Con las primeras luces del día, este lunes a las 6,30 los equipos de las fuerzas de seguridad retomaron la búsqueda de Liam Gael Flores Soraire, de tres años de edad, en Ballesteros Sud.
El pequeño fue visto por última vez el sábado a la siesta en los alrededores de la casa donde vive con su familia, oriunda de Bolivia, en la localidad ubicada a 190 kilómetros de Córdoba Capital. Tienen un cortadero de ladrillos.
Participan 120 efectivos de la Departamental Unión, Patrulla Aérea, Rural y Duar, con 40 móviles, canes, equinos y tres drones. También se sumaron baqueanos y bomberos voluntarios de la región.
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La investigación es encabezada por la fiscal de Bell Ville, Isabel María Reyna quien afirmó que “no se descarta ninguna hipótesis”.
Liam es el penúltimo de seis hermanos. La casa está rodeada de campos de soja y maíz y está alejada de rutas, en una zona de difícil acceso.
En la víspera se hizo presente en el lugar el ministro de Seguridad, Juan Pablo Quinteros, quien supervisó el operativo y este lunes viajan a Ballesteros el fiscal General, Juan Manuel Delgado y la adjunta, Betina Croppi.
La Nación activó la alerta Sofía por lo que la imagen de Liam recorre el país y cualquier persona que tenga datos o lo haya visto puede brindar información al 911.
Hay dos aspectos que dificultan el operativo de búsqueda: el calor extremo y las características de la zona. En la actualidad, explicó la fiscal Reyna, los campos no han sido cosechados. El maíz tiene 1,90 mt de altura y la soja, casi un metro; mientras que Liam no supera los 90 centímetros de alto.
El niño estaba descalzo y sin remera en el momento de su desaparición.
“No descartamos ninguna hipótesis, cada una se trabaja en paralelo”
La fiscal relató a Cadena 3 que comenzaron a tomar testimoniales a los familiares. Hay presencia de psicólogos para su contención.
“Ahora es el momento de que todo lo hablado pueda ser volcado en el sumario para trabajar qué otra posibilidad puede presentarse”, puntualizó y agregó que cada alternativa que se advierte “se trabaja de inmediato en paralelo”.
Liam jugaba con sus hermanos en una bañera con agua colocada fuera de la casa y al lado de un tractor en desuso.
Los más grandes declararon que no vieron cuando el pequeño se alejó. “Ellos se percatan que no está bastante tiempo más tarde”, especificó la funcionaria.
“No perdemos la esperanza, para nada” subrayó la fiscal quien se trasladará nuevamente al lugar durante la mañana.
Desde su perspectiva, a pesar del calor y las condiciones en que estaba el pequeño cuando desapareció, se mantiene intacta la expectativa de encontrarlo con vida. “Los niños tienen más resistencia de lo que imaginamos”, aseguró.
