El anuncio de Donald Trump donde establecía el cobro de aranceles para distintos países que planeaban exportar hacia Estados Unidos sin duda revolucionó el comercio exterior y Argentina no se queda atrás, a eso se le suma el impacto en la competitividad tras la devaluación del real brasileño. Ante este panorama, este medio dialogó con el analista económico, Ezequiel Vega.
Estados Unidos desató una “guerra arancelaria” a nivel global
Desde que Estados Unidos impuso aranceles a las importaciones de China, Canadá y México, varias naciones respondieron con medidas similares. "Corea del Sur, India y Vietnam elevaron los aranceles sobre el aluminio chino en más del 25% para proteger sus mercados", explicó Ezequiel Vega. Esta situación también podría impactar en la Unión Europea y afectar al comercio mundial.
Argentina enfrenta el riesgo de una menor competitividad en sus exportaciones hacia Estados Unidos. "El país tiene un arancel promedio externo del 16% con Estados Unidos, y con las nuevas medidas, Washington podría aplicar un arancel equivalente, lo que encarecería los productos argentinos", alertó Vega. Esta situación podría afectar las exportaciones argentinas, que hasta ahora gozaban de menores gravámenes.
La industria siderúrgica y el aluminio quedaron expuestos a los aranceles de Trump
Los sectores más expuestos a estas modificaciones incluyen la industria siderúrgica y el aluminio. "Cuando Trump anunció los aranceles al acero y aluminio, las acciones de empresas argentinas como Tenaris y Aluar cayeron durante dos días consecutivos", recordó el entrevistado. Sin embargo, señaló que estos sectores podrían encontrar oportunidades en mercados regionales como Chile, Ecuador, Colombia y Brasil.
El sector agroindustrial también enfrenta desafíos. "Algunas empresas del agro han declarado que no pueden afrontar sus obligaciones financieras debido a la caída de las exportaciones", mencionó Vega. Aunque el Gobierno redujo los derechos de exportación del 33 al 24%, la incertidumbre cambiaria y la alta presión fiscal dificultan la competitividad.
La negociación del Gobierno y los riesgos de una devaluación
Según el analista económico, es crucial que el Gobierno negocie mejores condiciones comerciales con Estados Unidos. "La relación con Trump podría ser clave para obtener beneficios arancelarios que mitiguen el impacto en las exportaciones", sugirió. También resaltó que el tipo de cambio juega un papel fundamental: "Si el real brasileño devalúa, Argentina perdería competitividad y, con ello, inversiones y empleo".
Además, la apreciación del peso argentino podría agravar los problemas de exportación. "El costo laboral medido en dólares es alto, lo que encarece la producción local. Mientras tanto, el consumo interno sigue cayendo y muchas empresas miran hacia otros países para vender sus productos", detalló Vega.
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