MODO FONTEVECCHIA
EL EDITORIAL DE JORGE FONTEVECCHIA

Día 219: Preguntas calificadas, ¿un paso previo al voto calificado?

Manuel Adorni, vocero presidencial, anunció cambios para el acceso de periodistas a Casa Rosada, con el objetivo de crear una “sala de prensa de élite”. Qué rol cumple la libertad de prensa en un gobierno que busca restringirla a “privilegiados”.

Manuel Adorni
El vocero presidencial, Manuel Adorni, anunció cambios para el acceso de periodistas a Casa Rosada | Twitter

“El vocero presidencial Manuel Adorni aseguró que quiere una ‘sala de prensa de élite’, y para eso implementará un nuevo sistema de acreditación para los medios ‘según su alcance y su audiencia’. Como si esto fuera poco, remarcó que buscará ‘determinadas características de periodistas’, porque según él los periodistas debemos ‘demostrar que merecemos estar cerca del Presidente’”, explicó Jorge Fontevecchia en el editorial de Modo Fontevecchia, por Net TV, Radio Perfil (AM 1190) y Radio Amadeus (FM 91.1) del martes 16 de julio de 2024.

Mientras la selección de fútbol ganaba su segunda final de América consecutiva, un hecho de relevancia demostró cuál es la mirada sobre la comunicación política que tiene el gobierno. El vocero Manuel Adorni anunciaba una suerte de nuevo derecho de admisión a los periodistas que cubren Casa de Gobierno, un hecho que merece analizarse no sólo en sí mismo, sino en función de la idea de la democracia que maneja el Gobierno. 

Adorni anunció cambios para periodistas en Casa Rosada: "Que demuestren que lo merecen" | Perfil 

Esto no les gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
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“El dueño de la pelota” es una frase hecha que se utiliza para designar a un determinado tipo de persona o situación. Tiene sus orígenes en la representación colectiva que tenemos sobre la infancia, por lo menos los varones. El niño dueño de la pelota jugaba con otras reglas, tenía otros beneficios. Si había algo que no le gustaba o, en algunos casos, si su equipo iba perdiendo, podía irse y declarar el partido terminado: pensamos que Javier Milei y su equipo se comportan como aquel niño. 

La discusión política y el debate democrático son buenos, en tanto no lo critiquen, ahí agarra la Casa Rosada con las dos manos y solo invita a los periodistas que le dejan “hacer el gol”, por decirlo de alguna manera. Esta actitud del Presidente no es nueva. Desde que asumió, solo le da entrevistas a determinados periodistas. Entrevistas en las que faltan repreguntas o en las que los entrevistadores reafirman las palabras del entrevistado, algo totalmente erróneo desde el aspecto técnico del periodismo. No obstante, este paso de intentar restringir el acceso a la cobertura de la Casa Rosada es una acción llamativamente en contra de todo lo que el Gobierno pregona. Lo que comenzó con una restricción a la periodista Silvia Mercado, a quien injustamente le revocaron su acreditación a Casa Rosada, puede terminar con un acto casi de censura previa.

En la actualidad, los medios privados eligen al periodista que consideren más idóneo para cubrir cada sección, función o institución gubernamental. Lo hacen en función de un criterio periodístico y es una decisión del ámbito de la economía privada. Sin embargo, ahora, el Gobierno de la auto titulada “libertad”, que quiere terminar con la injerencia estatal y las regulaciones en los negocios privados, quiere decidir qué periodistas tienen que enviar las empresas de medios a la Casa Rosada. Esto es un grado de injerencia estatal que no tuvo ningún gobierno, ni siquiera los que sostienen la bandera de la injerencia estatal como el kirchnerismo, que tuvo múltiples arbitrariedades con la prensa, pero esa justamente no. Siempre fueron los medios los que elegían qué periodistas enviar a realizar las coberturas.

Ayer, el propio vocero presidencial anunció que está trabajando en una resolución para implementar “un nuevo esquema afín a la excelencia periodística para acreditar medios según su alcance y según su audiencia”. “Vamos a hacer que sea un privilegio ser un periodista acreditado en Casa Rosada”, afirmó Adorni. De manera inverosímil, el vocero presidencial aclaró que es necesario “jerarquizar el trabajo del periodista en Casa Rosada” porque “los periodistas tienen que demostrar que merecen estar cerca del Presidente”. 

Milei junto a periodistas en Casa Rosada
El vocero presidencial aclaró que es necesario realizar cambios en el trabajo de los medios en Casa Rosada” porque “los periodistas tienen que demostrar que merecen estar cerca del Presidente”. 

