Mercado de limones: por falta de comercialización, se perdió parte de la producción

El déficit de producción de limones no solo ha limitado el suministro local, sino que también ha impactado en las exportaciones, generando una disminución en los ingresos de los productores y alterando el equilibrio del mercado. De hecho, se calcula que a nivel mundial se perdieron unas 400 toneladas.

Cuál es la problemática con la industria de los limones

Para hablar sobre este tema, Canal E se comunicó con Elsa Rangoni, presidente de la Asociación de Citricultores de Bellavista, quien explicó que la falta de comercialización “está causando serios problemas en la industria de los limones, ya que no hay demanda para la mercadería”. 
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egún la entrevistada, al no haber demanda no se pudo entregar la producción a las fábricas y “se perdió una parte considerable de la cosecha”.

Hasta esta semana, “la fábrica recibía limones solo los jueves y viernes, mientras que el resto de la semana se dedicaba a procesar naranjas”, contó Rangoni y explicó que esta situación significó que “la fruta se quedó en espera, madurando y cayendo al suelo, ya que no se pudo entregar a tiempo”.

A qué se debe la pérdida mundial de toneladas de producción

Al ser consultada sobre la pérdida de 400 toneladas de limones a nivel mundial, la entrevistada aseguró que se debe a que la comercialización de limones está estancada, “lo que ha llevado a la fábricas a reducir la compra de mercadería”. Y agregó: “Sin poder vender su jugo y esencia, la industria no procesa limones, causando el problema de la falta de demanda”.

Con respecto a los destinos de las ventas de limones, Rangoni contó que en invierno, la mayor parte de la venta para los productores es a la industria, ya que el mercado de frutas frescas es menor en esta temporada. Sin embargo, “la baja demanda en la industria hizo que enviar limones a supermercados o mercados resulte económicamente inviable”, siguió.

En cuanto a la pérdida económica, la entrevistada aseguró que, “es significativa” y se estimada en “unos 400.000 dólares para la ciudad de Bellavista”. Y destacó que, al no poder llevar la fruta a la industria, se afectaron los fletes y la cosecha, “impidiendo que los productores realicen tareas esenciales como la poda”.

Para cerrar, Rangoni agregó: “Esta situación también redujo los ingresos de los productores, afectando su capacidad para mantener y cuidar sus plantaciones”.