son trastocados, confundidos, bastardeados.
Los recurrentes populismos antidemocráticos, las reacciones actuales de la izquierda latinoamericana, la por ahora abortada elección de Venezuela y algunas reacciones libertarias demuestran que no hemos aprendido suficiente.
Nubla la razón, el apoyo de autorreferentes de izquierda a los movimientos musulmanes de extrema derecha como Talibanes, Dáesh, Isis, Hezbollah, Jihad y Hamas, especializados en asesinar civiles preferentemente mujeres y niños, De igual modo también estos se conectan “íntimamente” con el régimen teocrático y asesino de niñas de Irán.
Aún más absurda es la defensa de entidades LGBT a estas organizaciones extremistas, ya que en países musulmanes son perseguidos (al igual que en Rusia), torturados y asesinados.
El problema no es el socialismo como repiten los libertarios, sino la ignorancia y las dictaduras de izquierda y derecha que aplastan las libertades. Concentran la “suma de poderes” mediante golpes de Estado, o a través de elecciones (como Hitler, Putin y Maduro), desarticulando instituciones para autoperpetuarse en el gobierno mediante represión y crímenes de lesa humanidad.
¿Parece conocido? abusando de la alegoría de Walsh, agreguemos entonces una nueva estrofa que diga: en el Reino del Revés la extrema derecha y la extrema izquierda sen dan la mano… intentando aplastar todo lo humano.
Decía Alberdi que la planta de la civilización no puede propagarse con semillas, al igual que la viña solo prenderá de sus gajos; por tanto, copiemos lo logrado por los europeos - haciendo por una vez - bien las cosas.
