El psíquico brasileño Athos Salomé, conocido como el "Nostradamus viviente" lanzó una alarmante predicción sobre Estados Unidos diciendo que el país, que celebra este 5 de noviembre sus elecciones presidenciales, quedará "al borde de la fragmentación" si la vicepresidenta demócrata Kamala Harris gana la contienda sobre Donald Trump.
Evitando predecir un ganador, Athos -famoso por haber predicho con éxito la interrupción global del servicio de Microsoft, la pandemia de coronavirus y la muerte de la reina británica Isabel II- dijo que Estados Unidos verá una "reacción organizada y sistemática" del ex presidente Trump y de sus seguidores si pierden.
La advertencia recuerda a lo ocurrido en enero de 2021, cuando cientos de partidarios de Trump asaltaron el Capitolio, templo de la democracia estadounidense en Washington, en un intento de impedir la certificación de la victoria de Joe Biden.
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En una entrevista exclusiva con The Daily Mail, Salomé advirtió sobre un movimiento estratégico de los gobernadores, senadores y congresistas republicanos, quienes desafiarán abiertamente al gobierno federal si Trump pierde las elecciones.
"En 2024, la derrota de Trump no será una simple despedida política, será el inicio de una resistencia coordinada, algo sin precedentes. Si pierde, probablemente no aceptará el resultado como legítimo", afirmó.
El psíquico agregó que cree que Trump y su partido intentarán impugnar cualquier derrota en los tribunales y esperan contar con el apoyo de la Corte Suprema, que contiene una mayoría de jueces designados por los republicanos. Sugirió incluso que el trumpismo podría intentar "bloquear y ralentizar las medidas del nuevo presidente".
Salomé sugirió que la estrategia podría contribuir más tarde a una "fragmentación institucionalizada" total de la sociedad. Dijo, además, que existe el riesgo de que se produzca una "realidad paralela" en la que una proporción de la población reconozca al nuevo gobierno electo como "ilegítimo, corrupto y una amenaza" directa a los "verdaderos valores estadounidenses".
Salomé advirtió que esta percepción, que cree afectará muy probablemente a los votantes de Trump. Anticipó una "crisis de confianza pública" en las instituciones de la democracia, dividiendo aún más a la población entre quienes aceptan al gobierno y quienes creen que viven en una "dictadura camuflada".
"La consecuencia será una profunda alienación, donde millones de ciudadanos estadounidenses se desconectarán completamente de las fuentes tradicionales de información, volviéndose inmunes a cualquier intento de reconciliación con el gobierno electo", alertó.
En la entrevista, el psíquico también advirtió que existe el peligro de un conflicto grave en ciertos estados donde las tensiones son más altas, y esto podría resultar en desobediencia civil contra el gobierno gobernante.
"Estos estados, al volverse menos receptivos al gobierno federal, podrían iniciar un proceso de descentralización que desafíe directamente la estructura federal del país", dijo.
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"Este ambiente de extrema polarización y desconfianza en las instituciones democráticas podría marcar el comienzo de una era de fragmentación en Estados Unidos, donde el concepto mismo de los 'Estados Unidos de América' está amenazado".
"La unidad del país estará a merced de un líder que, incluso fuera del poder, tiene una influencia única y sin precedentes, capaz de moldear la realidad de una fracción significativa de la población estadounidense", afirmó.
Mientras el país celebra este martes unas cruciales elecciones, los partidarios de Trump dicen que están dispuestos a rechazar los resultados... a menos que gane su candidato.
El candidato republicano dedicó su campaña a sembrar dudas anticipadas sobre la validez de los comicios, retomando la retórica que rodeó su fallida campaña a la reelección de 2020, que culminó con sus partidarios asaltando el Capitolio del país el 6 de enero de 2021 para supuestamente "detener el robo".
La grieta de las Elecciones en Estados Unidos afecta a los medios: ¿quién gana entre CNN y Fox?
Después de tres carreras presidenciales y casi una década de Trump en la escena política de Estados Unidos, su marca característica de escepticismo o negación se enconó entre sectores de votantes conservadores, de todas las edades, orígenes y ocupaciones.
Mientras Trump se empesinó en avivar los temores de fraude durante la campaña, el Comité Nacional Republicano y grupos aliados también insisten en este tipo de reclamaciones ante los tribunales.
Han presentado demandas contra los procedimientos de recuento de votos, las máquinas de votación, el registro de votantes, los votos en ausencia, la certificación de los resultados y otras cuestiones electorales.
Aunque muchas de las acciones fueron desestimadas, a expertos les preocupa que puedan enturbiar aún más las aguas en torno a lo que la gente cree sobre los comicios, especialmente con Trump repitiendo con insistencia su falsa afirmación de que las votaciones de 2020 le fueron robadas.
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