Entre temores de una respuesta de Irán y sus aliados, se conocieron detalles de cómo se orquestó el plan atribuído a Israel para asesinar a Ismail Haniyeh, uno de los máximos líderes del movimiento Hamás. A diferencia de lo que se pensaba, no fue un misil lo que acabó con la vida del dirigente palestino, si no una bomba colocada de forma clandestina en una residencia de huéspedes ubicada en Teherán, donde se encontraba.
El artefacto explosivo había sido escondido hace aproximadamente dos meses atrás en el inmueble de la capital iraní, gestionada y custodiada por el Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica. Así lo confirmaron siete funcionarios de Medio Oriente, entre ellos dos iraníes, en diálogo con con el medio estadounidense The New York Times.
Hamás anunció el asesinato de su líder Ismail Haniyeh en un ataque de Israel en Teherán
Haniyeh se encontraba desde hace tiempo en la casa de huéspedes que forma parte de un gran complejo conocido como Neshat, en un barrio de lujo de Teherán. Después de mucho tiempo, una vez que se confirmó que se hallaba dentro de su habitación, el potente explosivo fue detonado a distancia. Acorde a lo trascendido, la bomba mató al referente del grupo islamista y a uno de sus guardaespaldas.
El dirigente de 61 años había viajado a Teherán para asistir a la ceremonia de investidura del nuevo presidente iraní, Masud Pezeshkian. El mandatario juró el martes su cargo, justo antes de que en la madrugada del miércoles el líder del brazo político de Hamás fuera asesinado.
Los atacantes conocían que Haniyeh se había alojado en esa residencia en múltiples oportunidades cuando viajaba a la ciudad capital. La explosión provocó que se rompieran varias ventanas y generó el derrumbe parcial de un muro exterior del edificio.
Los funcionarios que hablaron con el medio norteamericano lo hicieron en condición de anonimato y afirmaron que Israel fue el responsable del asesinato, misma conclusión a lo que llegaron los funcionarios estadounidenses que tambien fueron consultados.
El Gobierno israelí no reconoció públicamente la autoría del homicidio de Ismail Haniyeh, pero las siete fuentes de Medio Oriente aseguraron que inmediatamente después de la operación habrían informado a Estados Unidos y otros países sobre la planificación que se llevó a cabo para cometerlo. Antony J. Blinken, secretario de Estado estadounidense, declaró que no habían tenido conocimiento previo del plan de asesinato.
Fallas en la Inteligencia iraní
Tras la muerte de uno de los mandamases más importantes de Hamás, se especuló con que Israel lo había asesinado con un ataque con misiles disparados desde un avión no tripulado. Esta teoría causó muchas dudas, porque no se entendía cómo habían sido capaces de burlar los sistemas de defensa antiaérea iraníes.
Las fuentes iranías mencionaron que los responsables hallaron una "brecha" en las defensas de Teherán, que consistía en "un fallo en la seguridad de un recinto", que se suponía que estaba fuertemente custodiado. De esta manera, la bomba fue instalada con mucha anticipación, se estima que al menos dos meses antes, y pudieron mantenerla allí hasta finalmente activarla.
Semejante descuido significó una "catastrófica falla de inteligencia y seguridad para Irán y una tremenda vergüenza para la Guardia", manifiesta el artículo. Sin embargo, aún no se esclareció la manera en que la bomba pudo ser escondida en la residencia, pero se especula con que necesió de una amplia vigilancia del complejo.
La explosión fue registrada a las dos de la madrugada. El personal de seguridad del lugar se dirigió a la habitación del líder del grupo islámico y dio aviso a los médicos. Al llegar, reportaron que había fallecido "inmediatamente después" de la detonación, mientras que intentaron reanimar a su guardaespaldas, pero no hubo caso.
También se señaló que el líder de la Yihad Islámica Palestina, Ziyad al-Nakhalah, estaba alojado en la habitación al lado de la del dirigente de Hamás. Su cuarto no sufrió daños, por lo que se cree que el ataque estuvo milimétricamente planeado contra Haniyeh.
Temor de una escalada regional
El cuerpo del jefe político del movimiento palestino que gobierna Gaza llegó este viernes a la mezquita Imam Muhammad bin Abdul Wahhab, situada en Doha. Haniyeh residía en la capital de Catar junto a otros líderes del grupo y será enterrado en un cementerio en Lusail, al norte de la ciudad, después de la ceremonia funeraria.
El portavoz del ejército israelí, Daniel Hagari, dijo este jueves que el ataque en Líban, donde murió el militar de Hezbollah Fuad Shukr, fue el único lanzado por su país en la madrugada del miércoles en Oriente Medio. Pero los acontecimientos han generado un aumento en las tensiones en la región.
El entierro de Haniyeh, quien había sido uno de los principales negociadores del alto el fuego, se produce en un momento en que Irán y sus aliados preparan una respuesta coordinada contra Israel. El jefe del Hezbolá libanés, Hasán Nasralá, advirtió que era "inevitable" que el movimiento respondiera al bombardeo israelí.
El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, aseguró que su país estaba preparado "para cualquier escenario, tanto defensivo como ofensivo". El líder hebreo ya había prometido "destruir a Hamás" en represalia por el ataque del 7 de octubre pasado en el sur del país, que desencadenó la guerra actual.
Haniyeh desempeñaba un papel clave en las negociaciones para un posible acuerdo de tregua en Gaza, en las que Catar, Egipto y Estados Unidos han ejercido de mediadores. Pero este proceso queda en duda después de su muerte, mientras la comuidad internacional llamó a la calma y reclamó nuevamente que cesen las hostilidades en el territorio, que según manifestaba Haniyeh, Israel estaba evitando que ocurriera.
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