COLUMNISTAS
BRICS

Argentina y el regreso del Sur Global

2023_09_10_guerra_afp_g
Guerra. Ha colocado a diferentes países en una posición destacada. | AFP

En el marco de la decisión de los países que conforman los Brics de invitar a la Argentina a sumarse como miembro pleno, es necesario analizar el tema en un contexto más amplio y con una perspectiva histórica. 

Un disparador de este debate fue el artículo publicado en Foreign Affairs “The Return of the Global South. Realism, Not Moralism, Drives a New Critique of Western Power”, escrito por Sarang Shidore.

Como muchos autores, coincidimos en que la guerra desatada por Rusia ha colocado a un grupo de países reunidos en parte en lo que antes era el Movimiento de no Alineados en una posición destacada de la geopolítica mundial. Siguiendo al autor, es prudente no solamente analizar la gran disputa sino-norteamericana, sino también “las maniobras de las potencias medias e incluso de las potencias menores”.

Esto no les gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
Hoy más que nunca Suscribite

Estos países, como sostiene el autor, tienen intereses individuales y materiales, poca organización institucional, y están alejados en términos de reclamos ideológicos. En este sentido, la foto actual que presenta su argumento no observa el desarrollo futuro que muestra una cada vez mayor capacidad de agencia colectiva; el agrupamiento en los Brics con numerosos foros temáticos y un banco de desarrollo propio, así como un marcado interés político-normativo en reformar el sistema internacional en sus organismos de funcionamiento o, al menos, incidir de manera robusta en sus decisiones. 

Metas y resultados

Ciertamente, la lógica de No Alineados y del Tercer Mundo, propia de la Guerra Fría, se ha reconfigurado y el esquema del orden mundial dentro de una interdependencia hegemónica se ha reestructurado. Aquí cobra sentido el análisis que plantea Roberto Savio en “De Bandung al No Alineamiento Activo: historia y lecciones”. Colocar la Conferencia de Bandung de 1955 como el inicio de este proceso no es tan acertado, porque este encuentro “fue una reunión sobre colonialismo”. Si lo fue, la Declaración Dasasila, basada en la Carta de la ONU que inspiró a los No Alineados, que desarrolla un esquema de cooperación Sur-Sur como pilar del Grupo de los 77. Finalmente, en Belgrado en 1961, se conforman los NOAL, previa Declaración de Brioni de 1956. Recordemos que en la invasión a Afganistán por parte de la URSS fue votada en contra por 59 países no alineados. El logro máximo de este grupo fue la aprobación del Nuevo Orden Económico Internacional por parte de la Asamblea de las Naciones Unidas en 1974. 

Sobre estos basamentos históricos es que consideramos que el Sur Global tiene en su ADN un componente ideológico y praxeológico que lo dinamizan y lo ubican como un espacio bajo “dos nortes”, al decir de Russell y Tokatlian: un norte europeo-norteamericano y un norte sino-asiático. Recordemos el origen del Tercer Mundo que analiza Alfred Sauvy como un espacio colonial comparado al Tercer Estado francés, “ignorado, explotado y despreciado” de la Francia prerrevolucionaria.

Argentina, globalización y desarrollo

Asimismo, dos informes marcan su inicio terminológico y señalan su condición política: “North-South: A Programme for Survival”, de 1980, y “The Challenge to the South: The Report of the South Commission”, de 1990.

Erróneamente, reafirmamos, el primer autor citado considera que es el carácter individual de estos Estados del sur el que marca su característica global. En realidad, este argumento marca una intención de petrificarlos en su incapacidad de agencia grupal y organizada.

Consideramos que dos formas de poder deberían estructurarse para darles fortaleza en el nuevo orden global: una coordinación de oposición en todos los organismos internacionales en que se encuentran. Asimismo, hacer valer su peso en el diseño de la nueva geopolítica de la seguridad alimentaria y energética del mundo.

Argentina se encuentra de hecho en este espacio en reformulación. Debemos aprovechar los beneficios del bloque para nuestro desarrollo inclusivo pero marcando firmemente nuestras diferencias en materia de valores –como derechos humanos y regímenes autocráticos–. Asimismo, equilibrar esta dinámica con la inserción en los “dos nortes”, en la resurgida Europa y en América Latina, ahora globalizada en el sur. 

*Profesor. Miembro Consultor del CARI.