Habitualmente cuando los analistas políticos hablan de “la madre de todas las batallas”, están aludiendo a la elección de la provincia más importante, la provincia de Buenos Aires, que concentra el 38% del total de los votantes. Nosotros además queremos hablar de la importante elección en la Capital Federal, y por eso decidimos introducir esta columna de Modo Fontevecchia, por Net TV, Radio Perfil (AM 1190) y Radio JAI (FM 96.3) con Milonga del conurbano, de Paula Castingola, una canción que utiliza el tango, tan característico del sueño porteño para hablar de los usos y costumbres de quienes están del otro lado de la General Paz.
Probablemente estemos asistiendo al mayor momento de fragmentación política desde el 2001, cuando el sistema de partidos estalló tras una rebelión popular que terminó con el gobierno de Fernando de La Rúa y el de 5 presidentes en una semana.
En la actualidad, los espacios tienen internas y en el caso del kirchnerismo, ya las internas son las de una fracción. Por otro lado, el PRO expresa su incomodidad en el Gobierno porque siente que su perfil y su electorado están siendo devorados por La Libertad Avanza (LLA), que representa una derecha mucho más radicalizada.
Es interesante plantear que es muy probable, o casi seguro, que LLA pueda ganar en la mayoría del país y que los dos lugares en disputa serán la Provincia y la Ciudad de Buenos Aires. Tanto el PRO como el kirchnerismo pretenden hacerse fuerte en su lugar de origen: en el caso del kirchnerismo, el Conurbano bonaerense, que arrastra todo el voto de la provincia; y en el caso del PRO, la Ciudad. Al mismo tiempo, para LLA, estos dos distritos también son la madre y la hija de todas las batallas. Si el oficialismo gana en todo el interior, lo que le permitiría ganar en el país, pero pierde en estas dos secciones, su triunfo sería uno menguado.
Estas internas en el peronismo por un lado y la derecha en sentido amplio por el otro, se dirimen localmente, en la provincia de Buenos Aires y en la Capital Federal respectivamente. A su vez, es probable que quienes resulten victoriosos de estas internas, probablemente terminen teniendo un protagonismo muy importante en las presidenciales del 2027. Vamos a compartir dos fragmentos que dan cuenta de estas internas a cielo abierto.
El PRO abre 2025 concentrado en la Ciudad y en frenar la salida a LLA
El 17 de octubre de 2024 durante un discurso, el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, declaró: “No me interesa disputar ninguna interna. Mi responsabilidad y mi mandato es el de conducir un gobierno que está dedicado, en las peores circunstancias, a ofrecer a los bonaerenses un escudo que proteja y atenúe lo que está haciendo Milei”. Lo que sí quiero hacer es colaborar con la construcción de una alternativa superadora”, aclaró.
Por su parte, el jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Jorge Macri anunció el desdoblamiento de las elecciones legislativas del distrito el 27 de diciembre de 2024 y sostuvo: “Conversé con muchos espacios políticos y coincidimos en dos cosas: en el valor de tener una agenda de discusión electoral que ponga el foco en los problemas de la Ciudad, pero además, en suspender las PASO”.
¿Qué es lo importante de todo esto? El PRO, dirigido por Mauricio Macri, pero ahora con una nueva cara visible, su primo, Jorge Macri busca validar su poder en la Capital para defender su poder político en su bastión y tener mayor poder de fuego en la negociación con La Libertad Avanza. Para esto, desdobla la elección, es decir le da un carácter de agenda local y trata de quitar las PASO. Esto hace que la discusión legislativa porteña se deslinde del balance del Gobierno nacional, que está en un buen momento, y le quita la posibilidad a los libertarios de hacerles una interna y, posiblemente, ganarles.
En la Casa Rosada, quienes están cercanos al estratega Santiago Caputo, dicen que los votos del PRO ya son de La Libertad Avanza y que a Macri hay que pasarlo por arriba. Esta intransigencia por parte de los libertarios y la lógica defensa de su perfil por parte del PRO, puede precipitar una ruptura en esta coalición. De producirse, quien inmediatamente tendría posibilidades de ganar la elección legislativa en la Ciudad es el peronismo, que no lo logra desde la primera elección de medio término de Carlos Menem. Así, el peronismo se beneficiaría de dividir el voto del centro y la centro-derecha que ahora el PRO comparte con La Libertad Avanza.
Este espacio se encuentra en una guerra fratricida en el seno de su sensibilidad mayoritaria, el kirchnerismo. Hay una pregunta flotando en el aire: ¿Kicillof desdoblará las elecciones bonaerenses? Si hace esto, probablemente se potencie su grado de pelea con el resto del kirchnerismo porque el gobernador quiere ordenar la lista con su gente, algo así como un “kicillofismo” naciente, mientras que Cristina Kirchner, que ahora es la presidenta del PJ, querrá hacer uso de la lapicera para el armado de las listas del peronismo.
Hay algo de la contradicción de Cristina que eligió a su candidato bonaerense, que ahora se le vuelve en contra, vamos a escuchar a Jorge Asís que hizo un análisis al respecto en Modo Fontevecchia el pasado 3 de enero. El exsecretario de Cultura afirmó que "poner a un tipo decente en la provincia del pecado fue un mérito de Cristina Kirchner". “En el peronismo tienen que llegar a algún acuerdo”, agregó. Se nota la formación literaria de Asís al decir “la provincia del pecado”.
