La ludopatía y las apuestas en línea se han convertido en una problemática creciente entre los jóvenes y menores de edad, quienes se ven atraídos por la facilidad de acceso y la promesa de recompensas rápidas.
En un contexto donde las plataformas de apuestas digitales operan con alcance masivo, estudiantes universitarios y adolescentes sin experiencia previa en gestión de riesgos financieros se enfrentan a prácticas que pueden derivar en adicciones, problemas económicos y efectos negativos en su vida social y académica.
Una investigación realizada en 496 jóvenes de entre 18 y 21 años mostró que, si bien las apuestas en línea representan una forma de entretenimiento, también pueden conducir a comportamientos de riesgo y a problemas serios.
Este estudio, llevado a cabo por la Unidad de Estudios Epidemiológicos en Salud Mental de la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC), reveló que, del 40% de la población estudiantil que participa en apuestas digitales, el 16% experimentó problemas personales y sociales derivados de esta actividad, y el 22% presenta indicios de riesgo.
Los datos indican que los hombres tienden a participar más que las mujeres, y los estudiantes que trabajan (74%) tienen mayores probabilidades de apostar en comparación con aquellos que dependen económicamente de sus familias (35%). Asimismo, los estudiantes de la ciudad de Córdoba son más propensos a las apuestas en línea que los provenientes del interior o de otras provincias.
¿Qué juegan?
De los 196 estudiantes que declararon haber apostado en línea alguna vez, el 53% señaló que su actividad principal son los casinos en línea, el 12% se dedicó únicamente a las apuestas deportivas, y otro 24% mencionó participar en juegos como la lotería, además de los casinos en línea.
Grado de patología
El estudio centró uno de sus principales objetivos en identificar el riesgo de desarrollar comportamientos de juego problemático, conocidos también como "juego patológico". Para medir dicho riesgo, el equipo de investigación empleó la escala South Oaks Gambling Screen – Revised for Adolescents (SOGS-RA), una herramienta ampliamente validada para detectar este tipo de conductas.
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De los encuestados que afirmaron haber apostado en línea, más del 60% no presenta problemas significativos asociados con el juego. Sin embargo, el 16% fue clasificado como "jugador problema", lo que significa que ya enfrentan consecuencias negativas en el ámbito personal, social o académico debido a su relación con las apuestas.
"Las apuestas en línea están lejos de ser una actividad inofensiva para una parte significativa de la juventud universitaria. El hecho de que 16% de quienes han jugado ya presenta problemas con el juego en un contexto educativo como el de la UNC, donde el estrés académico y las presiones sociales son factores comunes, resalta la importancia de intervenir a tiempo", lee el informe.
Entre las consecuencias negativas identificadas en jóvenes se incluyen deudas, aislamiento, falta de concentración, bajo rendimiento académico y ausencias escolares o laborales. "Estos problemas pueden llevar a trastornos emocionales como depresión, ansiedad, tristeza, cambios de humor, insomnio, pensamientos suicidas, trastornos alimentarios, sentimientos de culpa, vergüenza y baja autoestima".
Hacia una respuesta institucional
En Argentina, los casinos en línea actualmente no están bajo una regulación federal; en su lugar, cada provincia tiene la responsabilidad de regular el juego en línea. En 2021, se aprobó un marco normativo en varias provincias, incluida Córdoba, lo que impulsó un notable crecimiento en el sector, que ahora se estima llega a 19 millones de personas en el país. De acuerdo con AFIP, en 2022, los ingresos generados por el sector alcanzaron aproximadamente 2.500 millones de dólares, reflejando un aumento anual del 80% en comparación con años previos.
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"Los resultados de este estudio representan un llamado de atención para las instituciones y sus responsables de políticas de salud", destaca el informe.
Si bien existen opciones de apoyo como Jugadores Anónimos, los autores del estudio subrayan la importancia de evitar prohibiciones absolutas en el juego, dado que las medidas demasiado restrictivas tienden a fracasar en su implementación.
En este contexto, un plenario de comisiones de Diputados avanzó en proyectos destinados a combatir la ludopatía y el crecimiento de las apuestas en línea.
Las iniciativas presentadas por la Coalición Cívica, Unión por la Patria, Encuentro Federal, Democracia para Siempre y el PRO buscan modificar la Ley 26.934, que aborda la adicción a los juegos de azar virtuales en jóvenes y adolescentes. Estos proyectos también proponen un Plan Integral para tratar consumos problemáticos y la prohibición de publicidad de apuestas online, además de restricciones en la publicidad en transmisiones de fútbol profesional.
Desde Encuentro Federal, la diputada Margarita Stolbizer manifestó su apoyo a la norma, al asegurar que "hay que tener conciencia sobre este tema, que toca muchos intereses políticos y económicos".
La diputa Emilia Orozco (LLA) respaldó el dictamen propuesto por el bloque PRO -con algunas disidencias-: "necesitamos normas simplificadas y no más regulaciones". "Es una problemática que necesita de legislación, pero de manera responsable", enfatizó.
