El portaaviones USS George Washington se encuentra camino a Chile luego de su paso por el Mar Argentino en el que realizó operaciones en conjunto con la Armada del país. Durante su estadía en aguas nacionales, los buques provenientes de Estados Unidos participaron del ejercicio de adiestramiento “Gringo-Gaucho II” y recibieron la visita del ministro de Defensa, Luis Petri, quien señaló que estas actividades servirán para alistarse contra los “desafíos actuales”.
Como parte del despliegue internacional "Southern Seas" llevado a cabo por Estados Unidos desde 2007, el USS George Washington llegó al espacio marítimo argentino el pasado jueves 30 de mayo junto con el destructor de misiles guiados de clase Arleigh Burke USS Porter y buque logístico de reabastecimiento de clase Henry J. Kaiser USS John Lenthall.
El objetivo de la iniciativa fue el de reforzar la colaboración entre las fuerzas armadas de los dos países. Además, desde el ministerio de Defensa aseguraron que esta acción permitió a la Armada Argentina aumentar su interoperabilidad, ya que se entrenó con la Marina estadounidense bajo los estándares de la OTAN, “denotando un alto grado de profesionalismo, capacitación e idoneidad”.
Cómo es el portaaviones USS George Washington que llegó a la Argentina
Debido a su imponente tamaño, el portaaviones no pudo amarrar en ningún puerto argentino, por lo que embarcaciones nacionales partieron desde la Base de Puerto Belgrano para encontrarse con los buques estadounidenses en pleno Mar Argentino. El destructor ARA “La Argentina”, ARA Espora, “Rosales” y ARA “Sarandí” fueron los navíos nacionales encargados de recibir a la armada extranjera.
El USS Washington sirvió para prepararse para los “desafíos actuales” según Petri
El ministro de Defensa encabezó el inicio de la actividad PASSEX “Gringo- Gaucho II” con Estados Unidos el pasado viernes 31 de mayo, arriba del USS George Washington. En el acto oficial también estuvieron presentes la canciller Diana Mondino y el Embajador de los Estados Unidos, Mark Stanley.
Durante la jornada, los funcionarios presenciaron operaciones y maniobras tácticas para incrementar el nivel de adiestramiento naval de los 750 marinos argentinos que participaron en lanzamientos de aviones y helicópteros, transferencias aéreas de personal, y ejercicios de Visita, Registro y Captura.
"Esto es volver al mundo, esto es revalorizar a nuestras fuerzas, esto es el gobierno de Javier Milei", subrayó el Ministro a través de sus redes sociales. "Después de 14 años, la Armada argentina se entrena con la Marina estadounidense en uno de sus ejercicios combinados de mayor envergadura, denotando un alto grado de profesionalismo, capacitación e idoneidad. Con orgullo, podemos decir que la Armada Argentina está de pie y lista para los desafíos actuales", agregó.
El ejercicio “Gringo-Gaucho II” que la armada hizo con el USS Washington
El encuentro de las Armadas se dió en la milla 150 del Mar Argentino, donde se llevó a cabo el entrenamiento en conjunto que consistió en maniobras tácticas antiaéreas, Visitas, Registro y Capturas (VRC) y Adiestramiento en Técnicas y Tácticas Navales (CITT) entre los 750 marinos argentinos y el personal de los buques estadounidenses.
El ejercicio PASEXX “Gringo-Gaucho II” permitió desarrollar diferentes evoluciones y formaciones tácticas en navegación, operaciones de vuelo, además de la concreción de ejercicios antisubmarinos y de comunicaciones. También se establecieron enlaces entre los buques para fijar un nuevo punto de encuentro.
De la práctica participaron el portaaviones norteamericano USS "George Washington" con sus buques escoltas - el destructor USS "Porter" y el buque logístico USNS "John Lenthall" - y los destructores ARA "La Argentina" y ARA "Sarandí". También se desplegaron las corbetas ARA "Espora" y ARA "Rosales", y los patrulleros oceánicos ARA "Contraalmirante Cordero", ARA "Piedrabuena" y ARA "Storni".
Además, se unieron al ejercicio dos helicópteros Sea King H3, un helicóptero Fennec, un avión de exploración y vigilancia marítima B-200, y dos aeronaves turbomentor. El Fennec realizó prácticas efectivas de cross deck (despegue y anavizaje) en las distintas cubiertas de vuelo, tanto del portaaviones americano como de las unidades nacionales.
Por otro lado, unidades dependientes de la División Patrullado Marítimo y personal de la Agrupación Buzos Tácticos, desarrollaron una actividad combinada con el destructor USS “Porter”, para “unificar procedimientos e intercambiar experiencia” en relación con las operaciones de interdicción marítima.
Durante el desarrollo de la ejercitación, los patrulleros oceánicos ARA “Contraalmirante Cordero” y ARA “Piedrabuena” desplegaron sus embarcaciones menores (RHIB) hacia el buque de la Marina de los Estados Unidos, que simuló ser un buque mercante en navegación. “Cumpliendo con los procedimientos establecidos, se realizó la interdicción marítima de acuerdo a la legislación internacional vigente”, aseguraron desde el ministerio de Defensa.
Y agregaron: “Estos ejercicios combinados, empleando medios y personal de las Armadas de nuestro país y la norteamericana, no solo contribuyen a la protección de nuestras jurisdicciones marítimas y de los recursos allí presentes, sino también a la interoperabilidad entre ambas Fuerzas Navales y al fortalecimiento de lazos de amistad e integración”.
Es una reformulación de las relaciones en el plano militar con la Argentina después de más de casi dos décadas de cortocircuitos y con las claras intenciones marcadas por el Presidente Javier Milei de pertenecer a la OTAN como “socio global”.
Después de Argentina, el USS Washington llega a Chile
Ya concluidos los ejercicios en conjunto, los buques de 4ª Flota estadounidense se encuentran navegando por el Atlántico Sur y darán la vuelta hacia el Pacifico a través del Estrecho de Magallanes, que es de jurisdicción chilena, pero se estima que allí hay pesqueros chinos ilegales que van y vienen de un océano a otro.
El portaaviones arribará a la ciudad de Punta Arenas este martes 4 de junio, donde la Escuadra Nacional de la Armada de Chile lo espera desde el 31 de mayo para brindar apoyo y escoltarlo en su navegación desde la boca oriental del Estrecho de Magallanes hasta el puerto de Valparaíso.
En Valparaíso hará un ejercicio militar con la marina chilena, la cual mira atenta y algo recelosa el despliegue estratégico que vienen teniendo los militares argentinos tras años de letargo impuesto por la política. Luego, la flota partirá para San Diego, luego California y de allí a Japón.
