El magnate Elon Musk, uno de los hombres más ricos del mundo, presentó este miércoles un plan de recortes para el Gobierno de Donald Trump, quien asumirá sus funciones en enero. En su nuevo rol, a cargo del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE, por sus siglas en inglés), Musk anunció una ofensiva para reducir el número de funcionarios y el gasto federal en unos 500.000 millones de dólares.
En declaraciones al diario The Wall Street Journal, el empresario adelantó que apunta a cientos de miles de millones de dólares en gastos gubernamentales, incluidos los fondos para la radiodifusión pública y los grupos de planificación familiar Planned Parenthood, así como a la burocracia que representa una "amenaza existencial" para la democracia estadounidense.
El fundador de Tesla y SpaceX afirmó que junto con su colega empresario Vivek Ramaswamy, leal a Trump, trabajarán para reducir las regulaciones federales y hacer importantes recortes administrativos y de costos. "Somos empresarios, no políticos. Serviremos como voluntarios externos, no como funcionarios o empleados federales", escribieron Musk y Ramaswamy.
"Cuando el presidente anule miles de tales regulaciones, los críticos alegarán extralimitación ejecutiva. De hecho, estará corrigiendo la extralimitación ejecutiva de miles de regulaciones promulgadas por decreto administrativo que nunca fueron autorizadas por el Congreso", afirmaron. Musk y Ramaswamy agregaron que una reducción en las regulaciones allanaría el camino para "reducciones masivas de personal en toda la burocracia federal".
El objetivo, según ellos, es recortar más de 500.000 millones en gastos gubernamentales. “Con un mandato electoral decisivo y una mayoría conservadora de 6-3 en la Corte Suprema" el nuevo departamento de eficiencia gubernamental "tiene una oportunidad histórica para realizar reducciones estructurales en el Gobierno federal", opinaron.
A pesar de la ambiciosa agenda, los planes para desmantelar programas tropezarán muy probablemente con la oposición de políticos, incluso republicanos. Aun así, Musk y Ramaswamy citaron una serie de decisiones de la Corte Suprema que, según ellos, justifican los recortes, y estiman que el uso de decretos para recortar regulaciones no aprobadas por el Congreso es "legítimo y necesario". Esperan haber terminado para el 4 de julio de 2026.
El vínculo entre Donald Trump y Elon Musk
Trump, del Partido Republicano, asumirá su segundo mandato al frente de la Casa Blanca el 20 de enero del año próximo, tras haber ganado las elecciones contra la candidata demócrata Kamala Harris. Musk se ha convertido en un aliado cercano de Trump en los últimos meses. Se gastó más de 100 millones de dólares en impulsar su candidatura presidencial y dio mítines en el estado crucial de Pensilvania.
Como sus empresas tienen distintos grados de interacción con el Gobierno estadounidense y extranjeros, su nuevo puesto plantea interrogantes sobre un conflicto de intereses. El millonario nacido en Sudáfrica invitó a Trump a ver un vuelo de prueba de su empresa SpaceX el martes en una señal de lazos cada vez más estrechos entre ambos, pero podrían surgir fricciones en el futuro.
ML