Los cambios siempre traen aparejados, indefectiblemente, una reacción de parte de aquellos sobre los que impacta. Recuerdo cuando antes el colectivero cobraba y entregaba un boleto al mismo tiempo que manejaba. Apareció la máquina para que la gente pagara con monedas y les entregara el boleto. Luego eso cambió y apareció Monedero, primero como tarjeta de contacto, año 2006, y luego como la primera billetera virtual del país, que desarrollamos en conjunto con el Grupo Roggio, en el año 2011.
El principal objetivo de Metrovías, empresa de Roggio y concesionaria del Subte de Buenos Aires en ese momento, era que los usuarios no tuvieran que circular con plata y que la distracción del chofer sea la menor posible. Todos estos cambios provocaron primero enojo en la población y luego miedo e incertidumbre porque era sacarlos de su zona de confort. Hoy nos parece impensado que alguien que está manejando nos cobre y entregue algo al mismo tiempo.
Sin dudas, desde aquella Monedero que al principio servía solo para pagar el subte, luego el transporte público en general y que, por último, se extendió a pagar bienes y servicios, las billeteras virtuales han evolucionado hasta volverse imprescindibles para cualquiera.
La apertura de la SUBE a otros medios de pago permitirá el aumento de la bancarización de la población, lo que llevará a una mayor inclusión financiera. A su vez, esto va derivar en un incremento en la competencia entre proveedores de servicios de pago que puede concluir en mejoras de experiencia y reducción de costos para el usuario final.
El rol de las fintech con la apertura de la SUBE
En este sentido, las fintech van a tener un rol crucial en la implementación de este decreto, ya que su agilidad y capacidad innovadora en el desarrollo de nuevas tecnologías focalizadas en la experiencia del usuario va a facilitar la rápida adopción del modelo. Esto traerá aparejado, al mismo tiempo, la capacitación de los usuarios para extremar las medidas de seguridad que incluye: protección de datos personales y financieros de los usuarios y la prevención del fraude.
El impacto de la apertura de la SUBE será determinante para los usuarios pero también para los proveedores de servicios de pago porque les exigirá que haya mejoras en la experiencia del usuario y una reducción de los costos. A mayor competencia, mayor calidad en el servicio. Se trata de una evolución natural que va en camino a la eficiencia, reduciendo el tiempo de transacción y ofreciendo nuevas funcionalidades.
Definitivamente, al integrar tecnologías de pago modernas y accesibles en servicios diarios esenciales como el transporte público, se promueve el uso de soluciones digitales, aumentando la familiaridad y confianza en estas tecnologías entre la población general. Sin dudas, esta apertura colaborará con la inclusión financiera que repercutirá en la vida de los usuarios. Como todo cambio, hay que esperar su verdadero desarrollo e impacto sobre quienes habitualmente toman medios de transporte.
*Founder y chairman de Callao Holding y B2FI. Ejecutivo experimentado con más de 20 años dedicados a las finanzas tecnológicas: fintech, procesamiento de pagos, bancos físicos y virtuales y pagos digitales
