Mercedes fue siempre en verdad Claudia. Claudia Victoria Poblete Hlaczik es una de los cientos de hijos robados por los militares del Proceso que vivía con las personas que colaboraron en asesinar a sus padres. Lejos del expediente judicial del caso, que sirvió para derogar las leyes de Punto Final y Obediencia Debida, cerca del latido de Claudia y la familia verdadera que nunca dejó de buscarla, Federico Bianchini, en Tu nombre no es tu nombre, presenta un gran reportaje que significa un gran capítulo del dolor de “heridas que no cierran. Heridas que no sabe si alguna vez se van a cicatrizar. Dice –Claudia– que, la verdad, no tiene forma de saberlo” .
La voz de Claudia modula la reconstrucción que realiza Bianchini, premiado cronista especializado en periodismo narrativo. Porque sus vivencias recogidas en duras entrevistas, como el día que se entera de su verdadera identidad en 2000, o su paso por las cercanías del centro clandestino de detención, tortura y exterminio Olimpo en el porteño Vélez Sarsfield, al cual fueron trasladados sus padres –y donde ella permaneció tres días hasta que la apropiaron los reos Landa–, narran en los huecos y oscuridades. Una de las mayores dificultades de estas historias del horror, y que entorpece la condena definitiva a los genocidas, es que de las trayectorias de los detenidos-desaparecidos como Marta Gertrudis Hlaczik y José Liborio Poblete Roa, padres de Claudia, poco se sabe a partir de que son secuestrados. “Narrar una desaparición es como intentar describir un silencio”, así que el periodista, además de las difíciles palabras de la nieta 64 restituida, recurre en este intenso mapeo emocional a las cintas y testimonios de los reales familiares, las palabras de los jueces intervinientes y archivos de Abuelas de Plaza de Mayo.
“Cuando se mueren los padres, uno queda huérfano; cuando se muere el marido, uno queda viuda; pero cuando se mueren los hijos, no hay palabras que definan ese desamparo. Es lo que nos pasa a nosotros, que no hay palabras”, reflexiona Buscarita Roa, vicepresidenta de Abuelas, madre del chileno Pepe Poblete, militante del Frente de Lisiados Peronista y Montoneros. Papá de Claudia.
En los días de la recuperación del nieto 139 de los más de 400, quedando en muchos casos el límite de no más de treinta años para recuperarlos por una cuestión biológica, el imprescindible alegato de Bianchini dispara preguntas que mellan todavía en familias enteras y la construcción necesaria de la memoria y la justicia. ¿Cuántas personas mintieron a Claudia además de sus padres? ¿Cuántas fueron de alguna manera cómplices necesarias de la apropiación? ¿Y cuánto daño repercute en una sociedad que se acostumbra a la mentira sistémica como forma de vida?
En la versión argentina de este libro de no ficción de Federico Bianchini, que en su tirada original española de 2023 va por su tercera edición, la tapa elegida es Claudia Victoria Poblete Hlaczik sosteniendo las fotos de su mamá y papá. Ella, frente a solo algunos de los 30.400 detenidos-desaparecidos e hijos robados por la última dictadura cívico-militar. Los seguimos buscando.
Tu nombre no es tu nombre.
Crónica de una identidad robada
Autor: Federico Bianchini
Género: crónica
Otras obras del autor: Personajes secundarios; Cuerpos al límite; Desafiar al cuerpo
Editorial: Marea Editorial, $ 22.900