INTERNACIONAL
Vaticano

Papa Francisco: "No puede sustraerse la centralidad de los pobres en el Evangelio, y eso no es comunismo"

En un nuevo número del L´Osservatore Romano en español, se transcribió el discurso del Pontífice en la reunión por el décimo aniversario del primer encuentro mundial de Movimientos Populares.

El papa Francisco 20240923
El papa Francisco | NA

El discurso pronunciado por el Papa Francisco para conmemorar el décimo aniversario del primer encuentro mundial de Movimientos Populares tuvo una amplia repercusión en todo el mundo, especialmente en Argentina y Latinoamérica. Por ello, este ejemplar de L´Osservatore Romano lo transcribe en forma completa y oficial, ocupando casi cuatro de las doce páginas de esta edición.

Si bien todo el contenido de las palabras del Jorge Bergoglio es producto de análisis y reflexión, se mencionan algunos párrafos centrales: 

“Padre, usted habla mucho de los pobres y poco de la clase media, fue una de las consultas que le hicieron al Sumo Pontífice. "Puede ser cierto, y por eso les pido perdón. Cuando el Papa habla, habla para todos porque la Iglesia es para todos. Pero no puede sustraerse de la centralidad de los pobres en el Evangelio. Y esto no es comunismo, es Evangelio puro. No es el Papa, sino Jesús, quien los pone en ese lugar. Es una cuestión de nuestra fe y no se puede negociar. Si vos no aceptás eso, no sos cristiano". Algún hermano también le dijo, “No sea tan duro con los ricos”. "Jesús fue más duro que yo, y vean lo que dice de los ricos: '¡Ay de ustedes, los ricos!', y les da… 'No sea tan duros con los ricos'”, respondió Francisco.

Esto no les gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
Hoy más que nunca Suscribite

Instalaron en la Casa Rosada una figura de la Virgen del Valle que incluye un bordado con Javier Milei y el papa Francisco

"Reconozco, claro, que los empresarios crean puestos de trabajo, contribuyen al desarrollo económico. Es justo decirlo. Lo dije últimamente en Singapur, viendo el magnífico bosque de rascacielos que atestiguan ese aporte. Sin embargo, los frutos del desarrollo económico no se distribuyen bien. Esta es una realidad evidente que, si no se modifica, va a engendrar peligros cada vez mayores. Si no hay políticas, buenas políticas, políticas racionales y equitativas que afiancen la Justicia Social para que todos tengan tierra, techo y trabajo, para que todos tengan un salario justo y los derechos sociales adecuados", puntualizó.

"No tengo yo el monopolio de la interpretación de la realidad social. Escucho. Tampoco tengo la bola de cristal (y no existe ninguna bola de cristal mágica, esas son estafas). Sí veo una cosa que me preocupa: que avanza una forma perversa de ver la realidad, una forma que exalta la acumulación de riquezas como si fuera una virtud. Les digo: no es una virtud, es un vicio. Las riquezas son para compartir, para crear, para fraternizar. Acumular no es virtuoso, no es virtuoso, distribuir sí lo es", continuó diciendo.

En ese sentido, recordó que Jesús no acumulaba, sino que multiplicaba y sus discípulos distribuían. "Recuerden que Jesús nos dijo: 'No acumulen tesoros en la tierra, donde la polilla y la herrumbre los consumen, y los ladrones perforan las paredes y los roban. Acumulen, en cambio, tesoros en el cielo, donde no hay polilla ni herrumbre que los consuma, ni ladrones que perforen y roben. Allí donde esté tu tesoro, ahí también estará tu corazón'”.

"La competencia ciega por tener más y más dinero no es una fuerza creativa, sino una actitud enfermiza, un camino a la perdición. Esa conducta irresponsable, inmoral e irracional, destruye la creación y divide a los pueblos. No dejemos de denunciarla… El grito de los excluidos también puede despertar las conciencias adormecidas de tantos dirigentes políticos que son, en definitiva, los que deben hacer cumplir los derechos económicos, sociales y culturales que ya están consagrados por la Constitución, por las leyes, pero no se cumplen", continuó diciendo.

 

"La cultura del descarte" y la "meritocracia"

En otro momento, el Papa dclaró que "las ideologías deshumanizadas promueven una cultura muy fea, la 'cultura del ganador' que es un aspecto de la 'cultura del descarte'. Algunos llaman a esto 'meritocracia', otros no la nombran, pero la practican".

Es gente que, parada sobre ciertos éxitos mundanos, se siente con el derecho de despreciar; despreciar en forma altanera a los “perdedores”… Esa actitud altanera es lo contrario de la compasión: regodearse en la propia supremacía frente a quien está peor. Y esto no pasa sólo con los más ricos, ya que mucha gente cae en esa tentación de nuestro tiempo. Mirar desde lejos, mirar desde arriba, mirar con indiferencia, mirar con desprecio, mirar con odio. Así se gesta la violencia: así se gesta el silencio de la indiferencia", sostuvo.

"Eliminar, seleccionar la humanidad sólo se entiende sin amor. Si se elimina el amor como categoría teológica, categoría ética, económica y política, perdemos el rumbo. En la matemática avara de la conveniencia, del individualismo y la acumulación no hay lugar para eso. Con el velo negro del desamor, caemos siempre en alguna forma de “darwinismo social”. ¿Y saben lo que es eso? El darwinismo social es la ley del más fuerte, que justifica primero la indiferencia, después la crueldad y,  finalmente, el exterminio. Y eso viene siempre del Maligno…".

El Papa Francisco en Bruselas

Al tiempo de editar este nuevo ejemplar del L´Osservatore Romano, el Papa Francisco se encuentra en su viaje 46ª apostólico en Bélgica, luego de un breve paso por Luxemburgo. Sus discursos y actos en el viaje centrados en la “Paz, integración y acogida” se publicarán en la edición de la próxima semana. 

El “verdadero progreso” no es el que agrava “las desigualdades y los conflictos”, sino el que se basa en la “dignidad intrínseca de cada persona” y en la “fraternidad ”, mejorando “la calidad de vida de toda la humanidad”: este es el enfoque del discurso que Francisco entregó la mañana del lunes 23 de septiembre, ante la Plenaria de la Academia Pontificia de las Ciencias. La asamblea, inaugurada en la Casina Pío IV del Vaticano, continuó hasta el miércoles 25 de septiembre sobre el tema “Ciencia para la sostenibilidad y el bienestar en el Antropoceno - Oportunidades, desafíos e inteligencia artificial”. Con este ejemplar se publica el texto del Papa en forma completa. 

 

FP / Gi