Google Maps, la reconocida aplicación de navegación de Google, anunció que adoptará los cambios de nombre propuestos por el presidente Donald Trump, modificando oficialmente el nombre del Golfo de México y del pico más alto de América del Norte en sus mapas.
Esta decisión, que se alineó con los decretos firmados por Trump poco después de haber asumido la presidencia, provocó indignación tanto en México como en los pueblos originarios de Alaska, luego de que también se ordenara el cambio de nombre del Monte Denali, el pico más alto de América del Norte, que se llamará McKinley.
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Según un portavoz de Alphabet Inc, la corporación tecnológica dueña de Google, la justificación de la medida tiene que ver con una práctica de "larga data" de aplicar cambios de nomenclatura en función de disposiciones oficiales.
Sin embargo, se condice con el alineamiento que expresaron los poderosos directivos de las corporaciones tecnológicas hacia el flamante presidente republicano, incluidos no solo el CEO de Google sino también Elon Musk o Mark Zuckerberg, quienes se encontraron en la ceremonia de la investidura el pasado 20 de enero.
El "Golfo de Estados Unidos" y otros cambios en Google Maps
De este modo, los nuevos nombres, el Golfo de Estados Unidos (Gulf of America, en inglés) para lo que tradicionalmente se conocía como el Golfo de México y Monte McKinley para Denali, se reflejarán en los mapas de Google Maps una vez que el Sistema de Información de Nombres Geográficos (GNIS, en inglés) de Estados Unidos actualice su base de datos.
"Tenemos una práctica de larga data de aplicar cambios de nombre cuando se han actualizado en fuentes oficiales del gobierno (de Estados Unidos)", informó el lunes un portavoz del gigante de la búsqueda y la tecnología.
Los cambios, impulsados por la administración de Trump, fueron parte de una serie de decretos ejecutivos firmados por el presidente en sus primeros días de su segundo mandato. En el que es uno de los cambios más polémicos, rebautiza el Golfo de México como el Golfo de Estados Unidos o America, en reconocimiento a su importancia económica para Estados Unidos, especialmente en los sectores de la producción de petróleo, pesca y turismo.
La medida, en tanto, tardará en ser oficializada pero fue inmediatamente adoptada por la Guardia Costera del país y también fue respaldada por el gobernador republicano de Florida, Ron DeSantis.
El otro cambio de nomenclatura, que fue en función de la alegada ideología conservadora de Trump, revierte una decisión de 2015 tomada por el presidente Barack Obama, quien había reconocido oficialmente el nombre Denali, utilizado por los pueblos originarios de Alaska, para referirse al pico más alto de América del Norte.
El nuevo decreto de Trump restaura el nombre Monte McKinley, que había sido utilizado previamente en honor a William McKinley, el vigésimo quinto presidente del país, figura del partido Republicano y el último veterano de la Guerra de Secesión que alcanzó ese cargo.
"América mexicana": las críticas de Sheinbaum hacia Trump
Aunque los cambios solo se aplicarán dentro de Estados Unidos, Google Maps reflejará ambos nombres en los mapas fuera del país. De este modo, los usuarios fuera de EE. UU. verán tanto el nombre tradicional de "Golfo de México" como el nuevo "Golfo de América", mientras que en México, el nombre original se mantendrá.
Sin embargo, estas medidas no han estado exentas de controversia. Por un lado, la medida generó tensión diplomática con México, con quien Trump mantiene un frente abierto en línea con su política de deportaciones masivas de migrantes indocumentados.
La presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, reaccionó señalando que, en lugar de renombrar el Golfo de México, Estados Unidos debería llamarse "América Mexicana", haciendo referencia a un antiguo mapamundi del siglo XVII en el que América del Norte era conocida bajo este nombre.
Por otro lado, el anuncio de Trump generó ruido a nivel interno luego de que grupos indígenas de Alaska, que habían luchado por el reconocimiento de Denali, se opusieran fuertemente al cambio, defendiendo el nombre tradicional utilizado por generaciones anteriores a la colonización europea.
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La influencia de las corporaciones tecnológicas en la administración Trump
El anuncio de Google Maps se produjo en un contexto de acercamiento entre las grandes empresas tecnológicas y la administración Trump. A pesar de las críticas, este tipo de decisiones empresariales de las grandes tecnológicas, parecen estar alineadas con los intereses de la nueva administración estadounidense, lo que podría anticipar un mayor peso del sector privado en la toma de decisiones políticas.
Esto quedó reflejado en la ceremonia de investidura de Trump del 20 de enero de 2025, donde varios de los empresarios más influyentes del mundo, como Elon Musk, Jeff Bezos, Mark Zuckerberg, Sundar Pichai y Shou Zi Chew, estuvieron presentes en primera fila, junto a altos funcionarios del gobierno y la familia presidencial.
Los directivos de las gigantes de la tecnología, que lideran empresas como Amazon, Tesla, Meta, Google y TikTok, respectivamente, acumulan fortunas que superan los 200.000 millones de dólares en varios casos, y su presencia refuerza la percepción de una mayor relación entre el sector tecnológico y la política no solo estadounidense sino global.
Uno de los asistentes más activos fue Elon Musk, quien se acercó a Trump durante la campaña electoral y se convirtió en uno de sus mayores aportantes. Además de presenciar la ceremonia, el dueño de Starlink y de X pronunció un discurso en un mitin posterior, asegurando que su objetivo es trabajar en cambios significativos en el país. Musk fue designado como asesor en el Departamento de Eficiencia Gubernamental, un organismo enfocado en reducir el gasto federal, incluyendo programas como Medicare, Seguridad Social y beneficios para veteranos.
Otro que reaccionó al cambio de signo político en Estados Unidos fue Mark Zuckerberg, otro de los dueños de las corporaciones tecnológicas más relevantes. El CEO de Meta, dueña de Instagram y Facebook, se reunió con el mandatario y posteriormente tomó decisiones empresariales alineadas con la ideología del movimiento MAGA. Según el reporte de medios estadounidenses, una de sus acciones más notables fue nombrar a Dana White, un aliado de Trump, en la junta directiva de Meta. Además, la compañía implementó polémicos cambios en su política de contenido y moderación, en línea con posturas defendidas por Trump.
CD / ds