El gobernador de Corrientes, Gustavo Valdés, realizó un balance de su reciente encuentro con el presidente Javier Milei y expuso su malestar por el incumplimiento de acuerdos en materia de obra pública y la política fiscal del Gobierno Nacional, a la que calificó como "centralista".
Karen Reichardt: "Todavía no leí el reglamento, es tedioso"
Valdés reconoció que el esfuerzo del Ejecutivo está puesto en resolver la macroeconomía y que hay predisposición al diálogo, lo cual valoró como positivo tras los cambios en el Gabinete. Sin embargo, en el ámbito de gestión provincial, la situación es de incumplimiento.
Falta de obra pública y deuda de Nación
El mandatario correntino reveló un acuerdo de asistencia que la provincia realizó con el Gobierno Nacional:
"Nosotros firmamos con el gobierno un convenio donde para ayudar al gobierno nacional en la difícil situación. Asumimos obras que son de Nación y que eran obligaciones fiscales y contractuales de Nación por cerca de 60 millones de dólares", detalló Valdés.
A cambio, la Nación se había comprometido a hacerse cargo de tres obras nacionales en la provincia, pero el incumplimiento fue casi total: "Una la está cumpliendo a medias (Autovía 12) y las otras dos las dio de baja (planta de residuos cloacales y pavimentación de la Ruta nacional N.º 123). O sea, nosotros cumplimos y la Nación no ha cumplido".
"Nos sentimos, para decirlo de alguna manera, incumplidos, insatisfechos", sentenció el gobernador, recordando que el Gobierno Nacional se queda con el 65% de todos los recursos del país y tiene la responsabilidad de ejecutar rutas y puentes nacionales.
Crítica a la reforma fiscal y los impuestos distorsivos
Consultado sobre la necesidad de una reforma fiscal, Valdés apuntó directamente contra los impuestos nacionales distorsivos, como las Retenciones y el Impuesto al Cheque.
Valdés afirmó que es necesario que la Nación comience a "generar y a dejar de saquear a las provincias argentinas" antes de discutir un nuevo sistema tributario, ya que la alícuota fiscal de Corrientes es una de las menores del país.
"Todos estos 200.000 millones de dólares se quedó solamente la Nación argentina, no coparticipó absolutamente un peso. Permanentemente la Nación va generando impuestos sobre todos los argentinos para saquear a las Provincias", enfatizó.
Dura crítica a Lousteau y el futuro de Provincias Unidas
En el plano político, Valdés, quien preside la UCR Corrientes, apuntó contra la conducción nacional del radicalismo:
"La conducción de Martín Lousteau fue una conducción a contrapierna, la mayoría del radicalismo tenía una visión diferente de la del presidente del partido", sostuvo en declaraciones a radio Rivadavia.
El gobernador insistió en que el radicalismo necesita un proyecto nacional para recuperar su vocación de poder y dar claridad al electorado, y se mostró a favor de acompañar una reforma laboral en consonancia con la modernización que el partido impulsa desde la época de Alfonsín.
Respecto a la experiencia de Provincias Unidas, Valdés valoró los casi 1.700.000 votos obtenidos y reafirmó el compromiso de defender el sistema federal y buscar consenso, lamentando que la polarización impidiera "romper la grieta".