ECONOMIA
las causas, según los economistas

El Banco Central cerró junio con saldo negativo en reservas

La autoridad monetaria cerró el sexto mes de 2024 con ventas por 38 millones de dólares. Terminó con un saldo negativo de US$ 84 millones. La acumulación de reservas es una de las demandas que volvió a hacer el Fondo Monetario Internacional. Además de una de las llaves que podrían abrir el cepo cambiario.

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BCRA. La brecha cambiaria explica la baja en las reservas, dicen los consultores. | Néstor Grassi

El Banco Central vendió US$ 38 millones este viernes y terminó junio con un saldo negativo de US$ 84 millones y de esa manera, las reservas alcanzan los US$ 29.016 millones, de acuerdo con lo informado por la autoridad monetaria.  

Desde que Javier Milei asumió en diciembre, el Central acumula compras netas en el mercado de cambios por US$ 17.202 millones y las reservas brutas aumentaron US$ 7.807 millones o 36,8%, desde los US$ 21.209 millones del 7 de diciembre de 2023.

La fuerte caída, no obstante, tiene su explicación en ajustes contables que se registran en cada cierre de mes y se compensa en las primeras ruedas del mes siguiente, un movimiento habitual. Si se compara con el cierre de mayo, las reservas brutas aumentaron US$ 353 millones.

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La acumulación de reservas es uno de los pedidos clave del Fondo Monetario Internacional (FMI) y una de las llaves que permitirían abrir el cepo cambiario.

Para Aldo Abram, director ejecutivo en la Fundación Libertad y Progreso, “la razón de la baja compra de reservas es, sin lugar a dudas el hecho de que haya aumentado la brecha cambiaria”.

En junio, la diferencia entre los dólares alternativos y el oficial terminó por encima del 48% y “a mayor brecha cambiaria, las expectativas de devaluación a futuro aumentan y, por lo tanto también, se desincentiva a vender divisas, ya que las mayores expectativas de devaluación incentivan a quedarte con la cosecha, no liquidarla o demorarla lo más que se pueda”, agregó Abram.

“Por eso es que no es consistente la actual política monetaria en términos de haber bajado la tasa de interés, tanto que se volvió poco remunerativa del riesgo de estar posicionados en pesos”, afirmó el economista.

Por su parte, Andrés Reschini, de F2 Inversiones, apuntó como causa al denominado Dólar Blend para exportadores: “Siempre marqué que era un riesgo mandar el 20% de la liquidación al CCL por la necesidad de acumular reservas. En la primera parte del año fue bastante bueno, es innegable, y las compras fueron en verdad impresionantes, pero ahora nos encontramos con el sistema frenado”.

El economista sostuvo que en un contexto de demanda de dólares por importaciones de energía y de otros bienes “más o menos normalizada, lo que falta por ahí es la liquidación. Además, nos encontramos con un tipo de cambio muy conversado acerca de si está atrasado o no, y llegamos a una brecha del 48%”.

Pago a importadores.

Ignacio Zorzoli, director de Finanzas del Centro de Estudios Económicos Argentina XXI (CEEA XXI), opinó que “las compras brutas del Banco Central fueron buenas a lo largo de todo el mes, en niveles superiores a lo que se venía viendo. En la medida que el stock de reservas fue aumentando, la autoridad monetaria decidió ir liberando el pago de importaciones que estaban pisadas para regularizar el comercio exterior.

“Eso permite regularizar un problema que había dejado la administración anterior. Por otro lado, en tanto el ritmo del crawling siga igual, es de esperar que las expectativas de un salto devaluatorio de parte del complejo agroexportador bajen y eso genere una liquidación mayor de divisas, que es lo que ratificará el fortalecimiento de las reservas”, añadió el especialista.

En cuanto a las perspectivas para las reservas, el economista Amílcar Collante comentó que “en los próximos meses hay pagos de deuda –en julio por US$ 3.800 millones– y además, la estacionalidad del agro se revierte.  En los años con cepo, entre agosto y noviembre el Central pierde cerca de US$ 2 mil millones”.