En el discurso inaugural de su segundo mandato, el flamante presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ratificó su postura acerca de la imposición de aranceles para gravar importaciones, aunque evitó dar precisiones sobre cuándo entrarían en vigencia.
"Comenzaré de inmediato la revisión de nuestro sistema comercial para proteger a los trabajadores y las familias estadounidenses", señaló el jefe de Estado durante la ceremonia de asunción en el Capitolio de Washington, rodeado de pares de todo el mundo.
Donald Trump y su discurso de asunción: claves y perspectivas de un momento histórico
Qué dijo Donald Trump sobre los aranceles
Siguiendo la misma línea argumental que mantuvo durante toda su campaña electoral, Trump indicó que "en lugar de gravar a nuestros ciudadanos para enriquecer a otros países, aplicaremos aranceles y impuestos a países extranjeros para enriquecer a nuestros ciudadanos".
Más allá de la mención de las cargas que implementaría sobre el comercio internacional, el líder del Partido Republicano bajó el tono en relación con las promesas que había realizado luego de imponerse frente a la demócrata Kamala Harris en los comicios presidenciales.
De hecho, a fines de noviembre de 2024, el magnate había anticipado que el 20 de enero de 2025 firmaría varios documentos "para cobrar a México y Canadá un arancel del 25% sobre todos los productos que entren en Estados Unidos y sus ridículas fronteras abiertas".
"Miles de personas están cruzando (desde) México y Canadá, trayendo delincuencia y drogas a niveles nunca vistos", planteó el actual mandatario por aquel entonces mediante una extensa publicación en su red social Truth Social que inyectó una dosis de incertidumbre en los países vecinos.
"En este momento, una caravana que viene de México, compuesta por miles de personas, parece imparable en su búsqueda por pasar por nuestra frontera actualmente abierta", advertía Donald Trump y argumentaba que "este arancel permanecerá en vigor hasta que las drogas, en particular el fentanilo, y todos los migrantes ilegales detengan esta invasión de nuestro país".
China, México y Canadá, los apuntados por Trump
A propósito de esta droga sintética que provoca decenas de miles de muertes anuales por sobredosis en la potencia norteamericana, en Washington circula la creencia de que es fabricado por cárteles mexicanos con precursores químicos de origen chino.
"He tenido muchas conversaciones con China sobre las enormes cantidades de drogas, en particular fentanilo, enviadas a Estados Unidos, pero sin resultado. Me dijeron que instituirían su pena máxima, la muerte, para cualquier traficante de drogas que fuera sorprendido haciendo esto, pero, lamentablemente, nunca lo hicieron y las drogas llegan a nuestro país, principalmente a través de México, a niveles nunca vistos", sumó Trump.
En tal sentido, el entonces presidente electo de EE.UU. manifestó que "hasta que dejen de hacerlo, le cobraremos a China un arancel adicional del 10%" además de todos los gravámenes existentes "sobre todos sus numerosos productos".
Por su parte, el país oriental matizó las amenazas trumpistas al replicar que "nadie ganará una guerra comercial". "China considera que la cooperación económica y comercial sinoestadounidense es mutuamente beneficiosa", planteó el portavoz de la Embajada de China en Estados Unidos, Liu Pengyu, en diálogo con AFP.
MFN