Luego de algunos meses de calma cambiaria, los dólares paralelos emprendieron una acelerada que llevó al equipo económico a retomar su política de intervención de la brecha cambiaria. El alza comenzó a finales de la semana pasada y tomó fuerza lunes, martes y miércoles, cuando el Gobierno reforzó las ventas.
A pesar de la baja de ayer, el tipo de cambio blue cerró a $ 1.160, lo que implicó una suba semanal de $ 55. En este marco, el CCL aumentó el viernes $ 3,7 y trepó hasta los $ 1.164,6, en tanto el MEP subió $ 11 y llegó hasta los $ 1.142,2. En la semana, el contado con liqui se incrementó $ 72,28 (6,6%) y el MEP, $ 69,1 (6,4%). En ambas cotizaciones se registró la cifra más alta desde mediados de mayo.
En las últimas cinco jornadas, el dólar bolsa tocó un techo de $ 1.150. “Esto implicó un incremento en una semana del 8%, barriendo con las ganancias del carry-trade de los últimos 3 o 4 meses en tan solo 7 días. Si anualizamos esta variación estaríamos ante un aumento del 5.370% de la cotización. Por fortuna sabemos que este cálculo sería, a nivel técnico, una grosería”, comentó un informe de la consultora Vectorial.
Sin embargo, la disparada de la divisas ascendió las alarmas en el Gobierno, que tuvo que salir a intervenir vendiendo bonos. El miércoles se notó un inusual movimiento: un fuerte volumen operado en los bonos soberanos con vencimiento en 2023, es decir tanto en el AL30 como en el GD30. Para los analistas se debió a intervenciones impulsadas por el equipo económico para tratar de amortiguar las cotizaciones de los dólares. La consultora 1816 estimó que fue cercano a los US$ 270 millones.
“Tras varios meses de apreciación del peso con volatilidad menguante, el viernes pasado los financieros se despertaron y llegaron a subir un 10% en cuatro días, que es lo que rinden los pesos durante cuatro meses, tomando como referencia la tasa de caución a un día que ronda 2,4% tasa efectiva mensual (TEM). Damos por hecho que la brusca corrección del CCL y el MEP en el último tramo de la rueda del miércoles fue consecuencia de ventas récord del Central, dado lo operado en el AL30. Los montos negociados en AL30D Y AL30C fueron incomparables a cualquier cosa previa”, comentó la consultora 1816.
Para Leo Anzalone, director del Cepec, la suba del dólar blue y los financieros se deben a varias causas. Por un lado, “la reciente reducción de la tasa de interés impacta en el tipo de cambio. Creemos que la intención detrás de esta decisión fue presionar al alza la brecha cambiaria, que se encontraba en niveles históricamente bajos”.
Otras razones, plantea el economista, tienen que ver con la estacionalidad y los movimientos en Brasil. Para el economista, “a medida que se acercan las vacaciones, muchas personas comienzan a dolarizarse para planificar sus viajes al exterior”, así como las turbulencias fiscales en Brasil, “que provocaron una devaluación del real. Un Brasil más competitivo, ejerce presión sobre nuestro tipo de cambio. También al desarme del carry trade que “desde julio, la brecha cambiaria cayó abruptamente. Aquellos que apostaron por instrumentos en pesos, como las Lecap, lograron rendimientos extraordinarios en dólares”, agregó Anzalone.
“El movimiento que hizo el dólar un poco fue un rebote por haber tenido una brecha mínima dólar MEP del 3% ridículamente baja, con lo cual creo que un par de noticias del exterior que sacudieron el avispero. Una es Brasil obviamente la devaluación del real hasta 6,30 hasta que tuvo que intervenir el Banco Central de Brasil vendiendo dólares, esto le da cierta inestabilidad a la moneda local”, sostuvo Gustavo Neffa, economista y director de Research for Traders.
Por otra parte, el frente externo también jugó su papel en la represión de los dólares. La devaluación del real pone presión y el tipo de cambio real multilateral en Argentina se sigue apreciando y hace que el país pierda competitividad. “Tras la devaluación de diciembre de 2023, el Gobierno mantuvo el crawling peg del tipo de cambio oficial en 2%. La estabilidad del dólar es clave para alcanzar el objetivo de reducir paulatinamente la inflación. El tipo de cambio real, después de subir 50% en diciembre pasado, se apreció durante todo 2024 y ya se ubica en un nivel comparable a los $ 350 registrados al final de la gestión anterior”, resaltó la Consultora PxQ, del economista Emmanuel Álvarez Agis
Por otra parte, a pesar de las compras récord del Banco Central en el último trimestre (US$ 4.650 millones, donde US$ 1.675 millones corresponden a esta semana), la autoridad monetaria no logra consolidar su posición externa. “Sin embargo, producto de pagos de deuda por US$ 2.600 millones en lo que va del cuarto trimestre, más otras salidas por US$ 900 millones, las reservas netas siguen en terreno negativo, y los interrogantes no ceden”, destacó el Banco Provincia en su panorama económico. Ayer la máxima autoridad monetaria compró US$ 125 millones en el MULC y en la semana registró un saldo comprador por US$ 533 millones. Las reservas brutas terminaron en US$ 32.866 millones.