La especialista en alfabetización inicial e investigadora del Conicet, Ana María Borzone, lleva más de 30 años investigando los procesos lingüísticos y cognitivos implicados en los niños en el aprendizaje de la lectoescritura. Es la autora del programa “Queremos aprender”, enfocado en la alfabetización en primer grado, adoptado por cuatro provincias.
Borzone plantea que los chicos no aprenden porque no les enseñan. Es decir que el fracaso escolar actual no es un fracaso de los chicos; sino de la enseñanza.
En Argentina se aplica una metodología cuestionada y descartada en el mundo que supone la enseñanza no sistemática de la escritura.
En contraposición existe un método probado científicamente –conocido como “conciencia fonológica”– que plantea aprender a leer y escribir palabras con la correspondencia de letras y sonidos y a partir de allí, textos.
En la Facultad de Lenguas de la UNC hace años que también se trabaja con esta idea. Bibiana Amado, doctora en Ciencias del Lenguaje, especializada en alfabetización intercultural, explica que para que un niño aprenda a leer y a escribir, es necesario que una persona alfabetizada le enseñe.
“No se aprende el sistema de escritura por simple interacción: es necesario que haya acciones de enseñanza sistemática”, sostiene.
En este sentido, cuando los niños no han sido acompañados de modo adecuado en su proceso de alfabetización, no logran adquirir las habilidades necesarias para leer y escribir. Esto significa –dice– que no dominan los conocimientos de todas o de algunas de las dimensiones vinculadas con la lectura y la escritura.
El ministerio de Educación publicó el calendario completo del ciclo lectivo 2025
“Para revertir esta situación a la edad que fuere, es necesario que se lleve a cabo un proceso de intervención basado en una propuesta sólida, de acciones sostenidas en el tiempo, una propuesta que esté elaborada a partir de los fundamentos teóricos y metodológicos de las teorías socioculturales integradas con la perspectiva de la psicología cognitiva y de las neurociencias”, opina.
María Fernanda Freytes, magister en Lingüística Aplicada a la Enseñanza de la Lengua y profesora de la UNC, explica que el problema de la alfabetización no es sólo aprender a escribir las letras sino que se trata de un proceso de inmersión en la lectura, en el mundo letrado; eso implica múltiples opciones, no es sólo repetir letras. “Muchas veces la metodología de la conciencia fonológica se ve desde un punto de vista reduccionista. Ana Borzone no sólo tiene propuestas para el aprendizaje del sistema, el principio alfabético, letra-fonema, sino que tiene una propuesta de escritura compartida, lectura dialógica donde el docente va interactuando con el alumno para fomentar la comprensión. En la UNC hace años que trabajamos en esta línea”, explica.
Freytes considera que en Córdoba esta metodología es bastante resistida, pero los docentes demandan esta formación porque ven que muchos alumnos no aprenden a leer y escribir, tienen enormes dificultades, sustituyen letras inadecuadamente, incluso en grados avanzados.
En Córdoba, el Ministerio de Educación promueve métodos integrados. “El foco de atención está puesto en el proceso de alfabetización de cada estudiante y desde esa práctica situada y personalizada se da respuesta (...) Se toma de cada enfoque (conciencia fonológica y socio constructivismo) aquello que aporta valor y que atiende al objetivo de este plan jurisdiccional de alfabetización”, indicó el ministro Ferreyra.