El mediodía de este jueves 12 de septiembre arrojó una de las escenas más catastróficas con pocos registros en la historia de la ciudad de Córdoba.
Todo comenzó cuando Cristian Pachá, un contador público y exdocente universitario de 68 años, salió de un estudio contable en Nueva Córdoba. Embistió primero a un Gol Trend que circulaba por Chacabuco, a metros de la intersección con Illia, y luego protagonizó una sucesión de choques a otros vehículos concluyendo el raíd con numerosas personas arrolladas. El impacto final ocurrió a 500 metros del inicio del derrotero, frente a una farmacia donde el Toyota Corolla que conducía se estampó contra un poste, a metros de San Jerónimo.
Hay 23 personas afectadas. La víctima más grave es una joven catamarqueña de 20 años que sufrió la amputación de un pie, y que permanece internada en el Hospital de Urgencias con múltiples traumatismos de cráneo y tórax.
El fiscal Ernesto de Aragón quedó al frente de la investigación. Reconoció que hay diferentes hipótesis sobre la causa de lo sucedido, pero que la principal se orienta a la descompostura que habría sufrido Pachá. Por esa razón, descartó al menos por el momento, la imputación de lesiones dolosas. Decidió acusarlo de lesiones culposas agravadas.
El hombre permanece internado en un hospital privado en calidad de aprehendido.
Descartó que al momento de la catástrofe estuviera alcoholizado o intoxicado con otras sustancias.
Precisó que no tiene antecedentes o contravenciones penales.
Consultado sobre la historia clínica, anticipó que hay datos de episodios de desvanecimiento, mareos o falta de coordinación de hace años. “Entendieron que, en función de esto, era previsible un accidente de este tipo”, concluyó.
El expediente tiene secreto de sumario. Pachá aún no declaró ni fue notificado de su situación.
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El abogado defensor, Damián Medina, pidió disculpas públicas a todos los damnificados de parte de Pachá y su familia. Reconoció la responsabilidad civil sobre todos los daños en la salud y los bienes que produjo el derrotero de su asistido.
Pero, también, subrayó que no descartan ninguna hipótesis, tampoco eventuales inconvenientes mecánicos del Toyota Corolla con la que provocó el accidente.
Mencionó dos cuestiones puntuales. “Pedal pegajoso”, un defecto conocido hace más de una década de la versión híbrida automática del Toyota Corolla.
Y también planteó dudas respecto a la forma en que reaccionó el vehículo. “En el primer impacto con el Gol Trend se disparó el airbag y automáticamente debió cortar el flujo de combustible al motor para evitar que el vehículo se incendie. ¿Por qué el auto siguió andando y se desplazó 550 metros más?, se preguntó al ser entrevistado en Cadena 3.
