“Hacemos un llamado a las autoridades electorales de Venezuela para que avancen de forma rápida y divulguen públicamente los datos desagregados por mesa de votación”.
Esta es la parte central del comunicado conjunto de Brasil, México y Colombia, que acaba de publicarse. Para el trío de gobiernos sudamericanos “las controversias sobre el proceso electoral deben ser dirimidas por la vía institucional”. Convocan “a los actores políticos a ejercer la máxima cautela” para evitar “una escalada de episodios violentos” y evitaron mencionar a Nicolás Maduro, presidente venezolano.
La bandera de Brasil ondea en la embajada argentina en Caracas tras salida de los diplomáticos
Para los tres jefes de Estado que suscriben la declaración: Lula da Silva, Andrés López Obrador y Gustavo Petro, es esencial “proteger las vidas humanas que son una preocupación prioritaria en este momento”. En ese sentido, concluyen con una suerte de reclamación: “Que esta sea una oportunidad de expresar, nuevamente, nuestro absoluto respeto a la soberanía del pueblo de Venezuela. Reiteramos nuestra disposición a apoyar los esfuerzos de diálogo y la búsqueda de acuerdos que beneficien al pueblo venezolano”.
Las coincidencias de los tres mandatarios, que hasta ayer miércoles 31 no había llegado a un total consenso, quedó claro entre ellos después de una conversación que mantuvieron esta tarde.
Obrador había señalado que era “muy probable” ese diálogo telefónico con el presidente Lula y con Petro. Y en aquel momento expresó: “Vamos a dialogar sobre qué posición adoptar”. Ahora está claro. Había algunas diferencias entre ellos: una de ella es que Petro reclamaba una auditoría internacional de las actas a ser publicadas con los resultados de los comicios. En cambio, para López Obrador y para Lula era necesario aguardar que se publique el conteo de votos definitivo. En la elaboración de la declaración conjunta que acaba de salir, actuaron las tres cancillerías además de los Jefes de Estado.
CP
