La Justicia Federal sobreseyó a tres miembros del Ejército en la causa en la que se investigaba un ritual de iniciación a 35 soldados en Córdoba.
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Absueltos
“Todo surge por un bautismo de paracaidismo donde en vez de arrojarse harina como generalmente se hacía, se arroja cal y eso produce daños en una cierta cantidad de soldados", explicó el abogado defensor Ricardo Raed.
"Luego de una abultada prueba se llegó a la convicción de la no participación de los efectivos en dos de los delitos achacados, particularmente amenazas y coacciones, y en la falta de participación punible en cuanto al delito de lesiones leves y de abuso de autoridad", agregó en declaraciones a Telefe Córdoba.
Además destacó la "actuación brillante de la Justicia federal" y reiteró que "el sobreseimiento alcanzado es totalmente correcto porque nunca hubo en el caso del jefe de patrulla, que era el endilgado de las lesiones y del abuso de autoridad, un conocimiento sobre la ilicitud de su conducta".
Y luego añadió: "Nunca hubo tampoco una conducta dirigida a producir un daño sino fue más bien un hecho lamentable obviamente, pero accidental".
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"Nunca tuvieron conocimiento de que se arrojaba cal"
"Los jefes de patrulla a los cuales se les achacaba el delito inicialmente nunca tuvieron conocimiento de que se arrojaba cal", enfatizó el letrado.
Raed recordó que "la cal se encontraba aparcada en ese depósito en bolsas negras y al lado, la harina también en bolsas negras". "Eran elementos que se utilizaban para marcar mesas de arena donde los militares hacen los juegos de guerra tácticos en ambientes cerrados", precisó.
"Estos soldados tomaron la bolsa que era de cal. De hecho en la misma declaración de los soldados que fueron víctimas de la cal que se les arrojó manifiestan que el jefe de patrulla, el cabo primero Ortega, uno de mis defendidos, es el que al detectar que es cal grita inmediatamente: ´Esto no es harina, esto no es harina, es cal´ y da la novedad a viva voz, suspendiéndose en forma inmediata el bautismo", detalló Raed.
El "bautismo"
El episodio, en el que resultaron intoxicados unos 20 soldados, ocurrió el 17 de mayo de 2024 durante "un rito de iniciación" para celebrar la finalización del entrenamiento de los jóvenes paracaidistas del Regimiento 14.
JMP
