En el último día en que la Corte Suprema de Justicia de la Nación (CSJN) funcionó con cuatro miembros, el Máximo Tribunal volvió a ordenar que los casos de derecho común de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires sean resueltos por el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de esa localidad, antes de llegar a la última instancia nacional.
La decisión de la CSJN fue tomada el mismo día en que Juan Carlos Maqueda se retiró del cargo luego de 22 años de ejercicio. A partir de ahora, la Corte deberá resolver los casos con conjueces cuando no logren formar mayoría. Esta nueva vacante se suma al que dejó Helena Highton de Nolasco y solo estarán ocupados tres de los cinco lugares.
El fallo en cuestión es el que involucra a los herederos del pintor León Ferrari y al periodista Gustavo Gabriel Levinas. Sin embargo, la Corte no resuelve nada respecto a la controversia de fondo, sino que hace un señalamiento en torno al funcionamiento y al traspaso de la justicia nacional a la Ciudad de Buenos Aires.
“El TSJ es el órgano encargado de conocer en los recursos extraordinarios que se presenten ante la justicia ordinaria nacional de la ciudad. Al igual que los superiores tribunales del resto de las provincias, debe concentrar las facultades jurisdiccionales en torno al derecho local y común”, expresó la Corte en su fallo de hoy.
La posición de la CSJN respecto a este tema no es nueva. En 2019, en el fallo “Bazán, Fernando s/ amenazas” ya había indicado que, en los conflictos de competencia entre los jueces nacionales y los jueces de la ciudad, no intervendría más y que debía hacerlo el TSJ. En el día de hoy, el juez saliente, Ricardo Lorenzetti y Horacio Rosatti volvieron a decir lo mismo. Al igual que Carlos Rosenkrantz, que votó nuevamente en disidencia.
El conflicto se enmarca en la demora del cumplimiento de la manda constitucional. A partir de la reforma de la Constitución de 1994, con la creación de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, debía traspasarse la justicia nacional ordinaria pero eso aún no se concretó. En medio de ese lento proceso, la Ciudad en 1996 creó su propio tribunal superior de justicia.
Corte vs Gobierno: guerra de poderes
De manera que se suscitan conflictos entre los tribunales que deben atender los casos cuando, una vez agotada la instancia en las Cámaras Nacionales, las partes apelan. En esas situaciones la pregunta que se abre es si el juicio debe continuar ante el máximo tribunal de la nación o de la ciudad. La CSJN volvió a optar por la segunda opción.
“Que a treinta años de la reforma de la Constitución Nacional, a veintiocho de la sanción de la constitución porteña, de la exhortación en “Corrales” (...) y a cinco del fallo “Bazán”, se mantiene el escenario de ‘inmovilismo’”, cuestiona la CSJN, y agrega: “Por tal motivo, resulta imperioso que esta Corte Suprema continúe adecuando su actuación a aquella que le impone el texto de la Constitución Nacional, más allá de que el Estado Nacional y el Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires perpetúen la situación descripta”.
La Corte ordenó que el Tribunal Superior de Justicia resuelva en última instancia en CABA pero Carlos Rosenkrantz votó en disidencia
En la vereda contraria, el juez Carlos Rosenkrantz se opuso a la decisión de la mayoría. El magistrado señala que la transferencia de la justicia está “supeditada a la celebración de los correspondientes convenios” entre los diferentes órganos del Estado.
“Se trata de un proceso político en marcha que, en el marco de los tiempos y desafíos propios de toda negociación político-institucional de envergadura, se ha ido concretando, aunque de un modo innecesariamente lento, de manera progresiva”, señala Rosenkrantz en su voto.
Para Rosenkrantz, que el TSJ de la ciudad decida en los casos de las Cámaras Nacionales supone “un rediseño institucional de significativa trascendencia en el sistema federal argentino. Concretamente, ello implica que el Tribunal Superior de Justicia pase a revestir, aunque sea transitoriamente, el carácter de tribunal nacional”.
El gremio de judiciales sobre la sentencia de la Corte: " Un fallo a la medida de Macri"
La Unión de Empleados Judiciales de la Nación se declaró en "alerta y movilización" tras la decisión de la CSJN de que el Tribunal Superior de Justicia defina en todos los casos que tramitan ante las Cámaras Nacionales, incluso ante los recursos extraordinarios.
"Tiene como objetivo principal el control del Fuero del Trabajo y del Fuero Comercial, pero fundamentalmente garantizar la impunidad de Mauricio Macri en la causa "Correo", señaló el gremio que conduce Julio Piumato.
Según la UEJN, la CSJN le otorga al TSJ "el control total de la Justicia Nacional (...) sometiéndola al arbitrio y control del partido político que gobierna la Capital Federal".
LM / Gi