El presidente ruso, Vladimir Putin, afirmó hoy que la contraofensiva ucraniana no tiene “ninguna posibilidad” de éxito, reveló que Bielorrusia ya ha desplegado algunas de las armas nucleares que le envió Rusia y advirtió que, si quisiera, podría ordenar la destrucción de cualquier edificio en Kiev.
El jefe del Kremlin cargó también contra el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, a quien calificó como “una vergüenza” para los judíos.
“Las fuerzas armadas ucranianas no tienen ninguna posibilidad allá ni en ninguna otra zona”, declaró Putin al referirse a la contraofensiva lanzada por Kiev en el sur de Ucrania, durante el Foro Económico de San Petersburgo.
Las fuerzas ucranianas “usaron sus supuestas respuestas estratégicas para romper las defensas rusas, consolidar las suyas y avanzar. No se alcanzó ninguno de estos objetivos”, aseguró el presidente ruso.
Putin insistió en que Ucrania estaba sufriendo “muy grandes pérdidas” y consideró que no podría combatir “durante mucho tiempo” por el agotamiento de su equipo militar.
Moscú ha repetido en varias ocasiones que la actual ofensiva ucraniana para recuperar los territorios ocupados por los rusos es un fracaso. Kiev, en cambio, asegura haber liberado un puñado de localidades y unos 100 kilómetros sobre todo en el frente sur.
Según los analistas militares, Ucrania aún no ha usado la mayoría de sus fuerzas en su contraofensiva y todavía trata de determinar dónde están los puntos débiles.
Nuclear. El presidente ruso subrayó el poderío de arsenal misilístico. “Rusia puede destruir cualquier edificio en el centro de Kiev, pero no lo hace por determinadas razones”, afirmó, y añadió que “Rusia está obligada a aumentar el gasto de defensa para garantizar su seguridad”.
Putin también destacó que Rusia ya había empezado a transferir armas nucleares a Bielorrusia, tal como lo había anunciado en marzo.
“Las primeras ojivas nucleares fueron transferidas a territorio bielorruso. Son solo las primeras, pero antes del fin del verano completaremos el proceso, pero se trata de una medida de disuasión”, dijo. Se trata de armas nucleares “tácticas”, con un radio de destrucción más limitado que el de las “estratégicas” , como explicó.
El jefe del Kremlin reiteró que las armas nucleares solo pueden ser utilizadas por Rusia si hay una amenaza a la integridad territorial, la independencia, la soberanía y la existencia del Estado ruso.
“Las armas nucleares han sido creadas para garantizar la seguridad y la existencia del Estado ruso. Pero no hay ninguna necesidad” de recurrir a ellas, subrayó. Eso sí, dejó en claro que Rusia tiene “más de estas armas que los países occidentales” y por eso quieren “empujarnos a empezar a discutir la reducción del arsenal”.
En su discurso ante el Foro, el presidente ruso destacó que “los cambios mundiales en todas las esferas” que se están produciendo, “no son temporarios, son fundamentales, profundos e irreversibles” y volvió a rechazar la eficacia de las sanciones que Estados Unidos, la UE y otros países aplican a Moscú por la invasión: “Rusia será siempre parte de la economía mundial”, pese a esas sanciones, enfatizó.
Finalmente, Putin consideró que Volodimir Zelenski, de origen judío, ser la “vergüenza” de ese pueblo y volvió a justificar la ofensiva militar rusa en Ucrania alegando que la exrepública soviética está gobernada por “neonazis”.
“Tengo muchos amigos judíos desde mi infancia. Y ellos me dicen que Zelenski no es judío, sino la vergüenza del pueblo judío. No estoy bromeando”, declaró el mandatario ruso.