Un importante grupo de vecinos de 43 barrios del noreste de Córdoba capital vienen manifestando desde hace unas semanas su firme oposición a la decisión del Ministerio Público Fiscal (MPF) de instalar un centro de detención en la Comisaría 13, ubicada en Diagonal Ica al 1000.
Pablo Farías, vecino de Nueva Italia y vocero del reclamo de esa comunidad, expresó su preocupación por el impacto negativo que esta medida podría tener en la tranquilidad, seguridad y en la calidad de vida de los residentes en los barrios de la Seccional 13. También criticó la falta de consulta y transparencia en el proceso.
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En una entrevista en el programa Punto y aparte (Punto a Punto Radio 90.7), Farías destacó que la comisaría, cuya sede se emplaza en terrenos donados en 1960 y construida con aportes de los vecinos, se convertirá en un Centro de Recepción de Personas Aprehendidas en Flagrancia (CRPPA), lo que generará “un constante flujo de móviles policiales, familiares de aprehendidos y un aumento de la inseguridad en la zona”, advirtió.
“Lo que es hoy un barrio tranquilo se transformará en un lugar de constante movimiento policial y traslados de detenidos. Es un verdadero desatino”, dijo.
El vecino comparó esta decisión con un proyecto similar que fue rechazado en avenida Manuel Cardeñosa debido a la presión de los habitantes del sector, y cuestionó por qué ahora se busca implementar en la Seccional 13 sin considerar alternativas menos perjudiciales.
“En Cardeñosa se planeaba construir un edificio adecuado para este fin, pero aquí se intenta usar un viejo edificio donado por los vecinos, lo que es aún peor”, indicó.
Farías también denunció la falta de información sobre el proyecto: “No hay carteles, no se sabe quién ejecuta la obra, cuánto cuesta ni cuál es el presupuesto asignado. Todo se está haciendo a escondidas”.
Reunión con la Fiscalía General
Ante esta situación, los vecinos organizaron una reunión con el flamante fiscal general adjunto, Alejandro Pérez Moreno, y el fiscal Raúl Garzón, cita que se concretará el próximo lunes. Durante el encuentro, los residentes expondrán sus preocupaciones y buscarán alternativas para la ubicación del centro, proponiendo terrenos fuera de zonas residenciales: “Cerca de la avenida de Circunvalación sería más viable”, señaló Farías.
Y agregó: “Vamos a pedir que se suspenda la obra y se busque un emplazamiento más adecuado. No podemos permitir que se altere la tranquilidad de nuestro barrio de manera permanente”.
Movilización vecinal
Además de la reunión con las autoridades, los vecinos planean realizar una asamblea el martes a las 19 horas en Diagonal Ica para informar a la comunidad sobre los avances y decidir las próximas acciones. Farías no descartó la posibilidad de nuevas protestas si no se atienden sus reclamos.
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“Los vecinos ya vivimos bajo rejas debido a la delincuencia existente. Este centro no previene el delito, sino que atraerá más problemas a la zona”, concluyó Farías, quien instó a las autoridades a reconsiderar la decisión y buscar soluciones consensuadas con la comunidad.
Un grupo de legisladores y de concejales de la oposición presentaron una resolución y una declaración de solidaridad y acompañamiento al rechazo vecinal a la ubicación de un centro de detención (CRPP) en un sector residencial de la zona Noreste.
