El balance provisional de la devastadora tormenta que golpeó con especial dureza a Valencia, en el sureste de España, registra al menos 150 fallecidos. Esta región fue la más afectada, con 92 víctimas mortales y se suman tres en el País Vasco y otras en Castilla-La Mancha y Andalucía. A esto se agrega que decenas de personas continúan atrapadas en localidades anegadas, mientras la emergencia persiste debido a las inundaciones, los cortes de energía y una infraestructura de transporte seriamente dañada.
En Valencia, donde el presidente del gobierno español Pedro Sánchez declaró tres días de luto nacional en memoria de las víctimas del temporal, los daños son incalculables. La Coordinadora Campesina del País Valenciano (CCPV-COAG) pidió que se declare la zona afectada por la tormenta como "zona catastrófica".
Rescates y ayuda a damnificados
La Guardia Civil realizó cerca de 3.400 rescates desde el inicio de la tormenta, aunque alrededor de 300 personas permanecen aisladas en distintas áreas de la región. La situación es sumamente crítica en zonas como Albacete, donde al menos cinco personas siguen en paradero desconocido.
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Los servicios de emergencia y protección civil han desplegado operaciones de rescate en toda la región. A la par, los municipios de Valencia instalaron puntos de acceso a agua potable y gestionaron el traslado de pacientes a hospitales, mientras que un campo de fútbol de barrio fue habilitado como centro de refugio para animales que quedaron sin hogar por el desastre.
Entidades financieras, aseguradoras, hipermercados y otras entidades están ofreciendo líneas de ayuda a los damnificados. Por el contrario, la Policía Nacional detuvo anoche 39 personas por supuestamente saquear comercios en zonas afectadas de Valencia.
Infraestructura y circulación colapsadas
El impacto del temporal también afecto seriamente las infraestructuras de transporte. Las vías ferroviarias que conectan Madrid con Valencia quedaron severamente dañadas, y la circulación no podrá restablecerse completamente hasta dentro de al menos 15 días.
El suministro eléctrico fue otro de los servicios gravemente afectados, aunque la compañía energética logró restablecerlo parcialmente para 77.000 de los 155.000 usuarios que inicialmente se quedaron sin luz en Valencia.
Apoyo y solidaridad desde las instituciones
Varias figuras públicas manifestaron su solidaridad con las víctimas. El rey de España, Felipe VI, este jueves expresó su apoyo a los damnificados y resaltó la importancia de "permanecer unidos en el apoyo y la ayuda".
Por su parte, el papa Francisco expresó su "cercanía" a las familias afectadas por el temporal a través de un mensaje en video enviado por Luis Javier Argüello, obispo de Valladolid y presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE).
Continúa la alerta meteorológica en Castellón
Pese a que el temporal ha comenzado a debilitarse, la provincia de Castellón, al este de España, se mantiene en alerta roja debido a las intensas lluvias que podrían acumular hasta 180 litros por metro cuadrado en doce horas.
La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) pidió precaución a la población y el Centro de Coordinación de Emergencias de la Comunidad Valenciana envió un nuevo aviso preventivo, a través de los celulares, para evitar desplazamientos en la zona.
Uno de los desastres naturales más graves en 75 años
Este evento se perfila como uno de los desastres naturales más graves en la historia reciente de España, superando en víctimas a tragedias como la riada de Biescas en 1996, que cobró la vida de 87 personas, y la del Turia en 1957, con un balance de entre 80 y 100 fallecidos.
Las autoridades continúan evaluando los daños y las tareas de recuperación avanzan lentamente en medio de la incertidumbre y el dolor colectivo.
RM/LT
