INTERNACIONAL
ibrahim aqil

Israel mató a un comandante de Hezbollah en pleno bastión de la milicia chiita en Beirut

Dos días después de haber asestado un durísimo golpe al grupo libanés apoyado por Irán con la explosión simultánea de miles de dispositivos de seguridad que portaban sus milicianos, atentado que nunca reivindicó y que provocó la muerte de al menos 39 personas, Israel mató ayer, en un “ataque dirigido” a un edificio de la periferia sur de Beirut, a Ibrahim Aqil, comandante de Radwabm, la fuerza de élite de Hezbollah, y a otros altos mandos de esa unidad. El ataque confirma que el Ejército israelí trasladó el foco de su guerra de Hamas a Hezbollah, lo que hace temer una escalada regional del conflicto.

21_09_2024_ibrahim_aqil_hezbollah_beirut_apf_g
Destrucción. El edificio recibió al menos cuatro misiles. EE.UU. ofrecía siete millones de dólares por su captura. | apf

Israel anunció que había matado ayer al comandante de la unidad de élite de Hozbollah en un ataque que, según funcionarios libaneses, dejó 12 muertos y decenas de heridos en el bastión del movimiento, en la periferia sur de Beirut.

Ibrahim Aqil, quien también era buscado por Estados Unidos por su participación en el atentado contra la embajada de Estados Unidos en Beirut en 1983, dirigía la unidad de élite Radwan de la milicia armada respaldada por Irán.

Según las informaciones recogidas por la agencia estatal libanesa de noticias, NNA, el bombardeo alcanzó un edificio de apartamentos en el área de Dahieh –situada en el sur de Beirut y de mayoría chiita, con gran influencia de Hozbollah– y las fuerzas israelíes habrían disparado cuatro misiles. La explosión dejó un enorme cráter y destruyó los pisos inferiores del edificio. 

Esto no les gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
Hoy más que nunca Suscribite

El asesinato de Aqil fue el segundo de un alto comandante de Hozbollah desde el comienzo de la guerra en Gaza, tras otro ataque israelí en Beirut que mató a Fuad Shukr en julio.

También se produjo después de dos oleadas de explosiones, el martes y el miércoles, de dispositivos de comunicación utilizados por miembros de Hozbollah, que el grupo chiita atribuyó a Israel, lo que mató a decenas y dejó a Hozbollah tambaleándose, mientras desviaba dramáticamente el foco de la guerra Israel-Hamas hacia el norte.

El ejército israelí dijo ayer que llevó a cabo un “ataque dirigido” para matar a Aqil, en el cual también murieron otros 10 altos comandantes de la unidad Radwan. El Ministerio de Salud de Líbano informó que el ataque mató a 12 personas y dejó 66 heridos. El Ministerio de Sanidad libanés advirtió en su balance que, de los 66 heridos, al menos nueve se encuentran en estado crítico, por lo que no se descarta que la cifra de víctimas pueda aumentar en las próximas horas.

Anteriormente, una fuente cercana a Hozbollah, que solicitó el anonimato para discutir temas sensibles, había admitido que el ataque había matado a Aqil. Según la prensa libanesa, Aqil acababa de ser dado de alta de un hospital por las heridas que le había provocado el estallido de su buscapersonas en los ataques del norte.

“El ataque aéreo israelí mató al comandante de la Fuerza Radwan, Ibrahim Aqil, su segundo al mando después de Fuad Shukr,” dijo la fuente cercana a Hozbollah.

Hozbollah no ha confirmado oficialmente su muerte, pero después del ataque, dijo que había lanzado cohetes contra una base de inteligencia israelí a la que culpó de “asesinatos” no especificados.

Estados Unidos había ofrecido una recompensa de 7 millones de dólares por información sobre Aqil, al que describía como un “miembro principal” de la organización que reivindicó el atentado a la embajada en 1983, que dejó 63 muertos.

Aqil, alias ‘Tahsin’, era un miembro del Consejo de la Jihad de Hozbollah, el principal organismo militar del grupo. En el pasado integró la Organización de la Jihad Islámica, que reivindicó los atentados contra la Embajada de Estados Unidos y una toma de rehenes en esa misma década.

El primer ministro interino de Líbano, Nayib Mikati, acusó a Israel de no tener “ningún tipo de consideración humanitaria, jurídica y moral” a la hora de perpetrar sus operaciones militares. Por ello, instó a la comunidad internacional a posicionarse de forma “clara”.

