El Banco Central compró ayer US$ 167 millones en el MULC y de esta manera culminó la semana con un saldo positivo de US$ 678 millones en el mercado cambiario. Por el lado de las reservas, la autoridad monetaria cerró la semana con un nivel de US$ 31.039 millones, así cayeron US$ 1.765 en la semana, como resultado principalmente del pago de los bonos Globales por US$ 1.600 millones.
“El hecho de que parte de estos pagos correspondan a tenedores locales que deciden dejar sus saldos en el sistema hace que el resultado neto sobre las reservas termine matizándose. En efecto, el stock de reservas se redujo solo US$ 2 mil millones el día del pago”, analizó LCG al respecto.
Por su parte, la consultora EPyCA comentó en su informe semanal: “El Gobierno sigue dando señales positivas sobre la estabilidad cambiaria y de deuda. Ahora con foco en los mercados internacionales de crédito, el 9 de enero pagó capital (US$ 2.822 MM) e intereses (US$ 1.529 millones) de deuda reestructurada por un total de US$ 4.351 millones. Con esto, no solo el riesgo país sigue en descenso (ya por debajo de los 600 puntos), sino que también el ‘spread’ con el que los bancos internacionales clasifican al BCRA está por debajo de ese nivel (unos 475 puntos básicos)”.
Y agregó: “Desde luego, esto es positivo: da cuenta de la mayor solvencia esperada de Argentina para pagar a sus acreedores y aporta a la continuidad de la estabilidad cambiaria. Resta ver qué pasará con el dinero cobrado por los acreedores en esta ocasión: dado que alrededor de la mitad de los bonistas son extranjeros y la percepción de apreciación cambiaria difundida en el mercado, desde EPyCA Consultores estimamos que habrá unos US$ 2 mil millones de pérdidas de reservas (brutas y netas, en este caso), mientras que el resto será eventualmente recolocado en el sistema financiero argentino. De todas maneras, esto impactará en la merma de las reservas netas –que ya están US$ 6 mil millones en rojo–”.
Por otra parte, ayer la deuda soberana denominada en dólares cerró con mayoría a la baja. Los bonos que más retrocedieron fueron el Bonar 2029 (-1,3%), el Global 2035 (-1,3%), el Global 2046 (-1,3%), el Bonar 2041 (-1,1%) y el Global 2041 (-1,1%). Por su parte, el riesgo país cerró en los 580 puntos básicos. Así, el índice que elabora el JP Morgan subió 16 puntos, luego de que bajara en la semana tras el pago de la deuda.
A su vez en la plaza local, el mayor índice bursátil, el S&P Merval, retrocedió un 0,9% en la última jornada hábil de la semana, hasta los 2.805.139,64 unidades. En cuanto al panel líder, cerraron mayorías a la baja. Se destacaron las caídas de Transportadora Gas del Norte (-5,1%), Edenor (-4,5%) y Transportadora Gas del Sur (-4%).
En tanto, en medio de un clima negativo en los mercados internacionales, los papeles argentinos que cotizan en Wall Street terminaron de manera dispar. Los ADRs que terminaron con alzas fueron: BBVA (+4,2%), Supervielle (+3,4%) y Pampa Energía (+2,2%). En cambio, las acciones que cotizaron a la baja fueron: Transportadora Gas del Sur (-2,7%), Corporación América (-2,6%) y Ternium (-1,3%).
Por otro lado, el dólar blue subió por cuarta semana consecutiva y cerró a $ 1.225, lo que implicó una suba semanal de $ 20. El MEP cotizó a $ 1.164 y el CCL cerró a $ 1.187,1. En tanto el dólar tarjeta, culminó en $ 1.376,7, y el cripto o dólar Bitcoin, a $ $1.211,9.
Por último, la mirada de la City estará puesta la semana que viene, cuando el martes el Indec publique los datos de inflación de diciembre. El dato que espera el mercado es en torno al 2,7%, en caso que la entidad estadística arroje un dato similar se espera que esto podría llevar a menores tasas de devaluación e interés por parte del BCRA.