El gobierno de Javier Milei consiguió prolongar el superávit fiscal en noviembre y se encamina a cerrar 2024 con equilibrio en las cuentas públicas. Según estimaciones privadas, el 21% del ajuste recayó sobre las jubilaciones y pensiones contributivas a lo largo del año.
El Ministerio de Economía informó que el Sector Público Nacional (SPN) alcanzó un superávit financiero de $357.162 millones, producto de un superávit primario de $1.381.545 millones y de un pago de intereses de deuda pública neto de $1.024.383 millones.
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El Gobierno extendió el superávit fiscal en noviembre
De esta manera, la administración nacional acumuló en los primeros once meses del año un excedente de aproximadamente 0,6% del Producto Interno Bruto (PIB). En caso de contabilizar únicamente los gastos contra los ingresos, el superávit trepó a 2,1% del PIB.
Las proyecciones del equipo económico dan cuenta de que el apretón fiscal redundará en un resultado positivo total de 0,3% del PIB para 2024, consistente con una cifra primaria de 1,9%, aún en un mes estacionalmente negativo como diciembre por el pago de aguinaldos a empleados públicos y jubilados y pensionados.
"Los ingresos totales del SPN en el mes alcanzaron los $9.609.299 millones (+147,3% i.a.). En lo que respecta a la recaudación tributaria, la misma presentó un crecimiento de +182,1% i.a. explicado principalmente por la variación de los ingresos correspondientes a los Aportes y Contribuciones a la Seguridad Social (+185,5% i.a.), los Derechos de Exportación (+477,4%), y Derechos de Importación (+187,9% i.a.)", reza el reporte oficial.
Entre los impuestos vinculados a la actividad económica interna, destacaron la recaudación correspondiente al Impuesto al Valor Agregado (IVA) neto de reintegros (+156,3% i.a.), al Impuesto a los Débitos y Créditos (+162,5% i.a.), y a las Ganancias (+177,8% i.a.).
En cuanto a los gastos del gobierno central, treparon 100,9% a $8.227.754millones, muy por debajo de la inflación del mismo lapso. En lo referente a prestaciones de la Seguridad Social, demandaron recursos por $3.208.888 millones (+175,7% i.a.), fruto de la actualización de los haberes con el Índice de Precios al Consumidor (IPC).
Respecto de la evolución de los salarios de los trabajadores estatales nacionales, las remuneraciones alcanzaron los $1.133.684,3 millones producto de los incrementos otorgados en el marco de las políticas salariales acordadas con los gremios correspondientes.
Las transferencias corrientes sumaron $3.029.714,3 millones. Las correspondientes al sector privado subieron a $1.238.429,6 millones. Por su parte, los giros corrientes efectuados al sector público avanzaron $523.937,7 millones (+31,9% i.a.).
Por último, los subsidios económicos presentaron un incremento de $291.120 millones (107,9% i.a.), donde los energéticos variaron $208.980 millones (151,6% i.a.), mientras que los destinados al transporte lo hicieron en $91.671 millones (+79,9% i.a.).
La inflación mayorista registró un tenue repunte y subió 1,4% en noviembre
Motosierra fiscal: cómo se alcanzó el superávit
Un informe del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF) arrojó que en el acumulado de los primeros once meses del año, la reducción interanual del gasto público primario fue de $36,5 billones con 15 de las 16 sectores cayendo y solo uno creciendo.
A propósito de cómo se distribuyó el ajuste fiscal, las jubilaciones y pensiones soportaron el 21% (su participación en la caída disminuyó 3 p.p. respecto al mes anterior); inversión real directa (15%); transferencias a provincias (16%); subsidios a la energía (9%); programas sociales (12%); salarios (9%) y transferencia a universidades (4%), entre los más significativos.
La podadora de Caputo redundó en una baja real -descontada la inflación del mismo período- de 29% del gasto primario. La única categoría que creció fue asignaciones universales para la protección social (+32,5%). Los tres ítems que más se derrumbaron: transferencias de capital a provincias (-96,7%), inversión real directa (-71%) y transferencias corrientes a provincias (-67,8%).
El titular del IARAF, Nadin Argañaraz, destacó que el superávit fiscal acumulado hasta noviembre es equivalente al 0,6% del PIB, por lo que el ajuste fiscal respecto a 2023 es de 3,7 puntos porcentuales del producto. Todo apuntaría a que el Gobierno conseguirá uno de sus principales objetivos: consolidar el equilibrio de las cuentas fiscales en 2024.
MFN
