El consultor político, Juan Courel, aseveró que "lo más probable es que Javier Milei sostenga su posicionamiento agresivo". La importancia del debate de este domingo, cómo deberían encararlo los candidatos, y lo que aporta una encuesta de panel, en Modo Fontevecchia, por Net TV, Radio Perfil (AM 1190) y Radio Amadeus (FM 91.1).
Nuria Am (NA): ¿Cómo estás viendo el panorama en general? ¿Qué creés que puede aportar el debate del domingo?
El panorama general que se ve es que continúa un escenario muy similar al que había antes de las primarias, de bastante paridad entre los tres candidatos.
Quiénes son los que votan a Bullrich, Milei y Massa
Una duda que cabía después del resultado que lo puso primero a Javier Milei era si se despegaría lo suficiente como para acercarse a una victoria en primera vuelta. No da la sensación de que Milei vaya a ganar en primera vuelta, no se están desmoronando sus otros dos contendientes, pero sí pareciera ser que se consolida en su primera posición.
Después, la otra duda que queda es si Sergio Massa es el que llegará al balotaje. La mayoría de los estudios de opinión pública indican eso, pero con una diferencia tan chica entre los tres es muy difícil que una encuesta anticipe ese resultado.
Sí hay algunas señales en el debate público que favorecen a esa hipótesis y que tienen que ver, sobre todo, con el posicionamiento que cada uno de los tres está asumiendo, y ahí creo que está el de Massa, en defensa de una identidad partidaria, política e ideológica clara, tal vez, parece ser más competitivo que el de Bullrich, que actualmente se quedó en el centro, es decir, entre el cambio radical que es el que expresa Milei y la ubicación más cercana al oficialismo y peronismo.
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Dentro de esta paridad, el debate cobra cierta relevancia porque cuando hay una elección reñida cualquier cosa puede mover el resultado hacia un lado o hacia el otro. No olvidemos que en la primaria, entre el primero y el tercero hubo solo dos puntos de diferencia. Si Bullrich o su coalición hubieran sumado un punto más, no estaríamos hablando tanto de quien estamos hablando, y el escenario sería distinto sobre quiénes entran a una segunda vuelta.
Por lo tanto, cualquier cosa que pase en la campaña puede ser muy gravitante porque puede influir en esos pequeños márgenes de las campañas. Ahí el debate presidencial se está convirtiendo en el evento más conversado, comentado u observado, con mayor audiencia de las campañas, por lo que en ese sentido hay que prestarle atención.
Alejandro Gomel (AG): ¿Cómo te imaginás o te parece que debería pararse Massa, con este doble rol de ser ministro de Economía y candidato? ¿Cómo debería encarar el debate?
Entre el Fenómeno Milei y el Milagro Massa
Massa, paulatinamente están intentando sumar, con las medidas económicas, en un discurso que era meramente defensivo, que era con el slogan de defender a la Patria, y con eso tratar de conseguir una analogía respecto a la a defensa de derechos que la gente no quería perder. Eso está derivando en una promesa de mejora económica que está asociada a estos anuncios, pero hay que ver si la gente los lee en clave electoral o creen que son el principio de algo que puede ser mejor.
Él viene intentando mostrarse aplomado frente a la radicalización de los discursos de sus dos rivales, sereno y no debería haber novedades en ese sentido. Lo imagino tratando de sostener su posición de que éste es el mejor rumbo posible, dado el mal contexto económico que hay.
Luego, lo más probable es que Milei sostenga su posicionamiento agresivo, de ese discurso tan encendido que lo hizo conocido. No lo veo moderándose ni yéndose hacia el centro, al contrario. Lo más probable es que sostenga lo que le dio resultado hasta ahora.
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Por su parte, Bullrich, tras unas primeras semanas en las que parecía tambalear, volvió a lo que la hizo también ganar su interna, que es ese antikirchnerismo rabioso.
Fernando Meaños (FM): Esta semana fue el debate de los candidatos a jefe de Gobierno porteño y ahí Ramiro Marra claramente puso como su enemigo a Leandro Santoro, el candidato del oficialismo. ¿Creés que eso se pueda repetir el domingo, es decir que Milei tratará de confronta más con Massa que con Bullrich?
Milei tiene más votos para ganar del electorado de Bullrich que de Massa. Es decir, hay más posibilidades de transferencia de votos, que están en disputa, entre Bullrich y Milei que entre Milei y Massa. Uno de los grandes incentivos para votar, es decir para votar a uno o al otro, es en contra del oficialismo.
Entonces, el que se muestre más capaz de vencer al oficialismo y de cambiar el actual estado de las cosas es probable que tenga un mayor margen de crecimiento en este electorado en disputa. Me imagino que sí va a tratar de mostrar un antikirchnerismo muy claro y firme, pero a la vez tendrá que decir "al kirchnerismo le puedo ganar yo, no le puede ganar ella".
