"¡Gol! ¡Locura!", "Goool, ¡amo a Centurión!", "Pierde Racing", "¡¡Dale Academia!!" Los tweets podrían pertenecer a Mirtha Legrand, tal vez a Guillermo Francella, Graciela Alfano o Soledad Silveyra, por nombrar sólo a algunos fanáticos famosos de Racing Club. Pero no: son de otra fanática que, precisamente, no tiene mucho que ver con la farándula. Se trata de Amalia Amoedo, la nieta de la fallecida Amalia Fortabat e hija de Inés de la Fuente, heredera de una de las fortunas más grandes de la Argentina.
Habitué del mundo del arte y de reuniones a beneficio, es también una pequeña empresaria y tiene un costado "popular": su pasión racinguista a flor de piel. Amalia concurre al Cilindro de Avellaneda cada vez que su equipo juega de local, y desde la Platea A, una de las mejores ubicaciones, es una verdadera fanática: sigue de cerca a su equipo, grita los goles, y hasta hace comentarios sobre los jugadores. La última vez que estuvo en la cancha fue el sábado 1º de diciembre y se fue con una alegría luego de que su equipo le ganara tres a uno a All Boys. Fue un partido con varios goles, donde Amalita vibró por última vez antes de que termine el campeonato.
Es hija de Inés de la Fuente y Julio Amoedo, un miembro del Partido Conservador Popular, quien ocupó una banca en el Senado por la provincia de Catamarca desde 1983 a 1992. Tiene dos hermanos: Bárbara y Alejandro Bengolea. Amalia nació un 30 de diciembre de 1976 y se crió en el seno de una familia millonaria y numerosa, acostumbrada a disfrutar de veranos en Mar del Plata, Punta del Este y Miami. De su padre, dice, heredó su pasión por la navegación a motor. Pero fue a través de su hermano Alejandro que conoció el sentimiento por Racing cuando él comenzó a llevarla a la cancha.
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