Tras la confirmación de YPF y Petronas de la construcción una planta de GNL que demandará una inversión de US $30.000 en Río Negro y no en Bahía Blanca, Julián Gadano declaró que no cree que la elección solamente haya sido motivada por la “relación poco clara de Buenos Aires con el RIGI“. “El puerto de Punta Colorada tiene una profundidad natural muy interesante y, al ser nuevo, el puerto hay mucho potencial”, sostuvo en Modo Fontevecchia, por Net TV, Radio Perfil (AM 1190) y Radio Amadeus (FM 91.1)
Julian Gadano es sociólogo, profesor de la Universidad de San Andrés y director de Política Nuclear de la Fundación Argentina Global. Fue secretario de Energía Nuclear de la Nación del 2015 al 2019.
Alejandro Gomel: ¿Qué visión tiene del contrapunto entre el Gobierno nacional y el bonaerense por la planta de gas que finalmente se v a hacer en Río Negro?
Sobre la discusión política que hay detrás no tengo mucho para decir. Lo que hubo es una competencia entre dos provincias, alguna con ventajas sobre la otra, para recibir una de las inversiones más grandes en la historia de nuestro país en relativo largo plazo. Además, implica un gran cambio en la relación de Argentina con el mundo, porque nos consolidaría como exportadores de energía.
Esa disputa se daba entre el puerto de Bahía Blanca, que está muy desarrollado y tiene ventajas y desventajas vinculadas a su desarrollo, y un area nueva que ya empieza a recibir algunos proyectos, que es el área de Punta Colorada en el Golfo San Matias, en el municipio de Sierra Grande al sur de Rio Negro. Finalmente, YPF y su socia Petronas se decidieron por Rio Negro.
Hay una serie de factores que se tuvieron en cuenta, no es solo el RIGI. El área de Punta Colorada tiene una profundidad natural muy interesante. Cuando fuí secretario de Energía se estudió esta área porque se pensó instalar un reactor nuclear ahí. Efectivamente, tiene características naturales que la hacen favorable. Además, los dos lugares están a distancias similares de Vaca Muerta. Probablemente actuaron esas condiciones naturales y el RIGI. No estoy en la cabeza de los que decidieron, pero por lo que uno lee, el RIGI actuó a favor de la provincia de Río Negro, que fue muy proactiva en adherir al RIGI con velocidad.
Elizabeth Peger: Tampoco se trata de un proyecto que se inició hace unos pocos meses. Hace por lo menos 3 años que se estudia el proyecto y siempre se barajó el puerto de Bahía Blanca. No existía como alternativa el puerto de Río Negro.
Efectivamente, el proyecto tiene un tiempo. Es importante tener en cuenta que YPF, más allá de que sea una empresa mixta y que el Estado sea su accionista, se mueve como una empresa y tiene un socio privado. No tendería a pensar que el motivo por el cual YPF y Petronas eligieron Río Negro es político. Las empresas no toman decisiones de esta envergadura por motivos políticos. Seguramente el RIGI actuó como catalizador y hubo mucha proactividad de los gobernadores patagónicos.
EP: La proactividad de los gobernadores patagónicos habla de una gestión política.
Por supuesto, pero me parece que los argumentos para convencer a las empresas fueron económicos. Todo tiene sus ventajas y desventajas: Bahía Blanca está consolidada industrialmente, tiene mano de obra, infraestructura, pero la provincia de Buenos Aires tuvo una relación poco clara con el RIGI y eso le jugó en contra. Además, al evaluar el área de Bahía Blanca, hay que tener en cuenta que hay cierto nivel de saturación. Pero la decisión no la tomé yo.
El puerto de Punta Colorada tiene la ventaja de que al ser nuevo, hay mucho potencial, y la desventaja de que justamente está todo por hacerse. La región sur de la provincia de Río Negro necesita tener polos de desarrollo. Cuando nosotros discutimos la central nuclear, fuimos a Sierra Grande, porque el debate fue similar, y el Gobierno no tenía el mismo sello político que el actual. La idea era armar polos de desarrollo por fuera de donde ya existen.
AG: ¿Cómo ve la gestión actual de Eduardo Rodríguez Chirillo al frente de la secretaría de Energía?
Está llevando adelante una reforma de acuerdo a lo que considera que tiene que hacer en un contexto muy difícil. Hace 15 años que Argentina funciona por fuera de las reglas que determina cómo debería funcionar el mercado de energía. Tenemos una ley, la 24.075 sancionada en la década del noventa, que determina cómo debería funcionar el mercado eléctrico, pero no se cumple en la práctica hace años.
Para el secretario de Energía, el aumento de hasta 130% en luz "no es significativo"
Hay que destacar los esfuerzos que hace la secretaría de Energía para ordenar eso y que el mercado funcione como tal. Ese me parece el rol más destacable de la secretaría hoy.
TV FM