Probablemente, lo más desmoralizante en las filas kirchneristas sea la nula discusión ideológica y política que hay en esta interna. ¿Qué diferencias reales puede haber entre Cristina Kirchner y Axel Kicillof? La discusión es puramente un tema de cargos y lugares de poder. Temas de casta, podría decir el presidente Javier Milei, quien de seguro encuentra eco social para estas afirmaciones.
Quien criticó a Cristina Kirchner por esta interna es el expresidente uruguayo y dirigente del Frente Amplio, Pepe Mujica. A fines de 2024, Mujica observó que a la exvicepresidenta le cuesta “largar el pastel”.
Para comprender que lo que está en discusión es que hay tres elecciones -una nacional, una bonaerense y una en la Ciudad-, hay que ir a la historia. Yendo hacia las razones históricas de la importancia de estas elecciones, probablemente uno de los hechos que más hayan modificado para siempre la fisonomía del país se dio con la cesión de la Ciudad de Buenos Aires que culminó la pelea entre La Confederación Argentina y el Estado de Buenos Aires. Luego de estos episodios de guerra civil, la Provincia de Buenos Aires tuvo que ceder su capital a la nación. Hasta ese momento, se había elegido a Paraná como la capital del país en el período entre 1853 y 1860.
El periodista Carlos Pagni analizó este período histórico en una entrevista en Futurock y mencionó: “Alem dijo que si se le quitaba la Ciudad de Buenos Aires a la Provincia, esta última iba a carecer de agenda política para siempre”. “¿Cómo fue la política de salud de Kicillof? Que se yo. No hay una agenda bonaerense, la pone la Nación”.
Además, el hecho de que se haya cedido la Ciudad de Buenos Aires como capital del país y que esta históricamente haya sido la zona más rica del país, atrajo a muchos trabajadores de diferentes partes del país y de Latinoamérica y con el deterioro de las condiciones de vida en la segunda mitad del siglo XX, se generó la concentración en el Conurbano pobre.
En este fenómeno complejo viven 1 de cada 4 argentinos y concentra gran parte de la pobreza del país. En el primer trimestre de 2024, la pobreza en el Conurbano fue del 62%, frente al 25,5% en la Ciudad de Buenos Aires, marcando una diferencia de 36,5 puntos porcentuales.
Además, entre el Conurbano y la Ciudad de Buenos Aires hay múltiples vasos comunicantes que la acercan día a día porque muchas personas viven fuera de la Capital pero trabajan allí. Esto lo hace una suerte de zona común con algunos elementos de agenda compartida. Además, la Ciudad y el Conurbano componen el 35% de la población, y el Conurbano sólo tiene más población que el resto de la provincia de Buenos Aires.
Esta complejidad en uno y otro lado de la General Paz tiene múltiples efectos políticos que proyectan candidatos, dirigentes y figuras de poder. Carlos Pagni también habló al respecto en Radio Con Vos y afirmó que la novedad del PRO es que es “un fenómeno surgido del 2001, no peronista y que, a diferencia del radicalismo, aspira a representar a los pobres”. “La pregunta de si se puede hacer política en esos barrios del Conurbano con el discurso republicano de mérito individual, meritocrático y pro-mercado”, observó.
Alem planteaba que si sacaba la Ciudad de la provincia de Buenos Aires, esta iba a carecer de agenda propia. Esto lo que hace es que quien es gobernador sea alguien del AMBA, y no un bonaerense de la Provincia. Tanto Kicillof, como Scioli, como Vidal son todos gobernadores porteños, mientras que nadie imaginaría un gobernador tucumano en Salta. Esto sucede porque hay una histórica unión entre los distritos de un lado y del otro de la General Paz, y parece ser que la batalla por estos dos es la batalla de supervivencia que tienen tanto el kirchnerismo como el PRO.
Ernesto Sanz, otro radical importante y un hombre clave en la unión de lo que fue Cambiemos, dijo que el gran problema del radicalismo fue perder la Capital, lugar que gobernaba hasta que el PRO lo desplazó. “Perdimos la sede central”, dijo. A partir de ese momento, el radicalismo se convirtió en una especie de confederación de partidos provinciales. Lo mismo podría sucederle a Cristina Kirchner si no ganase la provincia de Buenos Aires.
José Hernández dijo, a través del Martín Fierro, que primero se es toro en el rodeo propio para luego ser torazo en rodeo ajeno. Tal vez sea esta la estrategia de Jorge Macri por un lado y de Axel Kicillof por el otro. La política local, los gobernadores y los intendentes fueron quienes menos salieron golpeados por el desprestigio de la política encarnado en la figura de Javier Milei como significante. Los gobernadores e intendentes muchas veces son más percibidos cerca a la gente y de sus problemas diarios. Las obras se ven, los pequeños cambios focalizados y la solución de problemas prácticos tiene una mayor concretud, y para muchas personas que las grandes explicaciones de los dirigentes nacionales de por qué no se pueden resolver los grandes problemas están más allá de su comprensión.
Seguiremos analizando la importancia de estas elecciones que como dijimos serán decisivas para pensar la política nacional de los próximos años.
Producción de texto e imágenes: Daniel Capalbo, Pablo Helman y Matías Rodríguez Ghrimoldi.
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