Explosiones de dispositivos de comunicación. Tropas israelíes y combatientes de Hozbollah han estado luchando a lo largo de la frontera entre Israel y Líbano desde que Hamas desató la guerra en Gaza con sus ataques terroristas del 7 de octubre.

El foco del poder militar de Israel durante casi un año ha sido Gaza, pero con Hamas debilitado, el eje de la guerra se ha desplazado dramáticamente hacia la frontera norte de Israel.

Meses de enfrentamientos fronterizos casi diarios han dejado cientos de muertos en Líbano, la mayoría de ellos combatientes, y decenas en Israel, obligando a miles de personas en ambos lados a huir de sus hogares.

El martes y el miércoles, Hozbollah fue golpeado por un ataque sin precedentes por el que ha culpado a Israel, que no lo ha reivindicado. El atentado hizo que los dispositivos de comunicación, buscapersonas y walkie-talkies, de miles de milicianos de Hozbollah explotaran durante dos días, matando a 39 personas y dejando miles de heridos.

El jefe de Hozbollah, Hassan Nasrallah, admitió en un discurso que los ataques eran el golpe más duro sufrido por la milicia y prometió que Israel enfrentaría represalias por las explosiones.

Ayer, antes del ataque, Israel dijo que Hozbollah había disparado decenas de cohetes desde Líbano después de ataques aéreos que destruyeron decenas de lanzadores del grupo militante.

Hablando con las tropas el miércoles, el ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, dijo: “Hozbollah pagará un precio cada vez mayor” mientras Israel intenta “asegurar el regreso seguro” de sus ciudadanos a las zonas fronterizas. “Estamos al comienzo de una nueva fase en la guerra”, dijo.

Mientras tanto, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, retrasó su partida programada a Estados Unidos, donde debe dirigirse a la Asamblea General de la ONU, un día, citando la situación en el frente norte.

Ayer temprano, Hozbollah dijo que había atacado al menos seis bases militares israelíes con ráfagas de cohetes después de un bombardeo nocturno que la gente en el sur de Líbano describió como uno de los más feroces hasta ahora.

Llamados a la moderación. Mediadores internacionales han estado trabajando para evitar que la guerra en Gaza se convierta en un conflicto regional a gran escala. El secretario de Estado, Antony Blinken, quien ha tratado de salvar los esfuerzos para un alto el fuego en Gaza y un acuerdo de liberación de rehenes, pidió moderación a todas las partes. “No queremos ver acciones escalatorias de ninguna parte” que pongan en peligro el objetivo de un alto el fuego en Gaza, dijo.

También la ONU expresó su preocupación y llamó a todas las partes a ejercer “máxima moderación”. 

“Estamos, por supuesto, muy preocupados por la escalada de tensión, incluyendo los ataques mortales que hemos visto hoy en Beirut. Llamamos a todas las partes de reducir la tensión inmediatamente. Todos deben ejercer máxima moderación”, dijo Stephane Dujarric, vocero del secretario general Antonio Guterres.

 

Polémica por un video de soldados israelíes

Agencias

El ejército israelí reveló ayer que está examinando unas imágenes filmadas en Cisjordania durante una incursión militar israelí, que muestran a un soldado empujando al vacío desde un tejado a un hombre aparentemente muerto.

Imágenes sobre la operación realizada el jueves en Qabatiya, en el norte del territorio palestino ocupado por Israel desde 1967, muestran a un soldado que empuja con su pie un cuerpo hasta hacerlo caer al vacío desde el tejado de un edificio, bajo la mirada de al menos otros dos soldados.

El ejército anunció ayer en un comunicado que “eliminó a siete terroristas” en esa operación, que provocó un tiroteo entre soldados y hombres armados.

Interrogado sobre las imágenes, el ejército israelí respondió en un comunicado que “se trata de un incidente grave que no corresponde a los valores del ejército israelí y a lo que se espera de los soldados”.  

“El incidente se está examinando”, agregó.

En Estados Unidos, un portavoz de la Casa Blanca consideró esas imágenes “muy preocupantes”.

“Si se demuestra que las imágenes son auténticas, se trata claramente de un comportamiento odioso” de parte de militares profesionales, declaró John Kirby, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional estadounidense.

La localidad de Qabatiya está situada al sur de la ciudad de Jenín, bastión de grupos armados palestinos que luchan contra Israel.

Esta última, capital de la gobernación homónima, y su campamento de refugiados palestinos han sido objeto de incursiones israelíes en el marco de una amplia ofensiva desencadenada a fines de agosto en el norte de Cisjordania y que aún continúa.