Picante cruce entre Manuel Adorni y un periodista por la emisión monetaria: "La gente no entiende lo que es un pase" | Perfil 

Todos los periodistas escuchamos cantidad de veces a lo largo de nuestra formación frases como que “el periodismo debe ser incómodo al poder”, la célebre línea de Rodolfo Walsh de “el periodismo es libre o es una farsa” o “el periodismo es aquello que alguien no quiere que se publique”. Por eso sorprende que Manuel Adorni, alguien que se desempeñó como periodista en varios medios, sea quien afirme algo que va tan en contra de las prácticas profesionales de este oficio. 

En su carrera en el periodismo, Adorni fue columnista habitual del diario Infobae y en programas de radio en Radio Rivadavia donde también conducía «No va más». También tuvo un paso por el canal de noticias La Nación +, en el programa Intratables en América, A24 y conducía su programa en Canal Metro.

Manuel Adorni también es contador y analista económico. En 2021, en una aparición en el programa de Chiche Gelblung en Crónica TV, el vocero presidencial dijo: “El congelamiento es delirante”, al referirse a los precios máximos fijados por el gobierno de Alberto Fernández. “Si el único producto que produjeran los empresarios fuese el de precios máximos, lo dejarían de producir porque terminarían fundiendo”. 

El cambio del actual vocero es sorprendente. En los guiones de cine o series, muchas veces algo de cambio en el orden del look de un personaje, simboliza una transformación en el protagonista. En Breaking Bad, Walter White se rapa y se pone un gorro antes de ser Heisenberg; y su abogado llamado Jimmy cambia totalmente de forma de vestir antes de pasar a ser Saul Goodman. En la política, podríamos pensar esto en relación a las patillas de Menem. Del Menem de la “revolución productiva” y “salariazo” a la “cirugía mayor sin anestesia” hubo un cambio de look que excluyeron a las patillas, que emulaban a las de los caudillos del interior como Facundo Quiroga. Manuel Adorni también eligió un look distinto para ejercer su cargo en el Gabinete Presidencial.

La primera conferencia de prensa como vocero presidencial de Adorni fue el 11 de diciembre de 2023, al día siguiente de que el Gobierno asumiera. Se presentó ante la sala y declaró que para él es una “gran responsabilidad representar a la voz del presidente de la Nación”. “Se van a encontrar con una vocería con diálogo que compartirá con cada uno de los argentinos lo que el presidente quiera comunicar”, manifestó. Allí teníamos un Adorni cordial y feliz, probablemente todavía sin el empoderamiento de lo que significa el cargo que se fue gestando durante el tiempo. Como bien marca Durán Barba, en cierto momento,  la función empieza a transformar al funcionario.

Manuel Adorni cuestionó a un periodista que le preguntó sobre los posteos de Milei | Perfil 

En un ejemplo bastante polémico de su desempeño, el vocero se burló de Fabían Waldman, periodista que le preguntó si existía la libertad de expresión en el gobierno de Milei a raíz de la cantidad de colegas heridos durante la represión en el Congreso el 2 de febrero de este año en el marco de las protestas por el tratamiento de la primer Ley Bases. Waldman comenzó su pregunta enumerando a algunos de los heridos por la policía: “Victor Carreira, reportero gráfico de Télam, un balazo de goma en la pantorrilla, Alfredo Luna, reportero gráfico de Télam, un balazo de goma en el muslo, Lorena Tapia, periodista de la TV Pública, un balazo de goma en la cintura”. Adorni, impaciente, interrumpió una y otra vez con frases como “¿Cuál es la pregunta?”, “Sus colegas están esperando para preguntar”. Waldman, finalmente, concluyó diciendo que podría seguir nombrando colegas afectados por la represión y preguntó si en estas condiciones está garantizada o no la libertad de prensa. Mostrando indiferencia por el cuestionamiento, Manuel Adorni respondió secamente: “Sí. Siguiente pregunta”. 

Cuatro de cada 10 agresiones a la libertad de expresión provienen del Ejecutivo | Perfil 

En otro caso, el vocero presidencial dio un falso dato sobre un envío de vacunas provenientes de China, el pasado 22 de marzo. En su habitual conferencia, dijo: “Nos llegaron 30 camiones de China para enfrentar al Covid con cierto atraso, lo que marca la gestión de la pandemia del doctor Fernández”. 

Obviamente, hay un objetivo de provocar, de llamar la atención, de quitar el foco de los problemas importantes, como podría ser la economía. Manuel Adorni es una de las espadas de magna crueldad del mismo Presidente, como por ejemplo, cuando provoca a un cantante o figura conocida para desviar la atención. Recientemente, hubo una periodista española que realmente hizo bien su trabajo, pero Adorni no supo qué responder ante sus preguntas. “¿En qué datos se basa el Gobierno argentino para afirmar que las mujeres españolas están en riesgo a causa de la inmigración ilegal?”, le cuestionó la periodista. “No se bien de donde surge la base de esa definición. En un ratito te lo contestamos. Bueno, listo, gracias”, respondió el vocero, y se retiró. 

