El desempleo en Argentina alcanzó el 6,4% en el último trimestre de 2024 en los principales centros urbanos del país, según informó el INDEC. Si bien esta cifra representa una baja respecto al trimestre anterior, muestra un aumento en comparación con el 5,7% registrado en el mismo período de 2023.
Sin embargo, detrás de esta aparente mejora se esconde una realidad más compleja: la informalidad y el autoempleo de subsistencia siguen en alza. Muchos de los que logran salir del desempleo lo hacen bajo condiciones precarias, con trabajos inestables o por cuenta propia, sin garantías laborales.
En términos de población, de los 29,8 millones de personas que residen en las principales ciudades del país, 14,5 millones conforman la Población Económicamente Activa (PEA). De ese total, 13,6 millones tienen empleo, mientras que cerca de un millón sigue buscando trabajo sin éxito. Si se proyectan estos datos a todo el país, el número de desocupados asciende a 1,47 millones.
Córdoba y una preocupante demanda de empleo
En el Gran Córdoba, el desempleo cerró el 2024 en un 8%, una de las cifras más altas del país. La tasa de desocupación creció un 45% en un año, pasando del 5,5% al 8%. Solo es superada por La Plata (8,1%), Resistencia (8,4%) y Mar del Plata (8,6%).
Más allá del desempleo, lo que más preocupa es la cantidad de personas que, aun teniendo empleo, buscan activamente otro trabajo o más horas laborales porque sus ingresos no son suficientes. Este grupo, conocido como Población Ocupada Demandante de Empleo, alcanzó las 226 mil personas en Córdoba, lo que representa el 27,8% de los trabajadores.
Estos niveles en el Gran Córdoba han permanecido elevados en los cuartos trimestres desde la salida de la pandemia, con 228 mil personas en 2021, 216 mil en 2022 y 227 mil en 2023. En contraste, antes de la crisis de 2018, la cantidad era casi la mitad, con 115 mil en 2016 y 111 mil en 2017.
En total, sumando desempleados, subocupados y ocupados demandantes, 404 mil personas en Córdoba enfrentan dificultades laborales, representando casi la mitad de la población económicamente activa del aglomerado, que asciende a 813 mil.
¿Y ahora?
Según el último informe del Centro de Investigación y Estudios sobre el Mundo del Trabajo (Cetyd) de la Universidad de San Martín, tras la crisis de 2023 y principios de 2024, el empleo primero mostró crecimiento, luego se estancó y ahora comienza a descender, una tendencia que también señala el informe más reciente de Manpower.
Matías Maito, director del Cetyd, explicó que sus datos mensuales confirman el estancamiento previsto, aunque ahora con una inclinación negativa. Este análisis se basa en el Indicador Predictivo del Empleo (IPE), un índice que anticipa la evolución del mercado laboral en Argentina.
Maito advirtió que si los sectores que generan más empleo, como el comercio, parte de la industria y la construcción, siguen sin reactivarse, el panorama seguirá siendo desfavorable. En contraste, señaló que los sectores que están creciendo, como el primario, el complejo energético y el tecnológico, tienen una demanda de mano de obra más limitada.