Un nutrido grupo de estudiantes internacionales presentaron demandas contra el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) de EE.UU y argumentaron que el gobierno "carecía de justificación” para revocar sus visas. Desde mediados de marzo, al menos 901 estudiantes de 128 escuelas superiores y universidades han visto cancelado su estatus legal.
La directora de asuntos públicos en el Instituto de Política Migratoria, Michelle Mittlestadt, manifestó que “lo que están viendo que sucede con los estudiantes, es realmente una parte del escrutinio mucho mayor que la administración Trump está ejerciendo sobre inmigrantes de todas las categorías”.
Visas de estudiantes en EE.UU: por qué el Gobierno de Trump las revoca y amenaza con su deportación
Las visas pueden cancelarse por diversas razones, pero las casas de altos estudios sostienen que los jóvenes académicos están siendo señalados por infracciones tan leves como multas de tránsito y, en algunos casos, los damnificados aseguran que “no está claro" por qué fueron seleccionados.
Los abogados de la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU) sostuvieron que “el momento y la uniformidad de estas cancelaciones, dejan pocas dudas de que el DHS ha adoptado una política nacional, escrita o no, de cancelación masiva del estatus de los estudiantes”.
Las visas de entrada son gestionadas por el Departamento de Estado. Una vez que están en suelo norteamericano, el estatus legal de los estudiantes internacionales es supervisado por el Programa de Estudiantes y Visitantes de Intercambio, que depende del DHS.
Vicepresidenta del Consejo Americano de Educación: “La falta de claridad puede crear miedo entre los estudiantes”
Si un alumno perdió la condición de residente legal, corre el riesgo de ser detenido por las autoridades migratorias. Según han revelado algunos directivos de los establecimientos académicos, algunos ya se han marchado del país y abandonaron sus estudios para evitar ser arrestados.
La vicepresidenta de relaciones gubernamentales en el Consejo Americano de Educación, Sarah Spreitzer, enfatizó que “la falta de claridad sobre las causas de la revocación, puede crear miedo entre los estudiantes”.
Además, Spreitzer, explicó que “las medidas tan públicas que están tomando el ICE y el Departamento de Seguridad Nacional con algunos de estos estudiantes, a los que están sacando de sus casas o de la calle, no suelen tomarse a menos que haya un problema de seguridad cuando se revoca una visa de estudiante”.
Fuente: Associated Press (AP)
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