Tras el desastre aéreo en Washington, con 67 muertos y todavía sin explicación aparente, este viernes se produjo un nuevo accidente en Estados Unidos, cuando un avión sanitario cayó en un sector de la ciudad de Filadelfia, dejando un saldo de 6 muertos y varios heridos. Mientras tanto, los buzos que trabajan en las frías aguas del río Potomac hallaron la caja negra con los datos de vuelo y la grabadora de voz del helicóptero del ejército estadounidense, que se espera pueda aportar algo de luz sobre el comportamiento de sus tres tripulantes, que fueron avisados por el controlador aéreo de que tenían a un avión de American Airlines en su trayectoria y aún así terminaron impactándolo, con el terrible saldo conocido.
Todd Inman, miembro de la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte, señaló que el "helicóptero Sikorsky cuenta con una grabadora combinada de voz en cabina y un registrador digital de datos de vuelo, y la hemos recuperado así que esperamos que tenga información importante sobre las causas de la tragedia".
Hasta el momento, los equipos de emergencia recuperaron 40 cuerpos, incluidos los tres ocupantes del helicóptero. De hecho, además de la caja negra del helicóptero, los Investigadores de la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte ya contaban también con las cajas negras del avión Bombardier de American Airlines, por lo que trabajan en la reconstrucción de los hechos para tratar de determinar las causas que llevaron a la colisión sobre las aguas del río Potomac.
Sigue siendo llamativo, al observar las imágenes, que el helicóptero “avanza en línea recta” hacia el avión, pese a que el piloto admite al controlador que tiene a la vista al avión de American Airlines. Sin embargo, no se ve que haya intentado cambiar el rumbo, y eso alienta todo tipo de especulaciones, de por qué pilotos militares pudieron no haber hecho caso al controlador aéreo, o haberse confundido con otras lunes sin divisar que iban a un choque que les costaría la vida.
En grabaciones difundidas este viernes, una voz femenina señala que tanto el helicóptero como el avión cayeron al río Potomac, indicando que el tráfico aéreo y las pistas han sido cerradas inmediatamente. Instantes antes, un controlador aéreo pregunta a los tripulantes del helicóptero si tenían al jet Bombardier CRJ700 a la vista, a lo que el piloto militar responde afirmativamente, luego se oye una exclamación y la comunicación se interrumpe, obviamente por la colisión.
Tras el accidente, otro controlador informó a un avión en aproximación que hubo una colisión en el extremo de la pista 33 y que las operaciones quedaban suspendidas indefinidamente, sugiriendo que regresaran a la puerta de embarque. El piloto de ese avión confirmó haber visto destellos del otro lado del río Potomac. Finalmente, se confirmó que ambas aeronaves involucradas estaban en el río y que se iniciaba la operación de búsqueda y rescate.
Trump, siempre polémico
El presidente norteamericano señaló que el helicóptero militar "volaba más alto que los 200 pies permitidos para ese tipo de naves" y criticó a los expresidentes Biden y Obama, acusándolos de haber relajado los estándares de seguridad aérea al priorizar la contratación de personas con discapacidades o de diversas identidades de género para puestos de controladores aéreos. Sin embargo, hasta el momento, no hay evidencia que respalde que esas pueden haber estado entre las causas del accidente.
Los expertos señalaron que se necesitarán al menos 30 días para analizar las cajas negras y determinar las circunstancias exactas del accidente. necesarias para prevenir futuros accidentes.
El nuevo accidente, en Filadelfia
Mientras tanto, apenas dos días después del incidente en Washington, otro avión cayó en territorio norteamericano. Esta vez fue un avión médico en una zona residencial de Filadelfia, donde causó una explosión y varios incendios. Según reportes de Fox News, el accidente ocurrió cerca del cruce entre Roosevelt Boulevard y Cottman Avenue, en el noreste de la ciudad. Testigos registraron una explosión en el momento del impacto, seguida de un incendio y una densa humareda.
Se trata de un avión Learjet 55 que se estrelló a poco de despegar del aeropuerto del noreste de Filadelfia con destino a Springfield, Misuri. El gobernador de Pensilvania, Josh Shapiro, aseguró que el estado está colaborando con las autoridades locales para gestionar la emergencia, mientras que el Departamento de Bomberos de Filadelfia desplegó todos sus recursos en la zona.
Este accidente ocurre apenas dos días después de la colisión entre un helicóptero militar y un avión comercial cerca del Aeropuerto Nacional Reagan de Washington, tragedia que dejó 67 muertos. Actualmente, las autoridades continúan investigando las causas del siniestro y aún brindaron detalles sobre la identidad de las víctimas.
TC/HB