Soledad Laciar asistió a la apertura del juicio el pasado 6 de enero y este martes decidió acompañar a Vanessa Cáceres, madre de Francisco, el primer bebé fallecido de la saga, durante la audiencia en la que declaró ante el Tribunal. “Quisiera poder acompañar a todas, pero se me complica por el trabajo”, explicó.
A la salida de la sexta jornada del juicio por las muertes de cinco recién nacidos y los ataques a otros ocho en el Hospital Materno Neonatal, denunció la falta de apoyo político y social hacia estas familias.
En una conmovedora declaración, Soledad Laciar, conocida por su lucha contra la violencia institucional tras el asesinato de su hijo a manos de policías, aseguró que la causa del Neonatal “es más grave que lo ocurrido con Blas”.
Laciar destacó la indiferencia institucional y gubernamental como elementos fundamentales de esta tragedia. Y cuestionó que las familias afectadas no hayan recibido el acompañamiento que ella tuvo en su propio proceso de búsqueda de justicia.
“Me pregunto, ¿qué les falta a estos bebés o qué tenía Blas que estos bebés no tienen? Lo que ocurrió en el Neonatal fue una masacre,” declaró a PERFIL CÓRDOBA, visiblemente conmovida.
Lamentó la ausencia de dirigentes políticos y organizaciones sociales en el juicio, y enfatizó la necesidad de que se involucren activamente para brindar apoyo a las madres y familias afectadas, con el objetivo de exigir justicia.
"Pensé que estas madres tendrían el mismo respaldo que yo sentí, pero no ocurrió. Desde el Gobierno se ha recurrido nuevamente al ocultamiento y al silencio, y eso derivó en esta tragedia,” afirmó.
Solidaridad entre víctimas de violencia institucional
Laciar también reflexionó sobre su motivación para acompañar a estas madres. “Quienes hemos sufrido violencia institucional entendemos lo importante que es sentirse acompañado. Hoy pedí un día de licencia para estar aquí, porque sé lo necesario que es ese abrazo, esa presencia,” expresó.
En la entrevista para PERFIL CÓRDOBA, Laciar cuestionó duramente a quienes desde sus cargos públicos han ignorado esta tragedia. “¿Dónde están las organizaciones que pregonan por los derechos humanos? ¿Dónde están los políticos que critican al Gobierno? ¿Dónde están los oficialistas de buena fe? Estas madres necesitan salas repletas, dirigentes presentes, organizaciones comprometidas.” concluyó.
