A horas de iniciar el juicio en contra de dos excadetes de la Escuela de Aviación Militar por abuso sexual de una compañera de un curso inferior, el principal acusado se habría quitado la vida. La modalidad de su muerte es motivo de una investigación en Pilar, Buenos Aires, donde residía desde hace tiempo.
El proceso había sido programado por la Cámara 2a del Crimen, en sala Unipersonal a cargo del juez Sebastián Romero. Debía comenzar hoy. En la jornada de ayer, el tribunal recibió la trágica noticia de la muerte del principal imputado en el expediente.
Había contactos entre la defensa y el fiscal de Cámara, Martín Berger, para llegar a un acuerdo de prisión efectiva a cambio de la confesión en un juicio abreviado, teniendo en cuenta la contundencia de la prueba que reunió la investigación preliminar que estuvo a cargo de la fiscal (jubilada) Alicia Chirino. El mínimo previsto para el abuso sexual agravado es de seis años de prisión. Hasta ahora nunca había sido detenido.
En esta nota se omiten los nombres de acusados y de la víctima por el impacto que causó el desenlace del caso y por la forma en que pueden afectar a familiares de las partes los detalles del abuso.
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La acusación. Todo sucedió en la madrugada del domingo 19 de mayo de 2019 en la casa de dos aspirantes de la misma institución. En ese ámbito privado, la noche anterior un grupo de cadetes pertenecientes al segundo año -entre los cuales estaba la víctima- habían convenido una reunión social. Alrededor de las 2:30 de la madrugada llegaron a ese encuentro dos cadetes de cuarto año de la misma escuela.
Tras una importante ingesta de alcohol, se produjeron los hechos relatados por la joven que, en ese momento, tenía 19 años. El primero fue una invitación de ambos a la víctima para un trío sexual, lo que ella rechazó. Le siguieron tocamientos y luego, uno de ellos, perpetró ataques sexuales en varias ocasiones hasta casi el mediodía.
De los dos acusados, este último es el que tenía la imputación más grave y se enfrentaba a la pena de por lo menos seis años de prisión efectiva. A horas de enfrentar el juicio se habría quitado la vida.
Queda pendiente el proceso para el otro compañero pero su situación es sensiblemente menos gravosa.
En paralelo, siguen las demoras en la Justicia Federal donde no se mueve el expediente en el que se investiga a personal y funcionarios de la Fuerza Aérea y la Escuela de Aviación Militar por el hostigamiento y los obstáculos que la víctima debió sortear a partir de hacer la denuncia.
