La exhibición fue mucho más que una simple muestra artística; fue un espacio donde la inclusión y la diversidad brillaron con fuerza. Desde la apertura, con un joven con autismo que deslumbró con su acto de magia, hasta las disertaciones que abordaron el impacto de los sentidos en distintas áreas de la vida, Sentidos dejó una marca imborrable en los asistentes.
Entre los artistas participantes, Satori Sol Morales presentó la maqueta de su próxima obra monumental, Fuerza y Liberación. Este proyecto será una fuente de acero inoxidable con más de tres metros de altura, que promete ser una pieza icónica en su carrera, simbolizando la lucha y la resiliencia a través de curvas que evocan permanencia y libertad.
Mariela “Renatta” Renati, artista destacada por el uso de materiales poco convencionales, rompió el plano bidimensional con sus piezas tridimensionales, ofreciendo una experiencia multisensorial que entrelaza la visión con el tacto. De esta manera, desafió la percepción tradicional del arte, rompiendo las barreras con obras que apelan tanto al sentido táctil como al visual.
Laura Cols ofreció una mirada íntima al mundo de las personas con discapacidad, particularmente aquellas con autismo, mediante su serie Sensorial. A través de texturas y transparencias, sus obras invitan a experimentar liviandad, conexión y un profundo sentido de humanidad.
Gonzalo Valkideon, a través del arte, evoca historias y mitos del pasado que resuenan en la gente del presente, conectándola a través del tiempo y el espacio con los personajes encerrados en sus obras. Así, invita al espectador a ser parte de ese pequeño y gran mundo onírico que sus creaciones inspiran.
Las charlas que acompañaron la exhibición aportaron un valioso marco teórico a las obras. Paula Andra Dileo, en su presentación Sintiendo el Aula, exploró cómo los estímulos sensoriales pueden enriquecer el aprendizaje, especialmente en contextos educativos inclusivos. Magalí Pérez, con Sintiendo y Acompañando, analizó el rol de la percepción sensorial en la construcción de vínculos emocionales.
Nika Pedro explicó cómo impactan el sentido de la propiocepción y los estímulos vestibulares en los estados anímicos de las personas con autismo. Además, destacó la importancia de respetar los espacios en los que participan personas con autismo para evitar crisis y asegurar que el disfrute colectivo sea posible.
El evento culminó con un desfile de diseño sustentable liderado por Alejandra Gougi y los estudiantes de la Escuela de Artes de la Fundación Museo Internacional de la Discapacidad María Kodama. La combinación de creatividad, conciencia ambiental y música en vivo —con un saxofón como protagonista— ofreció un cierre vibrante y emotivo, resaltando el poder del arte como herramienta de transformación social.
La muestra Sentidos no solo celebró la diversidad y la inclusión, sino que también recordó la capacidad del arte para trascender barreras y conectar a las personas con su ser más profundo. Cada obra, cada charla y cada momento del evento contribuyeron a crear un espacio donde los sentidos no solo se percibieron, sino que se vivieron en toda su magnitud.
Eventos como este demuestran que el arte puede ser más que una expresión creativa: es una vía para construir un mundo más empático y humano.