A unos cien kilómetros de San Antonio Oeste y Las Grutas, se ubica la ciudad de Valcheta, fundada en torno a un arroyo y una gran vegetación, y considerada un oasis en medio del desierto.
Hace más de cien millones de años, aquella era una zona húmeda, con grandes bosques y árboles gigantescos. Hasta que una serie de erupciones volcánicas (en el periodo Cretácico) sepultaron bajo cenizas una vasta extensión del territorio. Aquello terminó con la vegetación y dio lugar a un proceso de petrificación de los bosques.
Con el paso del tiempo, durante miles de años las inclemencias del tiempo hicieron emerger los restos petrificados de aquellos bosques y en la actualidad, ese tesoro puede visitarse en el Área Protegida Municipal Bosque Petrificado Valcheta, donde pueden verse troncos petrificados que llegan a medir más de 30 metros (muchos conservados de forma vertical).
Banderas en América
Jorge Luis Borges solía decir que donde hay una bandera, siempre hay un ejército detrás. Y una performance colectiva con 40 banderas, involucraron a un ejército de vecinos que, enarbolándolas, fueron costeando las vías del tren en Valcheta, en el marco de la propuesta ¿Cómo mantener vivo el paisaje? Coordenada Valcheta 40°42′0′′ S, 66°9′0′′ W’.
El proyecto consistió en el desarrollo de un site specific (es decir, pensada para un sitio específico) con gestos del land art –corriente que utiliza elementos de la naturaleza– ideado a partir de la construcción de 40 banderas coloradas con cuatro imágenes que sintetizan elementos del Escudo de Valcheta.
Tras la performance protagonizada por los vecinos de la zona, las banderas fueron llevadas hasta su emplazamiento final, en el Bosque Petrificado.
El evento –curado por Juan Montelpare– albergó un gran número de artistas nacionales e internacionales que vistieron la ciudad a partir de diversos lenguajes artísticos.
“Nosotros venimos trabajando en particular la exploración de diferentes territorios naturales, llevando a cabo expediciones; la primera fue en el Valle de Paravachasca y cuando surgió la convocatoria de la II Bienal en Río Negro, generamos una propuesta específica para el territorio de Valcheta”, cuenta a PERFIL CÓRDOBA Nahuel Sánchez Tolosa, uno de los artistas de Grupo Expedición.
En este sentido, como los ejes curatoriales de la Bienal eran ‘Arte, territorio y futuro’, les pareció importante recuperar cuestiones identitarias de Valcheta. “Inicialmente nuestra idea era recuperar las voces del pueblo y a partir de esos mensajes construir síntesis y representarlas en las banderas. Pero una vez que llegamos allá, empezamos a conversar con ellos y terminamos trabajando con el escudo de Valcheta, que fue diseñado en 1984 y que contiene varios elementos que son representativos y que responden a la pregunta inicial”, explica.
A partir de esa escucha abierta a los vecinos de la zona, fue una niña de 6º grado de una escuela pública, la que aportó el elemento que faltaba: “Ella dijo que dentro de los elementos del escudo faltaba un árbol petrificado, que es sumamente importante por el área protegida del Bosque Petrificado; entonces decidimos utilizar algunos elementos del escudo y agregar la imagen de los árboles petrificados”.
En cuanto a las banderas, la selección tuvo que ver con que éstas funcionan en las sociedades como símbolos que visibilizan y representan diferentes poblaciones, lugares, luchas y resistencias.
“Nos pareció interesante generar estas 40 banderas, que a la vez representan los 40 grados de las coordenadas de Valcheta para poder ubicarlas dentro del mapa. Los elementos representados son el Sol, parte central del escudo de Valcheta; las puntas de flecha que representan las que utilizaba la comunidad mapuche; un símbolo geométrico extraído de un tejido, que son los que realizan en la zona, y el cuarto elemento es la representación de un tronco petrificado”.
Dividida en dos momentos, la propuesta contempló la performance de los vecinos enarbolando las banderas y su posterior emplazamiento en el Bosque Petrificado.
“Los convocamos en una de las plazas principales que tiene Valcheta y desde allí fuimos bordeando las vías del tren porque esa es una ciudad atravesada por la línea ferroviaria, debido a que tuvo su momento de gloria con la extracción de minerales, hoy abandonados; pero el tren en aquel entonces tuvo una gran importancia para el traslado de esas extracciones”.
Planazos para el finde: qué hacer este jueves, viernes, sábado y domingo en Córdoba
Así, la caminata desembocó en el Bosque Petrificado donde se erigieron las banderas, lo que además coincidió con el 22° aniversario del bosque.
“Estuvieron emplazadas durante todo el día y al día siguiente las retiramos y las trajimos a Córdoba. Ahora van a formar parte de una serie de presentaciones que se harán en relación a la obra ‘Cómo mantener vivo el paisaje’”, resume Sánchez Tolosa.
Además de la propuesta artística, los artistas llevaron a cabo talleres con estudiantes de 4o grado de la Escuela Primaria Adolfo Alaniz. “Junto a las infancias realizamos una propuesta gráfica para generar imágenes en diversos soportes que luego devinieron en la construcción de banderas en pequeño formato, que tuvieron consonancia con la propuesta artística presentada para la Bienal”, finaliza Sánchez Tolosa.