El líder opositor Edmundo González Urrutia, que reclama ser el ganador de las elecciones presidenciales de Venezuela sobre Nicolás Maduro, denunció que su yerno fue secuestrado en Caracas por "hombres encapuchados". El mensaje fue realizado desde Washington, ciudad norteamericana en la que Urrutia fue recibido por el mandatario Joe Biden. Tiempo después, María Corina Machado acusó al gobierno chavista de rodear la casa de su madre.
“Esta mañana fue secuestrado mi yerno Rafael Tudares”, comenzó el escrito, que fue posteado en la cuenta de X de Urrutia: “Se dirigía a la escuela de mis nietos a dejarlos por el inicio a clases, lo interceptaron hombres encapuchados, vestido de negro, lo montaron en una camioneta color dorado, placa AA54E2C y se lo llevaron. A esta hora se encuentra desaparecido”, advirtió.
El hecho ocurre sólo tres días antes de la asunción del presidente Nicolás Maduro por un nuevo mandato, prevista para el próximo viernes 10 de enero. En esa fecha, Urrutia planea no sólo estar en dicho país, sino también asumir el poder al frente del Ejecutivo venezolano. Es que tanto él como diversos líderes del mundo consideran que éste es el legítimo ganador de los comicios realizados en la nación caribeña en julio de 2024, fecha en la que se produjeron masivas protestas en contra de Maduro por no reconocerlo un vencedor real en las elecciones.
González Urrutia está llevando a cabo una gira regional desde el sábado pasado para obtener mayor apoyo y respaldo de países aliados a su partido. De hecho, el líder también pisó suelo argentino y se reunió con Javier Milei el sábado 4 de enero, motivo por el que la Rosada llevó a cabo un fuerte operativo de seguridad en las inmediaciones, que estuvieron colmadas de ciudadanos venezolanos.
“El gobierno podrá cerrar el espacio aéreo, podrá cerrar las autopistas y los accesos a Caracas, pero no va a impedir el resonante triunfo que ya obtuvimos y la toma de posesión el próximo 10 de enero”, afirmó, ante las amenazas del oficialismo.
Por su parte, Machado también acusó a la administración madurista de apostarse fuera de la casa de su madre. "ALERTA. Desde hace unas horas, agentes del régimen han rodeado la casa de mi mamá, han puesto alcabalas en toda la urbanización y sobrevolado con drones. También “se fue” la luz en la zona. Mi mamá tiene 84 años, está enferma, con afecciones crónicas de salud. Maduro y compañía, ustedes no tienen límite en su maldad. Cobardes", acusó.
La calma que antecede a la tormenta
La tensión entre el oficialismo y González Urrutia es cada vez más palpable desde la finalización de las elecciones en Venezuela, el pasado 28 de julio. Hace apenas unos días, había llamado a las Fuerzas Armadas a reconocerlo como Presidente, instando a la institución militar a apoyar su asunción al poder el próximo 10 de enero, cuando el mandatario Nicolás Maduro tomará posesión de su tercer mandato consecutivo.
El pedido no cayó bien en las oficinas de Maduro. En primer lugar, fueron las mismas Fuerzas las que emitieron un comunicado de repudio, que fue canalizado a través del ministro de Defensa, el general Vladimir Padrino.
A través de un mensaje emitido en televisión estatal, señaló: "Hemos visto con profunda indignación un video publicado la noche de ayer, domingo 5 de enero, por el cobarde Edmundo González Urrutia, dirigiéndose de manera desvergonzada e insolente a la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (...). Rechazamos categóricamente y con absoluta vehemencia este payasesco y bufo acto de politiquería despreciable".
Otro de los funcionarios oficialistas que se mostró visiblemente molesto por el mensaje de Urrutia, fue el ministro del Interior, Diosdado Cabello: “"Gustosamente lo recibiré (...). Sabe el señor González Urrutia que apenas ponga un dedo en Venezuela será detenido", ironizó durante una conferencia de prensa "Si pone un pie en Venezuela, será juzgado", insistió el alto funcionario.
Para el día de la asunción de Maduro frente a su tercer mandato, Cabello explicó que que "los cuarteles están en tranquilidad" y que se va a desarrollar un amplio despliegue de seguridad en las calles. "Venezuela está en paz. Quienes quieran perturbar la paz, asuman las consecuencias", advirtió.
TC / ds