Las delegaciones de Rusia y Estados Unidos concluyeron este lunes en Arabia Saudita más de doce horas de negociaciones sobre una posible tregua parcial en el conflicto en Ucrania. Según informaron medios estatales rusos, ambas partes emitirán una declaración conjunta este martes para resumir las conversaciones, que el Kremlin calificó como "difíciles".
El presidente estadounidense, Donald Trump —cuyo acercamiento a su homólogo ruso Vladimir Putin sacudió el tablero internacional en el conflicto— dice que busca querer poner fin a las hostilidades y envió a sus representantes a Riad, la capital saudita, para mantener conversaciones con ambas partes. De esa manera, los representantes se reunieron en un lujoso hotel de Riad para discutir un posible alto al fuego en el Mar Negro, con el objetivo de reactivar el acuerdo sobre la exportación de cereales.
Este pacto, vigente entre julio de 2022 y julio de 2023, permitió a Ucrania continuar con sus exportaciones agrícolas a pesar de la presencia de la flota rusa en la zona. Sin embargo, Rusia se retiró del acuerdo el año pasado, acusando a Occidente de no cumplir su compromiso de suavizar las sanciones a las exportaciones rusas.
De acuerdo con Al Arabiya News con sede en Riad, la delegación estadounidense estuvo encabezada por Andrew Peek, un importante director del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, y Michael Anton, un importante funcionario del Departamento de Estado. Por su parte, Rusia estuvo representada por Grigory Karasin, presidente del Comité de Asuntos Exteriores de la Federación Rusa y exdiplomático, junto con Sergei Beseda, asesor del director del Servicio Federal de Seguridad.
En tanto, según uno de sus miembros, la delegación ucraniana tiene previsto mantener nuevas conversaciones con el equipo estadounidense el lunes, una vez que se conozcan "los resultados de la reunión entre Estados Unidos y Rusia". En un encuentro anterior, celebrado en marzo en la ciudad saudita de Yeda, Ucrania aceptó una propuesta estadounidense de alto al fuego de 30 días, que fue rechazada por Rusia.

En un principio, las conversaciones iban a celebrarse simultáneamente, pero se realizaron por separado. El ministro de Defensa, Rustem Umerov, quien encabezó el equipo de Kiev, afirmó que la primera ronda de conversaciones el domingo fue "productiva y específica". "Abordamos puntos claves, especialmente la energía", manifestó en redes sociales.
Por su parte, el enviado estadounidense, Steve Witkoff, se mostró optimista y dijo esperar un "progreso real en Arabia Saudita el lunes" con los rusos, "especialmente en lo que respecta al Mar Negro". Witkoff aludió en la cadena Fox News a un "alto el fuego para los barcos entre ambos países, y a partir de ahí, se tenderá naturalmente hacia un alto el fuego total".
Rusia bajó las expectativas de un acuerdo: "Hay mucho trabajo por hacer"
El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, confirmó que "la cuestión de la Iniciativa del Mar Negro y todos los aspectos relacionados con su renovación están en la agenda de hoy". También señaló que la propuesta de tregua parcial provino de Trump y que su homólogo ruso aceptó discutirla en este marco de negociaciones.
Sin embargo, a pesar de los esfuerzos diplomáticos, Putin descartó un alto al fuego general de 30 días, como propusieron Estados Unidos y Ucrania. En cambio, planteó detener los ataques únicamente contra las instalaciones energéticas ucranianas. "Es un tema muy complejo y hay mucho trabajo por hacer. Estamos solo al comienzo del camino", declaró Peskov a la televisión rusa e indicó que hay muchos puntos pendientes para alcanzar una tregua, bajando las expectativas de un acuerdo inmediato.
La semana pasada, Trump había conversado con su par ruso y el de Ucrania, Volodimir Zelenski, el martes y el miércoles, respectivamente. Al respecto, el vocero del Kremlin había indicado antes del encuentro en Riad que Rusia y Estados Unidos comparten un "deseo y disposición" para seguir el camino de un acuerdo pacífico, a la vez que hay un entendimiento mutuo entre las dos partes. En tanto, un alto cargo ucraniano dijo previamente a AFP que Kiev propondría un cese al fuego más amplio, incluyendo los ataques a instalaciones energéticas, infraestructuras y ataques navales.
Mientras tanto, la violencia continúa en el territorio ucraniano. Este lunes, un bombardeo ruso en la región de Sumi dejó cerca de 90 heridos, incluidos 17 niños, según informó el presidente Zelenski. Además, el sábado, un ataque con drones en Kiev mató a tres civiles, entre ellos una niña de cinco años y su padre.
Ante esta situación, el mandatario instó a los aliados de Ucrania a incrementar la presión sobre Rusia. "Se necesitan nuevas decisiones y nueva presión contra Moscú para poner fin a estos ataques y esta guerra", publicó en redes sociales.
MB/ML