En el marco de la apertura del año judicial 2025, encabezada por el gobernador Martín Llaryora y el presidente del Tribunal Superior de Justicia, Luis Angulo, decenas de empleados judiciales realizaron una ruidosa protesta en los Tribunales 1 de Córdoba, reclamando por salarios que, según denuncian, los mantienen "bajo la línea de pobreza".
La manifestación, organizada por trabajadores autoconvocados, incluyó un "abrazo simbólico" al edificio y consignas contra la conducción de la Asociación Gremial de Empleados del Poder Judicial (AGEPJ, el gremio de judiciales), a la que acusan de "inacción" frente a la crisis salarial.
Uno de los voceros del movimiento explicó en diálogo con el programa Última Pregunta de Radio Continental Córdoba que el conflicto estalló por la "precarización extrema" que sufren, con ingresos que en algunos casos no superan los 700 mil pesos mensuales.
"Gran parte de la planta está con salarios por debajo de la línea de pobreza. Incluso los ingresantes cobran como si fueran empleados de un ministerio, no de Justicia", afirmó. Criticó además al gremio por no convocar medidas de fuerza y detalló que, ante la falta de respuestas, se organizaron mediante un grupo de WhatsApp con más de 1.000 adherentes.
Recién este viernes, un rato antes de la protesta en Tribunales 1, la comisión directiva de AGEPJ convocó a un paro provincial por 24 horas, sin asistencia y sin marcación para el martes 1 de abril.
Un reclamo que crece
La protesta no fue aislada: durante las últimas semanas, los trabajadores autoconvocados realizaron asambleas masivas en distintos edificios judiciales, donde exigieron un aumento urgente del 40%, la equiparación con los salarios de la Justicia Federal y el fin de los contratos precarios. El malestar escaló hasta tal punto que, en una asamblea en Tribunales 2, el secretario general del gremio, Federico Cortelletti, fue abucheado y hasta sufrió una descompensación por el estrés del momento.
Los manifestantes también rechazaron un proyecto de reestructuración salarial presentado por el Poder Judicial, al considerarlo "insuficiente", ya que solo beneficiaría a una parte de la planta. "Hay compañeros que no tendrán ningún aumento, y eso es inaceptable", sostuvo el empleado.
El contraste: el acto oficial con Llaryora
Mientras los empleados protestaban, en el Salón de los Pasos Perdidos del Palacio de Justicia se desarrollaba el acto protocolar, con la presencia del gobernador Llaryora, ministros y autoridades judiciales. El presidente del TSJ, Luis Angulo, destacó los "avances en celeridad procesal" y el "compromiso republicano" de la Justicia, sin hacer mención al conflicto salarial.
Luis Angulo: "Hoy nuestro compromiso es seguir haciendo para mejorar el servicio de justicia"
Llaryora, por su parte, evitó referirse al reclamo, aunque su gobierno es señalado por los trabajadores como responsable del congelamiento de las paritarias. La tensión quedó en evidencia cuando algunos funcionarios tuvieron que salir escoltados por la policía ante el clima de protesta.
Con una nueva asamblea convocada para el 4 de abril, los empleados judiciales advierten que no bajarán el tono de su protesta. "No vamos a permitir que nos sigan empobreciendo", cerró el entrevistado en radio.
¿Qué piden los judiciales?
- Aumento de emergencia del 40%.
- Derogación del aporte por enfermedades catastróficas.
- Equiparación con salarios de la Justicia Federal.
- Pase a planta de contratados.
- Mejoras edilicias y en condiciones laborales.