El empresario Jeff Bezos desafió a SpaceX en la carrera espacial y lanzó con éxito en la jornada de este jueves el cohete ‘New Glenn’ en su primer vuelo de prueba a través de su firma Blue Origin y aseguró que “este es sólo el comienzo de una fase en la que la industria espacial trabajará en conjunto para reducir los costos de acceso al espacio” y se posiciona como un actor clave, en esta nueva era de innovación tecnológica.
La astronave tiene una altura de 98 metros, superando cinco veces en tamaño a las invenciones anteriores de la compañía estadounidense y, se suma a una larga lista de competidores entre los que se encuentran el Vulcan de United Launch Alliance, el Ariane 6 de Europa y el Sistema de Lanzamiento Espacial (SLS) de la NASA.
Desde el centro de control de la misión, el magnate norteamericano enfatizó que “hay espacio para muchos ganadores” en esta nueva era de la exploración espacial.
El cohete más grande hasta la fecha es el Starship de SpaceX, propiedad de Elon Musk, con una altura de aproximadamente 123 metros. Según reportes, podría realizar el séptimo vuelo de prueba del Starship completo este mismo jueves desde Texas.
Sin embargo, el multimillonario Jeff Bezos señaló que “no percibe a Blue Origin como un competidor directo de SpaceX”.
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Por otro lado, Blue Origin también está desarrollando un módulo de aterrizaje lunar llamado Blue Moon, que se utilizará en la tercera misión tripulada del programa Artemis de la NASA.
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Dicho enfoque, refleja la estrategia de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio, para fomentar la competencia entre empresas privadas. Similar a la utilizada para el transporte de astronautas hacia y desde la Estación Espacial Internacional.
PM