En una de las peores semanas de la era de Javier Milei en términos de compra de divisas, las reservas internacionales del Banco Central de la República Argentina (BCRA) perforaron los US$ 26.000 millones, tocaron el menor nivel desde enero de 2024 y se acelera el drenaje. Además, la autoridad monetaria se desprendió de más de US$ 400 millones en el mercado cambiario e hilvanó diez jornadas consecutivas con ventas.
Pese al intento del equipo económico de reducir la volatilidad cambiaria mediante el anuncio del Fondo Monetario Internacional (FMI), la sangría de dólares no cesó y las tenencias extranjeras del Central acusaron una merma diaria de US$ 447 millones este viernes 28 de marzo.
Alerta reservas: el BCRA cedió más del 70% de los dólares que compró y crece la sangría de divisas
BCRA en rojo: las reservas cayeron a mínimos desde enero de 2025
La semana corta por el feriado del Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia atenuó la caída acumulada: -US$ 666 millones. Esta merma estuvo apuntalada por un pago al Club de París por US$ 120 millones y adelantos de los movimientos de encajes bancarios propio de fines de mes. De todas maneras, si se amplía el período de análisis al 1 de enero de 2025, la contracción asciende a US$ 5.931 millones.
El egreso de divisas se canalizó a través de tres canillas principales: el pago de deuda extranjera, la intervención en el contado con liquidación (CCL) y la creciente demanda de importadores. Por el otro lado, la liquidación de exportadores y los créditos en dólares sostuvieron la oferta hasta hace poco más de 10 días.
En primer lugar, el Tesoro hizo frente a vencimientos por US$ 4.341 millones con tenedores de Globales y Bonares en enero y la operación impactó de lleno en las cuentas exteriores de la entidad presidida por Santiago Bausili. Se{gundo, el BCRA intervino con casi US$ 2.000 millones en el CCL para mantener la brecha cambiaria en torno al 15%-20% y, de esta manera, evitar una disparada del tipo de cambio financiero. En tercer orden, la mejora de la actividad económica y el fin del impuesto PAIS incentivaron el crecimiento importador que implicó mayor presión sobre el Mercado Único y Libre de Cambios (MULC).
Según el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), los bienes y servicios importados pegaron un salto interanual de 42,3% y mensual de 8,9% en febrero, mientras que las exportaciones aumentaron 10,1% y 1,8% respectivamente. La dinámica del comercio exterior achicó el superávit comercial a tan solo US$ 227 millones -cuando supo tocar un máximo de US$ 2.640 millones en mayo de 2024-, y forzó al Banco Central a vender más divisas.
Dudas respecto al acuerdo con el FMI
Al mismo tiempo, las declaraciones mediáticas del ministro de Economía Luis Caputo sobre el acuerdo con el FMI tensaron la situación. Hace dos semanas, el titular del Palacio de Hacienda señalaba que el monto del nuevo préstamo no estaba definido y, en paralelo, puso en duda la continuidad del crawling peg -microdevaluaciones controladas- del 1% sin aclarar hacia qué esquema cambiario lo reemplazaría.
Desde ese momento, los importadores aceleraron con la compra de dólares para cubrirse ante una eventual devaluación y los exportadores reaccionaron a la inversa: dejaron de ofrecer sus divisas a fin de resguardarse frente a un salto del tipo de cambio oficial a pesar de la rebaja temporal de retenciones que ejecutó el Gobierno. En simultáneo, a ambos lados del mostrador se desarmaron posiciones en pesos para pasarse a la moneda estadounidense e incluso escalaron los contratos de dólar futuro, reflejando el cambio de expectativas del mercado.
Ese combo de factores revirtió la racha compradora del BCRA en el MULC y a partir del viernes 14 de marzo, cerró todas las ruedas con saldo vendedor. En efecto, acumula un rojo de US$ 1.637 millones en las últimas diez jornadas y de US$ 1.013 millones en marzo. A menos que el lunes 31 logre comprar más de US$ 800 millones, lo que luce improbable dado el contexto, cerraría como el peor mes de la administración libertaria en materia de compra de dólares.
Cabe destacar que las aclaraciones de Caputo, sus colaboradores y los funcionarios del FMI respecto a los detalles del nuevo programa por US$ 20.000 millones que evalúa el directorio del organismo multilateral no consiguieron reencauzar el flujo positivo, ya que el organismo encabezado por Bausili vendió US$ 196 millones en el último día de la semana, los dólares alternativos quedaron por encima de los $1.300 y cayeron acciones y bonos.
"Entre las ventas y lo movimientos de encajes de fin de mes era fija que se perforaban los US$ 26.000 millones. El ritmo de venta volvió a acelerar hoy y eso está en línea con un mercado de futuros cuyas tasas implícitas volvieron a alejarse de las tasas en pesos", comentó Gabriel Caamaño, director de la consultora Outlier.
MFN CP