El mercado comenzó a ilusionarse con la posibilidad de un acuerdo entre el Gobierno y los acreedores después de la presentación de las contraofertas de los grupos de bonistas. Ahora el ministerio de Economía avanza con la respuesta. La negociación sigue y la fecha del 22 es “anecdótica”, según dijo Martín Guzmán, que también consideró que “hay valor” en las contrapropuestas.
Las diferencias entre lo que planteó Argentina y lo que acercaron los tres grupos de acreedores persisten, pero hay diálogo. “A pesar de la distancia que todavía separa a la propuesta inicial del gobierno de las pretensiones de los acreedores, hay espacio para un acuerdo. En nuestra visión, Argentina puede mejorar las condiciones de la oferta para llevar el recupero hacia los US$ 42-43 (a una tasa de descuento de 12%), algo que sería compatible con un escenario de alta aceptación entre los acreedores”, indicó un análisis de las propuestas a cargo del Grupo SBS.
Las presentaciones estuvieron a cargo del Grupo de Tenedores de Bonos de Canje, asesorados por Quinn Emmanuel LP; en línea con el Comité de Acreedores de Argentina, encabezados por Hans Humes de Greylock. El tercero es el Grupo Ad Hoc formado por BlackRock, Fidelity y Ashmore, entre otros, que representa a fondos de inversión con mayoría de tenencias de "bonos Macri", emitidos a partir de 2016.
Condiciones. Desde que comenzó la negociación, el Gobierno de Alberto Fernández planteó restricciones. Los analistas recuerdan que Argentina puede pagar cupones de 3,5% en el largo plazo y que la relación entre servicios de deuda y PBI no debe superar el 4%. Esa es la “sustentabilidad” que plantea Guzmán en sus conferencias. La deuda con el Fondo Monetario se pagaría a partir de 2027 y contempla refinanciamientos con los organismos multilaterales. El Club de París, en tanto, pidió un programa con el FMI, lo mismo que el grupo de los tenedores de bonos de canje, que aceptan ahora un cupón de PBI pero con la condición de que haya monitoreo del FMI de la economía argentina. Bajo este esquema, la deuda neta caería hasta menos de 40% en el mediano plazo.
Guzmán dijo que "hay valor" en las contraofertas de los bonistas y extenderán el plazo
Coincidencias. Según los economistas del área de Research de SBS, Adrián Yarde Buller y Juan Manuel Franco, “las contra-ofertas de los comités tienen importantes puntos en común y encontrarlos es fundamental”. Todas las propuestas prácticamente eliminan las quitas de capital, reducen sensiblemente el período de gracia, plantean cupones iniciales más altos, reclaman un cupón promedio más elevado y requieren el pago de los intereses corridos.
“En términos de valor presente neto, las ofertas de los acreedores se encuentran en el rango US$ 48,55-49,60 a un exit yield de 12% (US$ 57,75-59,00 al 10%). Las dos ofertas no son completamente comparables.
Incentivos. Los fondos como Greylock y Fintech tienen inversiones en Argentina “que van más allá de los bonos, por lo que están interesados en obtener buenos recuperos pero también quieren evitar que Argentina caiga en un nuevo default”.
Dónde invertir en medio de la pandemia y posible default
Los bonistas que entraron a los canjes de 2005 y 2010 buscan recuperos menos agresivos. “Buscan capitalizar un posible escenario constructivo y su principal prioridad es mantener las ventajas legales que supone el Prospecto 2005 por sobre el Prospecto 2016”, que otorga mayor protección, según marcó el abogado Dennis Hranitzky, el ex asesor de Paul Singer que ahora representa bonistas reestructurados.
En un comunicado, el grupo de BlackRock y Fidelity hizo hincapié en que sus inversores son “jubilados, maestros y trabajadores” a la hora de rebajar las quitas.
Distancia. “La distancia entre las posiciones está lejos de ser irreconciliable. Argentina tiene espacio para mejorar la oferta sin poner en riesgo la sostenibilidad. Si se modifican los bonos ofrecidos para que el cupón promedio sea de 3,5%, se reconocen los intereses corridos y se devenga intereses desde el principio pero capitalizándolos en los primeros 2 años, los recuperos subirían desde los US$ 34,2 promedio en la oferta del gobierno hacia la zona de US$ 42,6 (descontados al 12%)”, remarcan los economistas, que consideran que una oferta de este tipo “permitiría al gobierno encontrarse (casi) a mitad de camino con los acreedores, permitiendo imaginar un escenario con niveles de adhesión mucho más significativos”.
PV / DS