Un documental reveló que más de 21 mil trabajadores murieron "misteriosamente" desde que comenzó la construcción del proyecto Neom en Arabia Saudita, la futurista megalópolis que se extenderá sobre 170 km y albergará dos rascacielos cubiertos de espejos, cuya finalización está prevista en 2030.
El personal detrás de la obra y sus familiares expresaron las condiciones laborales que enfrentaron en los últimos años en el informe "Kingdom Uncovered: Inside Saudi Arabia" (en español, "El reino al descubierto: Arabia Saudita desde dentro") transmitido por la cadena británica ITV.
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En ese sentido, acusaron a los responsables del proyecto impulsado por el príncipe heredero Mohamed Bin Salman de pagos atrasados, horas de trabajo ilegales y una serie de violaciones de los derechos humanos. Por esos motivos, los trabajadores manifestaron sentirse como "esclavos atrapados" y "mendigos".
De esa manera, el documental analiza las prácticas ilegales diarias que se estarían cometiendo bajo el pretexto de construir uno de los proyectos más caros del mundo, cuyo presupuesto inicial fue de 500 mil millones de dólares (lo que representa más del 50% del presupuesto federal de Arabia Saudita).
Incluso los grupos de derechos humanos expresaron en distintas ocasiones sus preocupaciones sobre los planes de construcción masivos, especialmente la posibilidad de que se explote la mano de obra migrante y se desplace a los lugareños. En esa línea, el país fue acusado de que hasta cien mil trabajadores migrantes desaparecieron durante la construcción de Neom.
Sumado a esto, las nuevas cifras de ITV revelaron que 21 mil trabajadores extranjeros de la India, Bangladesh y Nepal murieron desde que comenzó el proyecto. Por su parte, la Junta de Empleo Extranjero de Nepal sugiere que más de 650 muertes de trabajadores nepaleses aún no fueron explicadas.
En el documental, un empleado reveló que a menudo le hacen trabajar 16 horas diarias ayudando a construir un túnel de tren de alta velocidad para "The Line". De esa manera, puede llegar a trabajar más de 84 horas en cinco días, siendo que la ley saudí establece que nadie debe trabajar más de 60 horas a la semana.
"Nos hacen trabajar extremadamente duro. Hay poco tiempo para descansar. Nos cansamos. Sufrimos ansiedad día y noche. Arabia Saudí no se preocupa mucho por los ciudadanos de otros países. Nos tratan como mendigos”, detalló el hombre. “Nos sentimos como esclavos atrapados”, añadió un compañero.
Al respecto, Nicholas McGeehan, director de la organización de derechos humanos FairSquare, advirtió que "estas horas de trabajo superan con creces lo que permiten los estándares mínimos internacionales". “La realidad es que los trabajadores de toda Arabia Saudí están sujetos a una explotación profundamente abusiva y peligrosa. Los abusos ocurren sistemáticamente en todo el país”, subrayó.
Otra de las denuncias de muchos empleados es que no recibieron su salario durante meses. Por ejemplo, un hombre que viajó desde Pakistán afirmó que no recibió dinero en efectivo en su cuenta en los últimos diez meses.
En tanto, otros alegan que no son alimentados o que no pueden permitirse comer con otros, llegando a tener prohibido salir del sitio para ver a sus familias. Al respecto, un conductor que trabaja para Neom indicó que la falta de sueño y el trabajo continuo provocaron numerosos accidentes, con casi cinco choques al mes.
En ese sentido, también surgió la problemática de que la combinación de una carga de trabajo intensa, falta de comida y sueño y un entorno negativo pueden conducir a la fatiga mental y al tormento físico. De esa manera, son diversos los casos donde el estrés provocó enfermedades en los trabajadores.
Uno de los casos detallados en el documental es el del nepalí Raju Bishwakarma, quien rogó en una llamada telefónica que lo "rescaten". "Por favor, escúchame, estoy muy enfermo. Por favor, sácame de aquí, tienes que rescatarme", expresó al borde de las lágrimas. Si bien la salud del hombre se deterioró rápidamente, sus amigos y familiares contaron que era obligado a trabajar todos los días, llegando al punto en que sus compañeros tenían que llevarlo en silla de ruedas.
El gobierno saudí había indicado anteriormente que siempre ofrecerá asistencia sanitaria a cualquier persona en estado crítico. No obstante, a Raju le dieron la oportunidad de dejar su puesto y volver a casa si pagaba una multa que equivalía a cinco meses de su salario. Poco después, el hombre fue encontrado sin vida en su habitación, lo que provocó protestas por partes de sus compañeros.
A raíz de esa situación, el abogado nepalí de derechos humanos Anurag Devkota lamentó que su país reciba "los cadáveres" de quienes buscan una mejor situación para sus familiares. "Los trabajadores migrantes abandonan este país todos los días en busca de un futuro mejor para sus familiares y un futuro mejor para su país. Pero a cambio, lo que estamos recibiendo son los cadáveres en las cajas de madera", manifestó.
A partir de las denuncias, Neom afirmó en un comunicado que están "evaluando las reclamaciones realizadas en este programa y, cuando sea necesario, tomaremos las medidas adecuadas". "Exigimos que todos los contratistas y subcontratistas cumplan con el Código de Conducta de Neom, basado en las leyes de Arabia Saudita y las políticas de la Organización Internacional del Trabajo. Están sujetos a inspecciones frecuentes de las condiciones de vida y trabajo de sus trabajadores", añadió. Por su parte, ITV dijo que presentaron todas las acusaciones del vídeo al gobierno saudí, pero que no recibieron respuesta.
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