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Si no existe ese cruce de costado, será más difícil que cumpla con ese objetivo. De todas maneras, él podría adoptar una posición conservadora, ya que tuvo un buen resultado en las primarias. En sus cálculos puede estar la idea de "yo no necesito hacer demasiado, los que necesitan hacer algo son los demás". En ese caso, lo más probable es que repita lo que viene diciendo en cada una de sus intervenciones.
FM: En ese plano, ¿qué cambios puede traer el debate? Es decir, ¿el debate puede realmente modificar el voto de mucha gente o en el medio de todo lo que hay quede en un segundo plano?
El debate es una instancia más de una campaña, donde hay millones o infinitos estímulos que le llegan al votante efectivamente.
Hace una semana, me invitaron a presentar un libro muy interesante que compilaron Daniela Barbieri y Augusto Reyna con la experiencia de Pulsar, que es un instituto de la Universidad de Buenos Aires que investigó el segundo debate del 2019 a través de una encuesta de panel, que es más sofisticada, de largo plazo y secuencial. Ellos sacan tres conclusiones que son muy interesantes.
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La primera es lo que decía, que los debates son una instancia más entre muchas otras que pasan en la campaña, pero es la instancia con mayor audiencia, alguna alcanzó 60 puntos de rating. Es decir, la gente mira el debate, no solamente cuando ocurre sino que se comenta antes y después. De hecho, hoy estamos hablando del que no sucedió
Se generan muchas repercusiones y contenidos tanto por parte de los partidos como de los medios o los usuarios de redes sociales, que multiplican el efecto de atención que sucede allí. Entonces, es un hecho más pero que genera mucha más concentración y atención.
La segunda es "¿genera algún efecto?", "¿la gente ve algo que no vio en los debates?". Eso pasa a ser más discutible. Lo que este estudio verifica es que la gente aprende un poco más o incorpora mayor información, genera una ganancia cognitiva respecto de los candidatos que tal vez no son los que esas personas más siguen.
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Por un lado, está que la cuestión de que todos estamos más expuestos a información sobre Milei, Massa y Bulrrich que sobre Juan Schiaretti y Myriam Bregman. La ganancia cognitiva en relación a los candidatos minoritarios es mayor, pero al mismo tiempo, si soy, por ejemplo, seguidor de Sergio Massa, es probable que me entere de menos cosas de las que dice Bullrich que las que menciona Massa, y ahí incorporaré información.
El tercer punto es "¿esto cambia mi intención de voto?". Eso es mucho más difícil de medir, pero en estas encuestas de panel lo que aparecía es que había pequeñas variaciones que, a medida que pasaban los días, se iban asentando. Por lo tanto, podríamos decir que no es que cambia tanto, algo sí, pero es como todo suceso observable en la comunicación política. Aisladamente, nada es determinante, pero todo va siendo una gotita que va perforando nuestras percepciones y lo que nosotros sentimos sobre cada uno de los candidatos.
NA: De todos modos, en este debate, a diferencia de otros, este jueves veía un promedio de 10 de encuestas y 9 de cada 10 dan esta diferencia que marcás. A Bullrich la ubican cuatro o cinco puntos por debajo de Massa, que puede ser el margen de error que maneja una encuesta.
Cualquier cosa que se haga o deje de hacer en el debate puede sumar o dejar de sumar. Que Milei radicalice más su discurso o que sea más moderado, que Bullrich trastabille al contestar, que Massa no sea haga cargo de lo hecho hasta ahora, ¿no te aparece que eso le aporta al debate una diferencia, en comparación con otros, que puede definir en este caso?
Por supuesto, pero sin mirar las encuestas. La primaria salió con dos puntos de diferencia entre el primero y el tercero, es mínima esa diferencia y cualquier cosa la puede cambiar.
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Siendo el debate la instancia comentada, observada y con mayor impacto en la opinión pública, naturalmente es algo que tiene mayor importancia que, tal vez, el posteo que pudiera subir a redes sociales hoy Milei.
AG: Me sorprende el dato del rating. ¿Un debate llegó a tener 60 puntos? Es como una final del Mundial.
Sí, eso no sucedió este miércoles con el debate de candidatos a jefes de Gobierno porteño, ni tampoco en el de vicepresidentes. Pero aquí es realmente una instancia que, quizá, en el pasado eran los actos de apertura y cierre de campaña, en otra eran los spots televisivos.
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Es una gran oportunidad para mostrarse, hacer conocido el discurso y sintetizar cuál es el mensaje central, visualizar la inteligencia emocional, el carisma, los atributos no verbales que tiene un candidato. Son momentos en los que hay que mostrarse y un candidato tiene que hacerlo.
BL JL
