Esta mañana el juez federal, Alejandro Sánchez Freytes, resolvió rechazar el planteo de inhibitoria que presentaron los abogados defensores del empresario riocuartense, Alicio Dagatti, para que el expediente pase de la justicia provincial a los tribunales del Parque Sarmiento.
El magistrado consideró que no hay razones que justifiquen la competencia extraordinaria de la investigación. Se basó en la naturaleza provincial del delito de narcomenudeo por la cantidad y destino de la droga, en este caso el complejo carcelario de Bouwer.
“Entiendo que de la presentación efectuada por los letrados no surge ningún elemento que me permita encuadrar los hechos en delitos de competencia federal, teniendo en cuenta principalmente la cantidad de droga secuestrada, la forma en que estaba fraccionada, y que su distribución estaba inequívocamente destinada para el consumo dentro del mismo establecimiento penitenciario; es decir que los hechos no se enmarcan en el delito de transporte de estupefacientes sino claramente en la figura de narcomenudeo”, argumentó.
También tuvo en cuenta que ya existe una sentencia previa en la justicia provincial al chofer Néstor Lucero, perteneciente al transporte Bravo, que trasladó un cargamento con cocaína, marihuana, whisky y dispositivos electrónicos escondido en reses del frigorífico Livorno, proveedor del Servicio Penitenciario.
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Sánchez Freytes coincidió con el dictamen del fiscal Enrique Senestrari quien había señalado que la división en dos de la causa, una referida a la entrega de la carga ilícita y otra que profundizó sobre las maniobras de Dagatti, se debió a las especializaciones en que distribuyen la tarea los fiscales provinciales. Todo comenzó con el intento de ingreso de droga y celulares escondidos en reses de carne, el 26 de diciembre del 2023. A partir de ese evento, además de investigarse a los choferes, en Delitos Complejos de la Justicia Provincial se avanzó en las maniobras presuntamente ilícitas pergeñadas por los dueños del frigorífico Livorno de Las Higueras.
Sánchez Freytes sostuvo, además, que la calificación legal de asociación ilícita por la cual está imputado el empresario, su hijo Ignacio, un guardiacárcel, una abogada y dos empleados de Livorno y Bravo, “no afecta intereses federales”.
Dagatti continúa detenido en virtud de que la semana pasada el fiscal de Delitos Complejos, Enrique Gavier, le dictó la prisión preventiva. La estrategia desplegada por sus defensores, Germán Garavano y Matías Pueyrredón, no tuvo eco positivo en la Justicia Federal.