La pregunta de la periodista española que incomodó a Manuel Adorni | Perfil 

Sigmund Freud estudió el tema del humor respecto del deseo inconsciente. En otro caso, vemos ciertas características cuasi sádicas en el tratamiento cuando Adorni evita responder una pregunta por su “falta de sueño”. El 11 de abril de este año, ante una consulta sobre el suicidio, Adorni respondió: “Es un tema aburrido y estoy con falta del sueño, que los médicos sugieren”. Es posible observar cómo se va empoderando el personaje y su tono irónico. Hay una discusión sobre si Adorni es más contador que periodista por sus puestos de panelista en varios programas. Vale la pena analizar si realmente es periodista todo aquel que comunica. 

El ataque a la prensa no es una realidad solo de Argentina. En Estados Unidos, se dio una situación similar con los periodistas acreditados de la Casa Blanca. En 2018, en conferencia de prensa, el presidente Donald Trump llamó a Jim Acosta, un periodista de la CNN, un “enemigo del pueblo” luego de que Acosta le preguntara sobre las declaraciones del presidente sobre las “invasiones” de inmigrantes desde América Central y manifestó que CNN debería avergonzarse de tenerlo como trabajador.

Trump y el periodista Jim Acosta
El presidente Donald Trump acusó al periodista Jim Acosta de “enemigo del pueblo” durante una conferencia de prensa en 2018.

Es interesante rescatar los vasos comunicantes que hay entre aquella acusación de Trump de “enemigo del pueblo” con “ensobrado”, el neologismo de Milei para los periodistas críticos. Un término que sugiere la idea de que los periodistas críticos defienden un statu quo de privilegios de la casta a cambio de dinero. El “enemigo del pueblo” pone a Trump en el lugar de “representante del pueblo”, y quien lo critica, por tanto, es “enemigo del pueblo”. Son dos formas de un populismo de derecha en el sentido laclausiano del término. Para Ernesto Laclau, “pueblo” es un significante vacío que es llenado con otros significantes, como “argentinos de bien” o “la gente de a pie” o el “norteamericano medio”. Y se define en oposición a quienes se construyen como enemigos: la casta, los burócratas de Washington, o el pantano de Washington. 

La editorial Perfil le otorgó el Premio Perfil a la Libertad de Expresión a Jim Acosta por su labor periodística. Jim envió un fragmento del agradecimiento, donde expresó que "Algunas de las personas con las que trabajo aquí en la CNN están trabajando muy duro todos los días para hacer el mejor periodismo posible durante algunas circunstancias muy dificultosas aquí en los Estados Unidos". 

Jim Acosta se llevó el Premio Perfil 2019 a la Libertad de expresión internacional 

En el 2021, los investigadores Carolina Collazo y Adrián Pulleiro escribieron un texto en el que se hablaba de un cambio de paradigma en lo que llamaban la “libertad de lo decible”. Señalaban que “está en marcha una reconfiguración regresiva de los límites de lo que es posible ser dicho en una esfera pública ampliada, constituida por el espacio mediático tradicional, las redes sociales y las propias instituciones de la democracia representativa. Estamos ante el proceso de emergencia y circulación de ciertos discursos que de por sí se construyen en las fronteras de lo que podemos llamar las pautas de la convivencia democrática que, más allá de sus momentos de crisis, se impusieron como una suerte de pacto social desde 1983 en adelante. Su eficacia está directamente ligada al consenso respecto de ciertos principios como el pluralismo, el respeto de las instituciones representativas, la igualdad formal ante la ley y el respeto a los derechos humanos más elementales”. Quizás estamos en un punto límite: correr lo decible, lo preguntable, es también empequeñecer el espacio democrático. 

Otra de las ventanas de ver esto es La ventana de Overton, de un cientista norteameicano, que planteaba en forma de “ventana” lo que era decible, lo que no, y cómo el discurso público de quienes construyen subjetividad van corriendo lo que era indecible a lo que pasa a ser tolerable. Esta técnica de comunicación también es conocida como la “ametralladora de falacias”, utilizada por Donald Trump en Estados Unidos, Bolsonaro en Brasil y Milei en nuestro país.  

La fundación liberal mexicana Friedrich Naumann hizo un video con una buena síntesis del sentido que tiene la libertad de prensa. “La relación entre la libertad de prensa y democracia es indiscutible e incuestionable. La prensa es una especie de cuarto poder que se ubica entre la sociedad y el poder público y su ausencia reduce la confianza en las instituciones democráticas y aumenta el riesgo de desigualdades y del surgimiento de regímenes autoritarios”. 

Aunque sea obvio, vale la pena repetirlo: la libertad de prensa es algo esencial para cualquier democracia. Esperemos que el Gobierno dé marcha atrás con su decisión de restringir el acceso a la Casa Rosada, independientemente de que Adorni pueda pensar que hay periodistas que no merezcan estar cerca del presidente.

TV FM